La utopía

Rubén Martín

La reciente difusión de videos en México con presuntos actos de corrupción se ha convertido en una lucha libre en lodo en la que todos los actores políticos tratan de ensuciar al adversario lo más que puedan, mientras presumen de estar limpios. Lo cierto es que nadie se salva.

Y el lodo ha manchado al impoluto Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en los videos difundidos por sus adversarios a través del emisario Carlos Loret de Mola y su portal Latinus, que se está convirtiendo en canal preferido por el antilopezobradorismo.

A pesar de que AMLO quiere minimizar el video donde aparece su hermano Pío recibiendo un paquete con cientos de miles de pesos, y así evitar el daño a su imagen, difícilmente podrá impedirlo.

Y no sólo por los ataques de sus adversarios y posibles futuros videos con casos comprometedores. No, la razón por la que López Obrador no podrá evitar el daño es porque eliminar la corrupción, como ha meta central de la Cuarta Transformación, es una utopía.

La mal llamada transición a la democracia nos demostró que no solo los priistas podían ser corruptos. Los casos de corruptelas de gobiernos del PAN, del PRD y otros partidos se cuentan por miles. La alternancia mostró que todos los partidos son corruptos, aunque haya excepciones entre algunos de sus militantes.

Conozco políticos del PRI, PAN, PRD, Morena y otros que son honestos, y sin embargo sus partidos no lo son.

Para el caso que nos ocupa, yo no dudaría de la honestidad de AMLO, en ello ha basado su imagen como político, pero tampoco no dudo de la corrupción en Morena, aunque en este momento no llegue a las dimensiones que alcanzó en el PRI, PAN y PRD.

¿Es entonces la corrupción un asunto cultural como pretendió justificarla Enrique Peña Nieto? No, porque él se refería a la idiosincrasia de los mexicanos y sin embargo la práctica de la corrupción es universal, si hablamos de la actual economía-mundo capitalista. Hay corrupción en países de América Latina, en China, en Francia, como en Estados Unidos. Por ejemplo, es un hecho histórico que el padre de John F. Kennedy se asoció con la mafia para ayudar a su hijo a ganar las elecciones frente a Richard Nixon en 1960 (como lo cuenta Anthony Summers en su libro Oficial y confidencial. La vida secreta de J. Edgar Hoover, Anagrama 1995).

A pesar de ser una práctica generalizada, el sistema liberal simula combatir la corrupción porque es una narrativa necesaria para la legitimación del sistema. Los gobernantes y clases dirigentes no pueden asumir que sus organizaciones y gobiernos practican actos de corrupción de modo habitual para cumplir sus objetivos de llegar y permanecer en el poder.

Por eso una falsa perspectiva liberal del deber ser de los sujetos y prácticas del sistema predica la necesidad de combatir la corrupción, sancionar a quienes cometen dichas prácticas y prometen saneamiento del sistema. Pero eso es imposible. La teoría crítica prueba que la corrupción es una práctica consustancial al sistema simple y sencillamente por los fines que persiguen sus actores e instituciones.

No es cierto que los políticos trabajen para favorece el bien común; con notables excepciones, los políticos profesionales trabajan para sus fines personales de fama, protagonismo y de enriquecimiento patrimonial. Muchas veces todo eso junto.

Aterrizando estas ideas al actual debate político en México, podríamos resumir que ya que otros escándalos como los de Raúl Salinas de Gortari, Genaro García Luna, y Emilio Lozoya nos confirman los grados de extrema corrupción que existió en anteriores sexenios en México.

El video donde aparece Pío López Obrador recibiendo dinero en efectivo de un asesor político y destituido en un cargo del actual Gobierno es una muestra de los fines de los partidos: su acceso al poder sin importar los medios. AMLO dice que es una contribución económica del pueblo, pero igualmente puede que sus modos de recolección de fondos hayan violado las leyes electorales.

Por más honestidad que presuma, López Obrador no puede impedir que el resto de los dirigentes de Morena y el mismo partido en su funcionamiento reproduzcan las prácticas de corrupción que los hacen ganar adeptos, crecer, triunfar electoralmente y disfrutar el poder.

Probablemente AMLO logre disminuir la corrupción en ciertos ámbitos del Poder Ejecutivo, pero no es cierto que con su sólo ejemplo logre domar y menos eliminar la corrupción en México.

Porque, como asenté arriba, la corrupción es una práctica política consustancial al sistema. Coincido con Pablo González Casanova en esta perspectiva: “En tanto modo de dominación y acumulación, el capitalismo añade a sus relaciones constitutivas otras muy importantes de mediación y mediatización, de represión y negociación. En ellas la corrupción y la cooptación aparecen y reaparecen como formando parte fundamental del sistema” (Corrupción y capitalismo, UNAM enero 2007).

Por eso eliminar la corrupción en México es una utopía, aunque se lo proponga con buenas intenciones la Cuarta Transformación. La única manera de abolir la corrupción es cambiando el sistema. Y eso es otra discusión.

SOS COSTA GRANDE

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

Este lunes, más de 30 millones de estudiantes de todos los niveles escolares dieron inicio al ciclo escolar 2020-2021, en condiciones históricas por la pandemia de covid-19 en México.

Pese a que otros países decidieron aplazar mejor el inicio de las clases, México, al contrario, diseñó un modelo de clases a distancia, para garantizar que los estudiantes reciban desde casa las clases correspondientes al grado que están cursando, pues el gobierno en todos sus niveles determinó que la pandemia no puede detenernos ni estancar a los estudiantes en su preparación académica.

En Estados Unidos, por ejemplo, muchos estados autorizaron el retorno a clases presenciales, desde el nivel preescolar incluso, hasta el de preparatoria y profesional, tomando las medidas de control correspondientes. Claro, no en todos, pero la inmensa mayoría de los estadounidenses está en lo suyo, atendiendo sus negocios. Habiendo pasado por la cuarentena correspondiente, parece que lo que sigue para ellos es continuar, pese a las críticas en contra del gobierno de Trump por los decesos que, si somos conscientes, eran inevitables, tal cual sucede en México, donde primeramente ha sido imposible mantener a la gente en su casa, esperando la muerte económica, la quiebra y la ruina.

Pero este inicio de clases no es histórico únicamente por el método elegido, sino por los contrastes económicos y sociales que salieron a relucir una vez más, pues mientras que los niños nacidos en hogares ricos tienen a su disposición lo mejor de la tecnología cibernética y saben cómo manejar los programas de enseñanza adoptados por el gobierno federal, los niños de clases sociales bajas, que difícilmente han tenido acceso a este tipo de tecnologías, se conformaron con un viejo televisor, para recibir clases a distancia, a través de la señal de televisión abierta.

Desde que se fraguó la reforma educativa de Enrique Peña Nieto se les hizo notar que el atraso tecnológico para millones de hogares era precisamente lo que limitaba y dificultaba el nuevo modelo educativo, comenzando por los profesores, quienes de un día a otro se reconocieron ignorantes del uso de tecnologías básicas de la educación, pues muchos de ellos se habían formado en el tradicional pizarrón, gis y borrador. ¡Ah!, sin faltar la regla que pega.

En esta etapa en la que es obligatorio el uso de tecnologías, los profesores demostrarán de qué están hechos. Los niños también. Son precisamente estos los que nos van a sorprender, porque pareciera que traen chips tecnológicos archivados, y los grandes pueden auxiliar a los pequeños en estas artes.

Lo digo por experiencia, que los hijos son autodidactas en materia de tecnologías digitales, conocen el lenguaje y, es sólo cuestión de tiempo para que aprendan cómo usarlas.

El lenguaje audiovisual no les es ajeno, pues han crecido con él. A diferencia de las viejas generaciones, quienes éramos de libro, cuadernos y pluma, hoy son de Tablet, Smartphone, computadora, etcétera. Saben navegar, instalar, desinstalar y miles de cosas que para nosotros son un dilema, y que nos está obligando a estudiar para no quedar en la prehistoria educativa y de la información.

Será un ejercicio excepcional. Los profesores desde sus hogares, los estudiantes desde su propia casa, con los padres vigilando, conectados únicamente por una señal de Internet o de televisión, de algún modo vendrá a modificar nuestro estilo de vida.

Muchos padres que habían estado alejados de estos asuntos, tendrán que involucrarse, y aprender cosas nuevas.

Los profesores, por su parte, acostumbrados a una relación más cercana e íntima con los estudiantes, pasarán a comunicase con ellos mediante mensajes en dispositivos electrónicos.

Y aunque nada sustituirá nunca la relación personal maestro-alumno, tampoco hacerlo de este modo es despreciable. Al final de cuentas, se cumple la teoría de Marshal McLuhan: vivimos ya en una aldea global.

SOS COSTA GRANDE

(Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

Morena tres problemas que resolver en el corto, mediano y largo plazo. De entrada, el escándalo del video del hermano del presidente AMLO, Pío López Obrador, recibiendo dinero hace 5 años, de una persona ligada al ex gobernador de Chiapas y hoy senador de la República por el Partido Verde Ecologista de México, filial del PRI.

Pero este es un asunto que no le compete tanto al partido, como al presidente de la República, sabiendo que lo que el mandatario determine, ayudará o debilitará al partido que él mismo fundó y que lo llevó al poder.

Recordar solamente que la ley permite la aportación de particulares para asuntos electorales, y castiga con multas los excesos, por considerarlos faltas administrativas. Pero recibir dinero de gobiernos y de grupos delincuenciales, es un delito tipificado como delincuencia organizada, y parece ser éste el caso de Pío López Obrador.

De lo que el presidente determine esta semana, dependerá, con mucho, lo que sucederá con Morena en lo sucesivo.

En segundo lugar está la elección para renovar la dirigencia nacional, que por órdenes del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), se resolverá por una encuesta abierta a cargo del Instituto Nacional Electoral, y por lo cual los líderes del partido -salvo el diputado federal Mario Delgado-, andan con la espada desenvainada, pues eso implica que sea una institución y no la militancia y los órganos del partido, los que decidan sobre un asunto de estricta observancia interna.

Este lunes, se tiene considerada una manifestación en el INE, de parte de personajes como Alfonso Ramírez Cuéllar y otros, entre ellos el diputado federal por la Costa Chica, Rubén Cayetano García, quienes están denunciando que este es un albazo para Morena.

No obstante, cabe recordar que el mismo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, avaló la decisión del TEPJF y del INE, porque los involucrados en esa elección fueron incapaces de ponerse de acuerdo en cuanto al método. Luego entonces, tiene que ser la autoridad electoral la que determine el asunto, porque están de por medio los intereses de la militancia, por encima de los intereses de los dirigentes.

Recordemos que, desde el año pasado, hacia el mes de noviembre, se tenía que realizar esta elección, en la que estaban peleando el cargo tanto el diputado Mario Delgado, como la entonces dirigente nacional, Yeidckol Polevnsky, y Berta Luján, así como el monrealista Alejandro Rojas, que fue quien denunció todos los abusos que se estaban fraguando, pues estaban dejando fuera a los morenistas que se adhirieron al partido después de 2015, año de la primera elección en que participó Morena, y sin tomar en cuenta a quienes se sumaron durante la campaña de 2018.

Rojas Durán pidió la intervención de las autoridades y éstas pararon la elección, y ordenaron a Morena rehacer el procedimiento.

Hoy, no volviendo a ponerse de acuerdo de nuevo, el INE toma el control, por decisión del IEPJF, y solamente el diputado Mario Delgado está festejando, y ya tiene en redes sociales su campaña interna a todo lo que da, exponiendo los logros de Morena en la Cámara de Diputados, pues no olvidemos que él es el líder de la bancada morenista en San Lázaro.

Y, finalmente, Morena tiene enfrente el inicio del proceso electoral que culminará en 2021, con la renovación de 15 gubernaturas, ayuntamientos y congresos.

Esto implica alianzas con otros partidos, garantizar la cuota de equidad de género -y para Guerrero la de grupos indígenas y migrantes-, y un largo etcétera. Pero muchas cosas que sucedan en lo local dependerán de lo que ocurra en lo nacional. Los grupos políticos ya perfilados en Morena, se darán hasta con la cubeta por conseguir cargos, y podemos afirmar que será peor de lo que vimos en 2018, donde la cerrazón e intereses de un grupo muy reducido, reventaron la alianza con el Partido del Trabajo, partido que querrá competir de nuevo en igualdad de circunstancias y no solamente en sus cotos de votación, que son limitados, además.

Claro que el resto de los partidos de los partidos vivirán su propio proceso, pero dice un dicho que el que mucho gana el que nada tiene que perder, pues ya lo perdió todo. Por eso se dice que en política no hay enemigo pequeño.

SOS COSTA GRANDE

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

Para limpiar una casa tan sucia y grande como es México, se necesita más que una denuncia penal que, además, ya se filtró sin haber concluido el debido proceso. Esto significa que la querella puede caerse en cualquier momento, como se han caído tantas otras en las que no se cuidan los detalles.

Primero, fue la filtración de un video en la que empleados del Senado de la República, ligados al PAN, recibían bolsas de dinero de un empresario ligado a Odebrecht.

Pero luego, el jueves, se filtró prácticamente toda la denuncia de Emilio Lozoya, ex director de Pemex. El documento original circuló por todos los medios y redes sociales, con todo y su contenido, que comenzó a ser desmenuzado por los periodistas y opinadores, así como por gente común.

Así supimos que Lozoya denuncia que el ex presidente Carlos Salinas de Gortari nunca se fue, sino que siempre estuvo aquí. Esta vez cabildeando a favor de los panistas, y también cabildeando a favor de uno de sus hijos, Juan Cristóbal, quien es empresario del ramo petrolero, siempre detrás del titular de Hacienda, Luis Videgaray Caso.

Siempre se dijo que Enrique Peña Nieto era el figurín del Grupo Salinas en la presidencia, y que éste se conformaba con dinero y regalos caros, permitiéndole a Salinas mover a Videgaray en todos los asuntos más importantes.

Pero Lozoya no deja lugar a dudas, al exhibir con pelos y señales cómo es que operaba esta red de corrupción, que incluía a otros secretarios como José Antonio Meade, quien venía del gobierno panista de Felipe Calderón; así como Gerardo Ruiz Esparza, de la SCT.

Lozoya exhibe quién se encargaba de cobrar los diezmos de Peña Nieto, mientras Salinas, a través de su concuño, movía todos los hilos de la reforma energética tan agresiva que los senadores panistas y priístas terminaron aprobando a fuerza de cañonazos de dinero, y también a cambio de dinero extra para sostener sus proyectos políticos para las gubernaturas que estaban peleando, como la de Tlaxcala, Querétaro y Tamaulipas. Éstas dos últimas las ganaron, y hoy están exhibidos y obviamente descalificados para pelear la presidencia de la República, como esperaban, para 2024.

Más aún, Lozoya afirma que lo corrieron por disposición de Carlos Salinas de Gortari, y en su lugar como director de Pemex quedó José Antonio González Anaya, precisamente el concuño del innombrable.

Cuando fue llamado a Los Pinos para lo de su renuncia, Peña Nieto prácticamente le diría que era un obstáculo para sus intereses.

Y, bueno, el caso es tan grave y tan nauseabundo, que más vale que cada quien se entere bien a bien de qué es lo que se cocinó en el sexenio pasado.

Pero por el momento, lo preocupante es que alguien está moviendo este asunto tan delicado, con fines políticos. Como dicen los expertos en derecho, están cambiando votos por justicia, y eso no se vale.

El mismo presidente de la República declaró ayer en la mañanera que la denuncia que anda flotando en el ambiente cibernético es genuina y que él mismo la estaba leyendo.

Lo que había sido una jugada maestra de su gobierno, al poner a Lozoya no sólo a decir lo que sabe, sino a presentar él mismo la denuncia contra los que robaron a manos llenas al pueblo mexicano, puede convertirse en la carroza de la Cenicienta, y convertirse en calabaza en cualquier momento.

¿Y qué habremos ganado los mexicanos con este culebrón? Nada. Puro chisme, puro teatro, puro circo.

Urge que el presidente de la República ponga orden. Que la fiscalía se apegue al debido proceso y garantice justicia. Que mande citar a los ex presidentes y se les finquen responsabilidades.

La telaraña venenosa ya está cubriendo al país: Los implicados están alegando que son víctimas de persecución política, y están contrademandando.

¿Era necesario darles esa oportunidad? ¿No habría sido mejor anunciar el asunto cuando ya estuvieran las fuerzas federales tocando su puerta con la debida orden de aprehensión en mano?

Si esto sigue así, nos quedaremos con las ganas de ver justicia en los bueyes del compadre del presidente. Al tiempo.

SOS COSTA GRANDE

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

La alianza PRI-PRD-PAN es un hecho, pero el cuarto en ese proyecto, el partido Movimiento Ciudadano, todavía no toma una decisión al respecto. Su líder en el estado, Adrián Wences Carrasco, dijo que irán a las elecciones de 2021 sin alianzas ni coaliciones.

Eso, claro, aún está por verse. No vemos cómo el líder nacional del partido naranja, que es una franquicia de Dante Delgado Rannauro, no quiera hacer alianza con el PRI y el PAN, porque ya lo hizo en 2018 con PRD y PAN.

Dante es alguien que ya perdió la brújula ideológica, y no tendrá empacho en aliarse también con el PRI, máxime cuando en diversas cartas ha venido exponiendo diversos problemas con el presidente Andrés Manuel López Obrador, sobre todo relacionados con el gobernador de Jalisco, su correligionario Enrique Alfaro Anguiano.

Ahora bien, es posible que los emecistas de Guerrero decidan salirse de los pactos de Dante, como en 2018 lo hizo el líder del PT, Victoriano Wences Real.

No olvidemos también que el próximo año viviremos cuatro distintas elecciones, y de éstas 3 serán locales, y una de índole federal.

Luego entonces, Dante sólo puede pactar con PRI, PRD y PAN, para la selección de diputados federales, sobre todo porque la oposición tiene la consigna de ganar la mayoría de los 300 distritos federales, para hacer del Palacio Legislativo de San Lázaro un contrapeso al Palacio Nacional.

Sin embargo, en las 3 elecciones locales, como la de gobernador, la de alcaldes y la de legisladores locales, el partido podrá estar o no estar en esa alianza, de acuerdo con sus conveniencias.

Se sabe de gente que no está de acuerdo en esas alianzas, que los obligarían a hacer campaña con sus acérrimos enemigos de otros partidos. No olvidemos que donde más se caldean los ánimos es en las elecciones para presidentes municipales, y que estos procesos electorales se convierten prácticamente en batallas campales, donde los candidatos se dan hasta por debajo de la lengua, y quedan los pueblos divididos y las familias enojadas.

Ahora mal, a la salida de Luis Walton Aburto del MC para buscar la candidatura a gobernador por Morena, pocos de su partido lo siguieron. Más bien, el partido permanece y hoy lo dirige alguien que ni siquiera es emecista, pero sí alguien muy cercano al ex gobernador Ángel Aguirre, quien desde hace tiempo ha venido colocando sus fichas en el ajedrez político, para que llegado el momento poder dar jaque mate.

Por ejemplo, Aguirre también tiene injerencia en el Partido Acción Nacional, a través de la diputada panista Lupita González Suástegui, pues el padre de ella, don Proceso González, fue siempre afín al aguirrismo.

No será la primera vez que el ex mandatario haga este juego de fuerzas políticas. Ya una vez lo logró, cuando se postuló él mismo para gobernador. Y ahora volverán a repetir la hazaña, en tratando de contener a Morena y su proyecto llamado la 4 Transformación.

Además, en las elecciones de 2015 y 2018, se pudo ver a los aguirristas compitiendo por diversos partidos, señal de que tienen la consigna de arribar al poder por cualquier vía.

Hay gente en los ayuntamientos, por ejemplo, que era priísta y lo siguieron en su aventura como perredista. Luego se les ha visto en MC, PT y hasta en Morena.

Las encuestas determinan que MC no ha crecido realmente en guerrero. Igual que el Partido Verde y el PT, los espacios que ha logrado han sido porque prestó su plataforma para gente desplazada del PRD.

La preferencia electoral para el partido naranja, de hecho, es muy baja a nivel estatal, y a nivel nacional salvaron el registro por un pelito.

De acuerdo con Wences, el acuerdo de ir solos fue tomado durante una sesión del consejo en diciembre de 2019. “En una reunión de consejo, entre otros puntos se acordó que en esta elección 2021 íbamos solos, sin coaliciones, sin alianzas, sin candidaturas comunes, con candidato a gobernador propio y a todos los demás puestos de elección que van a estar en la competencia electoral, hasta ahora esa la decisión”, comentó.

No obstante, Wences olvida que la política es de coyunturas, que nada está escrito y pronto veremos a Dante Delgado enviando a alguien o viniendo personalmente a dictar línea.

SOS COSTA GRANDE

(Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

El terreno político se va despejando poco a poco. Beatriz Mojica Morga, ya aclaró dudas y expuso que va a competir por la candidatura a gobernadora por el Partido del Trabajo, por invitación del líder nacional del partido, Alberto Anaya.

La experredista entrará de lleno a la coalición del PT con Morena, pero ya como una propuesta firma a la gubernatura. La jugada de Bety Mojica es excelente, pues en lugar de tratar de meterse a Morena como “externa”, lo hará desde una situación de igualdad, como una aliada. Por lo tanto, nadie le podrá decir que no tiene derecho a competir, ni tampoco a ser la candidata, en caso de ganar la encuesta abierta que dijo el líder de Morena que harían.

De momento, el cobijo del PT para Bety Mojica no garantiza la candidatura y mucho menos el triunfo. Pero ella le apuesta a que ha hecho una larga vida política en Guerrero, que es muy conocida a lo largo y ancho de la entidad; y que de no haber sido por la traición de Luis Walton Aburto, habría ganado la elección de 2015.

Claro, sus adversarios tienen sus propias apuestas, y cada cual sus fortalezas y debilidades. La de Bety, de entrada, es que es mujer y puede competir ampliamente si se define que en Guerrero la candidatura sea por género, porque recordemos que el partido debe presentar 50 por ciento de candidaturas femeninas, y sin duda elegirán a quienes tengan mayores posibilidades.

A menos que suceda en Morena lo que ya hemos visto en el PRI y el PRD, quienes mandan a las mujeres a perder, mientras a los hombres los mandan a competir por los partidos aliados. Es así que muchos priístas se han hecho verde-ecologistas, engordando a este partido con el voto tricolor, y se han dado el lujo de reclamar esas plazas como propias.

En sus declaraciones recientes, Bety Mojica afirmó que ya limó asperezas con Walton y están de acuerdo en trabajar por el proyecto lópezobradorista, una vez que ambos vieron el desmoronamiento de sus partidos por sus errores y alianzas indecibles, como la que trabaron con el PAN en 2018, apoyando a Ricardo Anaya Cortés.

Nos preguntamos si esto es suficiente para enmendar los errores del pasado, cuando sus proyectos políticos se perdieron por un capricho.

Ahora mal, tampoco es una garantía que Walton o Bety respeten la decisión que se tome en Morena. Solamente si el partido garantiza piso parejo, con una encuesta abierta, salvando la tentación de una imposición, es que se podrá conjurar el fantasma del divisionismo y el chapulineo.

No olvidar que Bety trabajó para el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero hasta el último momento de su mandato, como secretaria de Desarrollo Social, y no cabe la menor duda de que el ex mandatario la atraería a la alianza opositora si fuera necesario. Y con ella, también se iría Luis Walton Aburto, quien le debe al Jefazo su triunfo en Acapulco, pues forzó un acuerdo entre MC y PRD, que ya para 2015 Walton no quiso respetar y se fue solo, aunque sabía que iba a perder.

El ex perredista Félix Salgado Macedonio es otro que estaría en riesgo de dejar Morena, si le hacen de chivo los tamales. El Toro sin Cerca no está dispuesto a que lo desplacen, y nada le costaría volver a su redil, con todo y su gente -que por lo menos en su natal Tierra Caliente es mucha-; por lo tanto, la encuesta abierta es urgente y necesaria en el partido guinda, pues sólo de ese modo se garantizaría la unidad.

Sin embargo, los que serían huesos duros de roer son los seguidores de Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, el delegado de la Secretaría de Bienestar en Guerrero, quienes ya se sienten con un cuerpo en Casa Guerrero. Estos tampoco estarían dispuestos a apoyar a quienes no ven ni como morenistas, ni como lópezobrarodistas.

Por lo tanto, nada está escrito en Morena. Todo puede suceder, incluso una derrota anticipada, si los líderes del partido no saben mover las piezas y hacen movimientos en falso.

SOS COSTA GRANDE

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

Tremendo borlote se armó este lunes en el país, luego de que mediante redes sociales comenzó a circular un video en el que se observa a ex funcionarios del Senado de la República -uno de los cuales es el secretario particular del gobernador de Querétaro-, recibiendo pacas de billetes en una bolsa de plástico transparente.

De inmediato, el gobernador queretano, el panista Pancho Domínguez, despidió a su colaborador y se deslindó de las jugosas cantidades recibidas en tiempos en que gobernaba este país el priísta Enrique Peña Nieto.

Ese dinero habría sido parte de los sobornos que los senadores y diputados federales recibieron del gobierno de Peña Nieto para aprobar la reforma energética sobre todo, como ya se ha ventilado en el Caso Lozoya, ex director de Pemex, quien es “testigo de oportunidad” y se ha dicho dispuesto a revelar los entretelones de la corrupción en México, a cambio de que se le considere a la hora de que el gobierno revise sus propias demandas por desfalcos en Petróleos Mexicanos.

El material se divulgó a través de un canal de Youtube, a nombre Juan Jesús Lozoya, hermano del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, aunque horas después de que se viralizó, los abogados de Juan Jesús se deslindaron, y dijeron que interpondrán una demanda en contra de quien haya suplantado su identidad para divulgar el material, que sería prueba de los sobornos que dio el gobierno de Peña Nieto a diputados y senadores, para que votaran a favor de sus reformas.

El video deja muchas dudas a los internautas, porque nunca señala claramente la cantidad exacta que se entregó, y que fue guardada dentro de una maleta negra marca Fun. “Son 500, 501, igual, una 250, dos de 100 y una de 50”, dicen los participantes al revisar las bolsas con dinero en efectivo y en denominaciones de 500 y 200 pesos.

Ante la confusión de los montos por los billetes de 200 y 500 pesos, quien hace la entrega aclara que en total son 12 y cada una es de 200 mil pesos.

Lo que sí queda claro, es que no es la primera vez que se entrega, pues en el diálogo Rafael Jesús Caraveo Opengo, entonces secretario técnico del Senado, aclara: “Te iba a comentar, en el otro creo que no eran 19, eran 18.

—Ah es un consecutivo ahí pero…

—Sí nada más para que…

—Lo checan, lo checan

—¿Le pongo 19 a éste?

—Si quieres ponle 19 pero ¡ah! no, es que no son consecutivos de ustedes, yo llevo un consecutivo, vamos, interno, el pasado sí eran 19 -explica el hombre que entregó el dinero.

Por lo tanto, se entiende que esa era la 19 entrega de dinero entre el supuesto funcionario de Pemex y Caraveo Opengo, quien era colaborador del senador panista José Luis Lavalle

Esta grabación comenzó a difundirse desde el domingo 16 de agosto bajo el título “El video de Emilio Lozoya” (Prueba de Soborno).

También muestra en la entrega de dinero a Guillermo Gutiérrez Badillo, exfuncionario del Senado y quien hasta ayer se desempeñaba como secretario particular del gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, mismo que al conocer los, anunció en sus redes sociales que lo despidió, y se deslindó desde luego de las jugosas sumas de dinero.

“Aquí se ve cómo se recibe dinero para contratos con Pemex”, señala el canal recién creado con el fin de difundir la grabación.

Todo esto sucede a menos de un mes de que comience el próximo proceso electoral, y justo cuando PRI, PAN y PRD, buscan una alianza que les permita pasar juntos el vendaval político que desató sobre ellos la 4T.

SOS COSTA GRANDE

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

El PRD tiene nueva dirigencia y se prepara para el encontronazo electoral de 2021. De hecho, todos los partidos políticos ya renovaron o van a renovar a sus liderazgos, y eso impactará directamente en el proceso interno de selección de candidatos, en primera instancia, y en el proceso en general y la relación de cada partido en el marco de las alianzas con otros institutos políticos, en segundo lugar.

Es interesante cómo el PRD terminó alineado con la visión del ex gobernador Ángel Aguirre Rivero, algo que ya habíamos previsto en este espacio. A pesar de la rebatinga inicial de gente como Evodio Velázquez y los Reyes, que comenzaron a moverse por su cuenta la margen del grupo del ex mandatario, en busca de posicionarse como aspirantes a la gubernatura, finalmente terminaron metidos en el mismo guión que desde diciembre de 2018 dictó la Izquierda Progresista Guerrerense, y estamos a meses de ver cómo el partido amarillo consuma una alianza histórica con el PRI.

¿Por qué lo decimos? Porque es la visión del ex gobernador Aguirre Rivero. Es algo que él nunca ha ocultado, y que cuando desde dentro del PRD lo cuestionaron por hacer semejante propuesta indecorosa, él respondió en el sentido de que los perredistas estaban locos si pensaban enfrentar a Morena solos, pues carecían de posibilidad alguna para lograr ya ni siquiera el triunfo, sino cuando menos cosechar algunos frutos que los mantuvieran a flote y vigentes en el escenario político-electoral.

Y tiene razón Aguirre. Aunque los perredistas hicieran el intento por recuperarse como partido, y aunque hoy menos que nunca es deseable la alianza con el PRI, habiendo sido desplazados como el principal partido de izquierda por Morena, la verdad es que no tienen opciones.

Las encuestas colocan al PRD en una posición muy desfavorable, incluso por abajo del PAN, con apenas 6.4 por ciento de la preferencia electoral, de acuerdo con la última encuesta difundida por Massive Caller.

Este mismo sondeo revela que Morena tiene en este momento 41.7 por ciento de la preferencia electoral en Guerrero.

Le sigue de lejos el PRI, con 13.7 (el partido tricolor ha bajado unos 5 puntos en los últimos meses). Y el PAN ocupa y 7.9 por ciento de la preferencia de voto.

El MC y el PT, por cierto, no alcanzan a figurar en esta encuesta, lo que los ubica de plano fuera de toda posibilidad de competir por los cargos de elección popular que están en disputa, al menos de manera general. Por lo tanto, estos partidos se refugiarán en los municipios y regiones donde tienen sus nichos.

El plan entonces que tendrá que a echar a andar de inmediato el diputado Alberto Catalán Bastida, es comenzar a tejer la alianza con el PRI y el PAN, hacia dentro y hacia afuera. Es decir, que tendrá que comenzar a delinear un discurso que convenza a las bases del partido amarillo, que ya son muy escasas por cierto, porque los líderes y jefes de tribus ya están más que de acuerdo.

Si juntáramos el 13.7 del PRI; el 7.9 del PAN y el 6.4 del PRD, suman 28 puntos porcentuales. Es decir, que aún juntos los tres partidos de oposición, quedan a 13 puntos debajo de Morena.

La preocupación de los perredistas se entiende, así como su desesperación. El panorama que tienen no es nada alentador y se verán obligados a una alianza que puede terminar por hundirlos como partido.

La otra opción es “aguantar vara”, pasar esta elección sólo defendiendo sus espacios nicho como lo harán el PT y el MC, sabiendo que sólo eso tendrán, en espera de mejores tiempos.

Pero, claro, los líderes ya decidieron otra cosa y eso harán. El PRD, el otrora partidazo de izquierda en Guerrero, va a una alianza con sus eternos enemigos: el PRI y el PAN.

¿Qué pasó con Evodio Velázquez que era el más sácale-punta en este dilema? Pues nada, que negoció y se conformó con la secretaría general del partido, en la persona de Ivette Díaz Bahena.

SOS COSTA GRANDE

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

AMLO está en Guerrero. El presidente de la República llegó desde anoche, y viene -dicen- a supervisar algunas obras en Acapulco.

Es el momento oportuno para que el presidente también revise los avances de la pandemia y que nos diga las expectativas económicas para la entidad, donde por el momento sólo vemos un cielo gris y muchos nubarrones, por la tormenta que se avecina.

No, no hemos tocado fondo en materia económica. A la par que la pandemia avanza desde las grandes ciudades a las medianas, y de ahí a las comunidades, todavía nos cuelgan unos 3 meses, por decir lo menos, de sufrir contagios y muertes.

Los que aún estamos a salvo de la pandemia, no podemos cantar victoria, nadie puede. A estas alturas ya no se trata de evitar los contagios, sino de curarlos. ¿Qué no hay cura? No hay una cura específica, pero ya mucho hemos dicho que la experiencia en la calle dicta que una atención oportuna es lo ideal, para evitar que la gente llegue a los hospitales ya en estado de gravedad, algunos ya moribundos.

Pero en este renglón muy poco se está haciendo. Hemos pedido en este espacio que los médicos aglutinados en colegios y asociaciones se reúnan para tomar algunos acuerdos en cuanto a los tratamientos.

Pero, finalmente, todo pasa por una oportuna atención. No pueden estar enviando a la gente a su casa, sin darles absolutamente nada para bajar la carga viral, dejando todo al azar, esperando que sanen por sí mismos.

Podemos afirmar en este espacio, por enésima ocasión, y esperando que las autoridades tomen una decisión al respecto, que están olvidando algo esencial. Tener Covid, no debería ser sinónimo de muerte, si el sector salud se hubiese preparado para curarlos en etapas tempranas, no para hospitalizarlos ya cuando estuvieran graves.

Si nos fijamos, todo el gasto que se hizo -y de manera tardía, cuando ya la pandemia estaba en su apogeo-, fue en la reconversión de hospitales, proceso que tampoco se cumplió del todo; en compra de ventiladores, en equipo médico para las salas covid.

Pero en cambio se dejó a los centros de salud la ingrata tarea de hacer las pruebas de diagnóstico, siempre a petición de la gente porque no ha habido una búsqueda intencionada de casos, pero sin darle a los pacientes una opción de tratamiento mínimo, sólo con la indicación de que si se agravara, volvieran o fueran al hospital más cercano.

¿Por qué se ha hecho eso? Hoy parece que la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheimbaum, está revirtiendo este proceso equivocado, dando prioridad a la atención temprana, tal y como dicta el protocolo de salud en cualquier enfermedad, no sólo en el Covid.

Si se trata de cáncer, la detección oportuna es clave para dar un tratamiento oportuno. Y hasta se dice que el cáncer es curable si se detecta tiempo. En la hipertensión, el enemigo silencioso, por igual. Y así sucesivamente, en todas las enfermedades el criterio es detectar y atender.

En este caso, sin embargo, comenzaron al revés. Se prepararon para un tercer nivel de atención, se prepararon para hospitalizar a los enfermos graves, pero no para atenderlos cuando apenas comenzaban.

Podemos apostar que, si hubieran utilizado un criterio normal, médicamente hablando, no tendríamos esos casi 60 mil muertos. Tal vez tendríamos el más de medio millón de contagios acumulados, pero la tasa de mortalidad sería mínima, tal y como al principio se pronosticó.

Ahora están gastando pólvora en infiernitos, culpando a la industria alimenticia de haber engordado a este país. Y sí, no defendemos a los vivales que nos venden productos llenos de azúcar como si fueran algo sano, pero ese no es el problema central, sino la falta de atención médica a los pacientes de Covid-19.

El reto para todo paciente es atajar la neumonía. ¿Y cómo se va a lograr eso? Medicándose. ¿Con qué? Con lo que se tenga a la mano en materia de antibióticos y antivirales. Hay casos de éxito que deben ser recogidos de la calle y la medicina privada. Urge. ¿Por qué esto no se ha hecho?

Llevamos meses escuchando un dantesco recuento de enfermos y muertos. Ni decir el viacrucis de quienes están intubados, con vida artificial. ¿Y para cuándo la atención médica?

SOS COSTA GRANDE

(Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

Excelentes noticias recibimos ayer, del canciller Marcelo Ebrard Casaubón, quien anunció anoche que se tiene un acuerdo con los laboratorios Astra-Zéneca para que nuestro país, junto con Argentina, y con recursos de la Fundación Carlos Slim, fueron elegidos para producir 250 millones de dosis del biológico que esa empresa inglesa desarrolla contra el Covid-19.

¿En qué consiste ahí la participación de Slim? En la aportación de recursos con fines humanitarios -como asistencia social-, para facilitar las últimas pruebas del biológico de Astra-Zéneca.

De no resultar aprobados, el dinero que Slim aporte quedará perdido, y de ahí la importancia de sus donativos.

Esa aportación privada, además, permitirá a los países latinoamericanos acceder a esta vacuna a precios mucho más razonables. El precio se calcula que estará entre 3 y 4 dólares la dosis, a diferencia de otros biológicos que se están cotizando desde ahora en 30 dólares o más por dosis.

Se destaca también el modelo de Astra-Zéneca para facilitar la producción de vacunas, sin depender de sus laboratorios centrales y filiales. Este modelo implica la participación de los países interesados, y como en este caso de América Latina, también la participación de capital privado.

Astra-Zéneca ya tiene convenios similares con Estados Unidos, Gran Bretaña y la Unión Europea, así como con la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias, una coalición público-privada con sede en Noruega, y la Alianza de Vacunas GAVI, una asociación público-privada establecida en Ginebra. 

También con laboratorios de India, Rusia y Corea del Sur.

Con este modelo de producción y distribución, Astra-Zéneca pone un paso adelante; porque, aunque Rusia madrugó esta semana con el anuncio de que ya tiene su vacuna lista, la Sputnik V, así como otra ya probada en humanos, que comenzará a aplicar en el mes de octubre y a producir masivamente, con una meta inicial de 1 millón de dosis, no tendrá capacidad de distribución mundial.

Por eso, decíamos, el modelo de Astra-Zéneca elimina las barreras del tiempo y espacio, y de este modo México podrá aspirar a que se tenga una vacuna para nosotros con un año de anticipación.

Es decir, que ya se había previsto que, aunque se comenzaran a producir vacunas en 2021, las limitantes tecnológicas y financieras impedirían que se nos surtiera, sino hasta 2022 y por eso la insistencia de que el Covid-19 estaría entre nosotros entre 2 y 3 años más.

Con este acuerdo, los primeros biológicos estarán listos para distribuirse en el primer trimestre de 2021.

A Dios gracias se tiene en este momento un equipo de relaciones exteriores muy capaz, encabezado por el canciller Marcelo Ebrard, quien este jueves dará los detalles del acuerdo con Astra-Zéneca.

No cabe duda que Marcelo Ebrard es el miembro del gabinete lópezobradorista con mejor desempeño, en todos los aspectos, y crece su imagen de cara a las elecciones de 2024 con este acuerdo.

En plena crisis por Covid-19, se nos da una buena noticia desde fuera, aunque dentro todavía estemos muy lejos de que el equipo de salud, tanto de la Federación como de las entidades federativas, estén a la altura de los retos impuestos por la pandemia.

A escala internacional, hay una carrera desesperada por hallar una vacuna. Son 6 las que están en desarrollo y con amplias posibilidades de ser aprobadas, una vez que se cumplan los protocolos internacionales. No se incluye la de Rusia, porque claramente la OMS dijo que no ha pasado la tercera etapa de pruebas, y el subsecretario de Salud en México, Hugo López Gatell, sería antiético que se aplicaran sin concluir todas las fases.

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