Palabra de Mujer

Ruth Tamayo Hernández

Morena: defender lo indefendible

Dirigentes: PRD vivito y coleando

“El poder lo cambia todo hasta el punto de que resulta difícil decir quiénes son los héroes y quienes los malvados”: Libba Bray.

Mis estimados, en pocas palabras el coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Mario Delgado, defendió con uñas y dientes a los legisladores morenista integrantes del Congreso local de Baja California, en relación a la ampliación del periodo del gobernador electo de esa entidad, Jaime Bonilla, y responsabilizo de la dichosa reforma a los legisladores locales del PRI y del PAN.

Y esto es cierto, que los legisladores del PAN son mayoría en el Congreso de esa entidad; sin embargo, el de la idea de ampliar el periodo del gobernador electo fue el diputado de Morena, Víctor Morán, con el argumento de que un periodo de dos 2 años sólo genera gastos al erario, mientras que un periodo de 5 años beneficiaría la economía local. ¿Qué tal?

Entonces, como dicen en mi rancho, que me pongan donde hay, de lo demás yo me encargo. Jojojo. De tontos no tienen un pelo los legisladores de Morena; que se hagan, es otra cosa. Ellos propusieron la reforma constitucional, que fue aprobada con el apoyo de la mayoría panista y priísta, así como del resto de los partidos enanos, y eso es infracción a la ley, porque dice un dicho popular que tanto peca el que mata la vaca, como el que le agarra la pata.

Aunque diga Mario Delgado que le llama la atención que no aprobó la reforma una mayoría morenista, y que se le hace sospechoso el tema de la reforma, lo cierto es que la aprobaron. Pero como en México todo se vale, no va  a pasar nada, pues dejó bien claro el coordinador de la bancada morenista en la Cámara de Diputados, que no procedería una desaparición de poderes en Baja California.

Dijo que toca a la Comisión Nacional de Honestidad de Justicia de Morena determinar si los diputados morenistas podrían ser sancionados.

Pero no va a pasar nada en ese Congreso, pues no están para saberlo ni yo para contarlo, pero ayer estuvo el diputado federal Mario Delgado con el presidente Andrés Manuel López Obrador, y lo más seguro que van a pasar por alto la infracción del Congreso local de Baja California. Y de hecho la sugerencia de Mario Delgado lleva esa dirección, al mencionar que en la parte jurídica se deberá determinar si la ampliación del periodo de gobierno es legal, ya que en la parte política sí es condenable que haya una reforma donde hay un claro beneficiario. “Claro que es grave porque es una reforma que tiene un claro beneficiario”, recalcó. Y entonces, ¿qué esperan para actuar?

No obstante, el diputado federal buscó los medios para justificar la ineptitud de los diputados morenistas; culpó a los diputados locales del PRI y PRD, pero ellos también votaron la reforma y ya todos sabemos que lo hicieron por dinero, no porque los obligaron.

A estas alturas no hay justificación que valga. Cada error trae sus consecuencias y los diputados morenistas tienen que asumirlas. El error del Congreso local de Baja California lo tomaron los dirigentes del PRD como una afrenta a la política; y en la plenaria del partido en las cámaras de Diputados y Senado de la República, llamaron a promover juicio político contra los 21 diputados locales bajacalifornianos, así como la desaparición del Congreso local y alcaldes que violaron la Constitución en esa entidad.

Además, pidieron iniciar por todas las vías la acción de inconstitucionalidad y un amparo ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación, porque la ciudadanía votó por un gobierno de dos años.

¡Vaya!, revivieron los dirigentes del PRD; estaban extintos, pero con la falla del Congreso bajacaliforniano revivieron y divisaron más cerca el 2021, pues ellos creen que pueden hacer alianza con Morena para recuperar espacios en los congresos.

Por ejemplo, los dirigentes del PRD presumen que el Sol Azteca en Guerrero ganó la mayoría de Municipios y eso los mantiene vivitos y coleando. Según ellos, claro, pero lo cierto es que la militancia perredistas está muy lejos de la casa del PRD. Otros andan con medio cuerpo en Morena y otros de cuerpo completo ya están en el partido lópezobradorista.

Varias de las cabezas de grupo del PRD se fueron a Morena y otros coquetean de lejecitos y mandan a su gente de oídas para medir el agua a los camotes; inclusive, algunos personajes que ostentaron cargos de primer nivel en el estado de Guerrero andan practicando el amor al prójimo, para tener acceso al cuadro de primores.

Pero no todos van a ser aceptados en Morena. Recuerden que el dueño de Morena le abrió las cuatro puertas a la militancia perredista, incluidos los dirigentes, en el Estado de México, pero les aclaró que la adhesión era antes de la elección. “Si no vienen ahora, nunca más entrarán en alianza con Morena”. Y no le hicieron caso, entonces ganó el primo de Peña Nieto esa gubernatura, y la perdió la candidata morenista, la profesora Delfina. Digo, les recuerdo esto porque creo ya se les olvidó, pues algunos perredistas andan bien desesperados buscando alianzas con Morena.

En Guerrero, por ejemplo, en los municipios más grandes del estado como Acapulco, Chilpancingo, Iguala, Taxco e Ixtapa-Zihuatanejo, los morenos de plano nada quieren con los perredistas; hasta la amistad perdieron algunos que eran amigos de años, pues los morenos se creyeron bien eso de que son los únicos honrados del planeta, y no quieren saber de los perredistas. Y peor que se dice que el PRIMOR es una realidad en Guerrero.

Lo cierto es que Morena nada quiere con el PRD y menos alianzas con ellos. Por eso el diputado federal, Raymundo García, con dolor de su corazón dijo que no van a seguir llorándole a Morena, que para el proceso electoral a gobernador del 2021 ellos piensan construir una alianza con otros partidos de izquierda, incluso -dijo- con el PRI y el PAN. Jojojo.

Aunque de inmediato reculó el diputado federal y explicó que a algunos de los actores políticos del PRD no les parece la alianza con el PRIANISMO, que indican que deben ser con partidos de izquierda, que seguirán buscando a Morena. Pero los morenos les hacen fuchi, y son necios los amarillos les gusta la mala vida. Morena jamás les va abrir las puertas y eso lo decidió el dueño del partido.

Sin embargo, así como están partiendo personajes del PRD rumbo a Morena, así son bien recibidos; pueden irse todos si quieren, pues eso también lo dijo en su momento el dueño de Morena, que su alianza sería con las bases, no con las cúpulas.

Por cierto, del municipio de Zihuatanejo ya casi todos los del PRD se fueron a Morena. Circula en redes una foto donde aparecen personajes muy conocidos del puerto en una asamblea de Morena. Y lo que más inquieta es que asistan a reuniones de ese partido personajes del grupo de dos ex presidente de Zihuatanejo: don Amador Campos Aburto y de Gustavo García Bello.

Incluso se dice en los corrillos del puerto que de reelegirse el presidente Jorge Sánchez Allec, Morena prepara una alianza mortífera. Por ejemplo, trascendió que dijo Leticia Rodríguez, delegada de Morena en el municipio de Zihuatanejo, quiere ser de nuevo candidata de no dejarla a ella como aspirante por Morena a la presidencia de Zihuatanejo, prefiere que sea uno de la sociedad civil y no los que están en lista de espera en el partido. Y de que llegue a jugar la presidencia del puerto un ex alcalde arribista mejor uno de la sociedad civil, que puede ganar. ¡Ajúa!,¡Que viva México cuarones!.. ¡ah, ¿no, verdad?… perdonen, ¡que viva la política mexicana!

Neta, que no creo en tanto cinismo, pero es política, pues, y todo se vale.

Cabe destacar, que Leticia Rodríguez jugó la presidencia en la elección pasada, y también fue muy criticada su participación, pues todos sabían que Lety perdería, ya que no tiene suficiente capital político. Incluso, su nombramiento fraccionó a Morena en el municipio de Zihuatanejo, y hasta ahora se mantiene dividido el partido. Existe gran división en Morena; tal vez por eso la delegada Leticia rodríguez se pone el guarache antes de espinarse, y dice que sean otros los candidatos, menos los que le han hecho la vida imposible.

Muy a pesar que son pocos los morenos, no se comen entre ellos, ni ceden espacios; todos quieren ser generales, ninguno quieres ser soldado, mismo problema que pasó en el PRD y que los llevó la desgracia.

Aunque algunos perredistas en Zihuatanejo se mantienen fieles al sol azteca y luchan por unir al partido, ellos apuestan a que en las futuras elecciones la gente votará por el mono no por el partido, y a eso le apuestan los perredistas Luciano Pineda Quiroz y Arturo Arzeta Serna. Ambos son personajes que vienen trabajando por la unidad del partido, para lograr posicionarse para el 2021.

Se ve muy difícil que puedan levantar al partido porque a nivel estatal le han dado muchas vueltas y a la fecha no logran recuperarse de la estrepitosa derrota de la pasada elección. Siguen pazguatos los perredistas peleando el cascarón del partido. Apenas aprobaron la convocatoria para celebrar el XVI Congreso Nacional Extraordinario, que se realizará del 30 de agosto al 1 de septiembre del presente año. En ese congreso van a dar línea política para el 2021. ¡Hágame usted el frabrón cabor, caro lector! De plano no aprenden los perredistas. Ahí mismo van a apuntar con el dedo meñique quiénes dirigirán el partido a nivel nacional, estatal y municipales, en noviembre que tienen su asamblea, porque eso sí lo aprendieron bien al tricolor. Jejeje.

Archivos

Sergio Aguayo

Andrés Manuel López Obrador nos promete acervos capaces de iluminar miles de comisiones de la verdad. Para hacer factible la esperanza, sólo falta que resuelvan ambigüedades y otorguen presupuestos.

Los archivos son el acceso más seguro a la verdad y a la justicia. En México, esta vía corta se ha hecho interminable por la bipolaridad de quienes gobiernan: presumen su amor por el conocimiento y sus grados académicos -algunos inventados- pero ocultan los expedientes probatorios de violaciones a derechos, abusos de autoridad y corrupciones. Pese a todo, hemos avanzado.

En 1982 la transparencia llegó gracias a un descuido. Resulta que la Secretaría de Gobernación entregó al Archivo General de la Nación (AGN) 2,920 cajas de documentos, pero los estibadores se equivocaron y, entre ellos, iban expedientes de la Dirección General de Investigaciones Políticas y Sociales (DGIPS) y de la Dirección Federal de Seguridad (DFS). Como nadie se percató del error, las cajas quedaron a disposición del AGN que sepultó la información por más de una década.

En 1993 el secretario de Gobernación, Patrocinio González Garrido, declaró que los acervos debían abrirse a los 30 años. La opinión carecía de sustento legal, pero como nadie la contradijo, Patricia Galeana, entonces directora del AGN, abrió el Fondo Gobernación; el material ha sido determinante para un buen número de investigaciones.

Otro momento fue la recuperación del riquísimo archivo de la Dirección Federal de Seguridad (DFS) que cubre de 1947 a 1985. Se salvó porque quien lo organizó, el agente de la DFS, Vicente Capella, defendió su integridad. Me enteré de su existencia por los diálogos con Jorge Carrillo Olea y el grupo con el cual construyó el Cisen. En 1999, cuando parecía posible la victoria de Vicente Fox, me autorizaron a consultarlo. También informé a Adolfo Aguilar Zinser de su existencia y él convenció a Fox de abrir las 4,223 cajas que se depositarían en el AGN. 

Así pues, la batalla por la información tiene una historia resumible en tres generalizaciones: a) empleados públicos anónimos, mal pagados y menospreciados que salvaron para el país cantidades enormes de información; b) funcionarios de diferente ideología que lograron abrir a consulta diversas colecciones; y, c) académicos mexicanos y extranjeros que cumplieron, usando esos fondos para reescribir y reinterpretar la historia del siglo XX. El conocimiento es columna de transformaciones; una de ellas es la victoria de Andrés Manuel López Obrador que construye sobre terrenos desmontados por otros.

El 28 de febrero apareció un decreto presidencial que ordena una apertura sin precedentes. López Obrador ordena a todas “las dependencias, incluidos sus órganos administrativos desconcentrados y entidades de la Administración Pública Federal” que transfieran “al Archivo General de la Nación la totalidad de los documentos históricos que posean y que se encuentren relacionados con violaciones de derechos humanos y persecuciones políticas vinculadas con movimientos políticos y sociales, así como con actos de corrupción”.

Es una lástima que sea un decreto plagado de ambigüedades y vaguedades, sin propuestas sobre cómo se van a resolver las contradicciones con la normatividad existente. El organismo de la sociedad civil, Artículo 19, ya sacó un boletín con señalamientos y recomendaciones. Sería deseable que lo atienda el doctor Carlos Ruiz Abreu, director del AGN, cuyas dotes profesionales no incluyen, que yo sepa, la capacidad de hacer milagros.

Uno de ellos sería rescatar de algún archivo la fórmula alquimista para transformar el smog capitalino en oro, porque el presupuesto del AGN es insuficiente. El decreto promete que las “erogaciones” que cause “se cubrirán con cargo al presupuesto autorizado para el ejercicio fiscal 2019 al Archivo General de la Nación”. Lo asignado para este año es ridículo: 83 millones; 11 millones más que en 2018. Si a la promoción del beisbol le dedicarán 350 millones, es obvio que el conocimiento no es prioridad de la Cuarta Transformación.

El Presidente tiene buenas intenciones e intuiciones. El decreto podría ser muy positivo si deja de ser un compendio de buenos deseos. Por ahora es una promesa, otra más.

Editorial

El respaldo de la resistencia

Esa unanimidad de 127 votos en el Senado de la República -faltó una sola senadora-, en un marco en que menudean las acusaciones de autoritarismo sobre la nueva fuerza dominante en el país, esa unanimidad debe ser valorada, encomiada y puesta como ejemplo de un ejercicio de democracia genuina, esa que en México apenas está rebasando el ámbito aspiracional.

Artífice de esa unanimidad es un político para mí inconfiable por sus antecedentes que incluyen maletas con dinero sospechoso y por su actualidad que posee una atmósfera caciquil en Zacatecas, donde parientes y aliados políticos suyos controlan importantes puestos públicos. Sin embargo, la labor negociadora de Ricardo Monreal brilló con intensidad en esta coyuntura. Y por supuesto, halló voluntades semejantes entre sus copartidarios, destacadamente en el presidente del Senado, Martí Batres, y entre los opositores como los Migueles Osorio Chong y Mancera. Dicho sea esto, sin dejar de reconocer la valiosa aportación de la sociedad civil (no muy querida por AMLO, pero necesaria y útil), en particular las organizaciones nucleadas en #SeguridadSinGuerra.

En ese episodio que ya está en los anales legislativos, los senadores dieron una muestra palmaria de lo que suele decirse más con tintes retóricos que factuales: las minorías también gobiernan. Por lo general, el acuerdo legítimo suele dar mejores resultados que las imposiciones, mayoriteos y el quid pro quo inconfesable.

Cierto que la Guardia Nacional es una riesgosa apuesta para el gobierno. Cierto que se precisa no bajar la guardia y cuidar que las leyes secundarias estén a tono con la reforma constitucional. Cierto que tendremos a militares actuando como policías (si bien con entrenamiento civil, particularmente en derechos humanos) y ello conlleva riesgos para la sociedad.

Todo ello es cierto, pero cierto es también que, en menos de tres meses de ejercicio del poder, Andrés Manuel López Obrador ha sacudido al país y, con sus exigencias de templanza y su ejemplo de rectitud personal, está creando una tendencia a la austeridad y al manejo limpio de fondos públicos que ya hacía falta en México, inmerso -sin hipérbole- en un mar de corrupción cuya marea encrespada parece -parece- tener como destino el reflujo. Habrá que ver si la pleamar se consuma.

Mientras muchos celebraban la unanimidad senatorial, saltó a la palestra -en una de las frecuentes primicias de Reforma- la conformación de un frente para hacerle contrapeso al gobierno y a la potente Presidencia de AMLO, de creciente popularidad. Hay quienes ven en este frente plural la reproducción del que apoyó a Ricardo Anaya en 2018, e incluso como temprana plataforma para una eventual candidatura presidencial de Javier Corral Jurado, el gobernador de Chihuahua que desde tiempo atrás libra una batalla político-jurídica para que la impunidad no acompañe al ex gobernador César Duarte y quien, además, ha puesto en evidencia el financiamiento ilegal a las campañas del PRI en varios estados.

Ambas cosas son válidas, si bien es deseable que los trabajos del frente se orienten al diálogo y al planteamiento de opciones, sin anticipar tiempos. Se precisa trabajar genuinamente por el país, lo cual supone discrepar, sí, pero también coincidir. Y no olvidar lo que Fernando Belaunzarán ha advertido: “el déficit de credibilidad que tienen los partidos que acaban de ser castigados en las urnas” (Excélsior, 25/02/19).

El Presidente atribuyó a la desesperación la génesis de ese frente, pero reconoció su derecho a agruparse, aunque le sugirió no hacer el ridículo. Comoquiera, debe ser bienvenido el grupo en el que militan figuras públicas estimables como Tagle, Pastor, Figueroa, Díez, De Swaan, Cárdenas, Basave y Álvarez-I (citados en orden alfabético inverso). Debe ser bienvenido no sólo por los opositores al gobierno, sino incluso por el propio Presidente, quien convendría que viera en las oposiciones (legislativas, partidarias, sociales…) la corporeización de la frase originada en tiempos napoleónicos, como lo escribió recientemente Rogelio Muñiz Toledo: Lo que resiste apoya.

SOS COSTA GRANDE

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

El presidente Andrés Manuel López Obrador expresó ayer su desacuerdo con que tome de nuevo las armas el fundador de los Grupos de Autodefensa en Michoacán, Hipólito Mora, quien el pasado lunes anunció que se alzaría nuevamente en armas, argumentando que la seguridad en el país está peor que nunca.

“No estamos porque haya ciudadanos que ocupen esa función que no les corresponde; no le corresponde a las personas garantizar la seguridad pública, es una responsabilidad del Estado Mexicano”, dijo el mandatario en

“Le informo al gobierno federal y estatal, que desde hoy traeré conmigo un rifle y una pistola, y cualquier autoridad que trate de detenerme o desarmarme va a tener que asesinar, porque vivo ni a la cárcel me llevarán, ni me desarmarán”, publicó en sus redes sociales.

También el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, reaccionó de inmediato a esto que llamó una provocación, y señaló que su gobierno no tolerará que los civiles vuelvan a armarse.

En el vecino estado, recordaremos que las autodefensas que se alzaron en la zona sobre todo de la Tierra Caliente michoacana, abarcando amplios territorios, terminaron e enfrentadas entre sí. Algunas incluso pactaron con el gobierno un falso desarme, mientras que el médico José Manuel Mireles fue encarcelado. Para detener a Mireles, el gobierno le tendió una celada y lo acusó de delitos graves para mantenerlo en penales de alta seguridad, mientras que en Michoacán se pactaba una paz ficticia, con la intervención directa del gobierno de Enrique Peña Nieto a través de un delegado especial, Alfredo Castillo, personajes que en realidad fue el poder tras el trono del podrido gobierno de Fausto Vallejo.

Castillo llegó con amplias facultades a Michoacán, en febrero de 2014, y en un mes ya había logrado reunir a todas las falanges de las autodefensas, con excepción de El Abuelo, Juan José Farías, uno de los creadores de las autodefensas de Tepalcatepec junto con Mireles, y señalado por el Ejército como miembro de un cártel.

Mucho se ha dicho que en materia de autodefensas todo se enturbia, pues la línea que separa a estos grupos de las bandas criminales es a veces muy difusa. Y así debe ser, porque estos grupos armados, al igual que los grupos delincuenciales que supuestamente persiguen, se mueven en el terreno de la ilegalidad, y actúan por encima de las autoridades locales.

A diferencia de lo que sucede en Guerrero, las autodefensas de Michoacán no quieren tratos con el gobierno de ninguna índole. Aquí, la CRAC-PC y la UPOEG, las dos principales fuerzas comunitarias y ciudadanas de la entidad, han logrado coordinar esfuerzos con el gobierno estatal, al grado de que tienen convenios con el Ministerio Público para transferir a los presos que reclama la justicia formal y que no puedan juzgar con base en los usos y costumbres indígenas.

En Michoacán, en cambio, los modelos de autodefensa que se retomaron no están regulados por nada, mucho menos por las asambleas de las comunidades, y lo que existe son gavillas de hombres armados que se mueven al garete, o bajo algún liderazgo local que puede hacer lo que le viene en gana.

Muchos han considerado que estas fuerzas ciudadanas y comunitarias pueden ser utilizadas en apoyo de la Guardia Nacional. De hecho, tanto la UPOEG como la CRAC-PC han manifestado su disposición para coordinarse con la Guardia, pero eso también implica que se sujeten a lineamientos mínimos, como el que se tengan reglamentos básicos mínimos, que a su vez sean sancionados por las asambleas de los pueblos. En cambio en Michoacán el asunto está verdaderamente disparejo.

Lo único bueno que derivó del Plan Michoacán, con Alfredo Castillo al frente, es que se concretaron acciones integrales de desarrollo para Michoacán. Fueron en total 206 acciones, proyectos y obras de infraestructura que permitieron destensar el clima de violencia, marginación y atraso en las zonas infestadas de delincuentes y también de autodefensas.

Nos preguntamos si un plan así necesita Guerrero, o si bastará con la presencia de la Guardia Nacional para cumplir metas de paz y desarrollo.

Según el gobernador, el índice de homicidios violentos sigue bajando y ya no somos el estado número 1 en este renglón. Poco a poco, Guerrero se aleja de las estadísticas negras; pero de ahí a que podamos cantar victoria, estamos lejos.

Palabra de Mujer

Ruth Tamayo Hernández

*Diputados de Baja California violaron la Constitución

*Exigen desaparición de poderes en esa entidad

“Las layes son como las telas de araña, a través de las cuales pasan libremente las moscas grandes y quedan enredadas las pequeñas”: Honoré de Balzac.

Parece que fue ayer, mis estimados, cuando Jaime Bonilla Valdez, gobernador electo en Baja California, por la coalición Juntos Haremos Historia, festejaba eufórico la conquista de esa entidad, mayormente porque le arrebató al panismo el estado que había gobernado por más de 30 años.

El festejo se prolongó por varias horas de pachangas y discursos alegres; incluso, el ganador morenista Jaime Bonilla Valdez, aseguró en esa ocasión que al momento del tomar el cargo (cosa que ocurrirá en noviembre próximo), acabaría con el grave problema de corrupción que había en esa entidad, “pues la gente pedía a gritos un cambio, ya no nada más de gobierno y de partido, sino de régimen y creemos que nuestro proyecto de gobierno les ha gustado”, dijo.

Sin embargo, y como las palabras se las lleva el viento, hoy el gobernador electo de Morena está involucrado junto con los miembros del Congreso local de Baja California (por cierto de mayoría panista) en problemas graves de corrupción, ya que los legisladores aprobaron al vapor y por la vía fast track una reforma constitucional a modo, para que el gobernador electo, Jaime Bonilla Valdez, gobierne cinco años y no dos, como estipula la Constitución de esa entidad federativa que fue recientemente reformada.

Y es que recordemos que el estado de Baja California modificó su constitución para empatar la elección de gobernador con las elecciones legislativas federales de 2021, tal como ocurrió en Guerrero con el periodo 2011-2015, en que el gobernador Ángel Aguirre fue electo sólo para un periodo de 4 años.

Por lo tanto, Bonilla sólo fue electo para 2 años, tiempo en el cual no podrá hacer prácticamente nada, salvo nadar de a muertito, mientras se preparan los siguientes comicios.

Entonces, los legisladores bajacalifornianos simplemente se pusieron a reformar nuevamente la Constitución estatal, para ampliar el periodo del gobernador electo el 2 de junio pasado y que todavía ni siquiera toma posesión.

¿Qué principio se viola aquí? Según los conocedores, el debate radica en que Bonilla fue electo sólo para un periodo de 2 años, y que ya no valen ampliaciones de ninguna índole, pues los electores, al momento de acudir a las urnas, sabían que estaban eligiendo a un gobernador por 2 años, y no por 5 o 6.

Semejante decisión tiene a Bonilla y a los diputados –que insisto son mayoritariamente de oposición, pues sólo 3 son de Morena- en el filo de la navaja, y a unos centímetros de quedar fuera de la Gubernatura. Si no reculan, puede ser que Bonilla ni siquiera tome el cargo.

Sin duda el suceso es un manjar exquisito para los acérrimos enemigos políticos de la coalición Juntos Haremos Historia, que tienen todo para vengarse de los puritanos morenos y están más que listos para satisfacerse y se relamen los bigotes para meterle el serrucho a la coalición morenista en Baja California, cercenarlos y dejarlos fuera del gobierno; sin embargo, no olviden que Morena tiene todo a su favor, cuenta con la mayoría del Congreso de la Unión y del Senado, y con la Presidencia de la República; entonces, también puede que le hagan como ellos bien dicen, lo que el viento a Juárez.

Lo bueno que la vida se encarga de poner a cada quien en su lugar, y bien pronto la vida puso a prueba a Morena, pues ellos siempre han pregonado honestidad y de ser respetuosos del Estado de Derecho, y vean con qué batea de babas salieron en Baja California.

El riesgo que corren es que así como pasaron la prueba el 2 de junio pasado, la sociedad les va agradecer que la ratifiquen, ya que tienen mayoría en el Congreso de la Unión y el Senado, y bien pueden pasar por alto esta violación a la Constitución, o castigar de manera ejemplar al Congreso de Baja California, cuyos integrantes del PAN y del PRI ya enfrentan procesos de expulsión de sus respectivas dirigencias nacionales, para vergüenza de estos nalgas prontas, que seguramente vendieron el voto para hacer realidad esta contra-reforma.

Y es que es fuerte el rumor en el sentido de que los diputados bajacalifornianos fueron comprados, tanto los de Morena como los de la oposición, con 1 millón de dólares por piocha. ¡Chispas! Eso es un dineral que en su vida lo verán juntos. Así que ¿cómo canijos no los iban a convencer para que aprobaran la reforma? Con ese billete verde, hasta mi abuelita la aprueba. ¡Uuufff!, no la chiflen señores diputados, porque es cantada.

Y no crean que es chisme, mis estimados; se escucha recio y quedo en los corrillos de ese Congreso, que es cierto lo del cañonazo de billetes que recibieron los diputados para aprobar dicha reforma, sabiendo que con dinero baila el perro.

Veremos pronto en qué acaba este asunto que, viéndolo bien, es peligroso; y más grave si se hacen ciegos, sordos y mudos y lo dejan pasar, sólo porque Morena es mayoría en el Congreso de la Unión.

Simple, el buen juez por su casa empieza.

Sin duda el castigo debe ser ejemplar, para que no incurran otros en el mismo error. Y si castigan al Congreso de Baja California con la desaparición de poderes, como lo propuso el presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo (quien manifestó que era gravísima la reforma, porque significa una ruptura con la Federación), será de verdad un acto de justicia, para que se les quite lo mañoso.

Muñoz Ledo, también dijo que pueden proponer otros recursos legales, como la controversia constitucional y la acción de inconstitucionalidad.

Sin embargo, el legislador morenista mencionó que para él la solución es la desaparición de poderes en el estado bajacaliforniano. Jojojo.

“Lo estamos estudiando, pero hay que hacerlo”, expuso.

Esto es lo más prudente y sensato que le he escuchado al diputado Porfirio Muñoz Ledo. Ojalá aprueben la desaparición de poderes en Baja California. La prueba es dura, pero Morena debe poner correctivos; de lo contrario, le harán competencia a Pinocho.

En caso de que las cámaras acuerden la desaparición de poderes, Jaime Bonilla Valdez quedaría también inhabilitado para ser gobernador de Baja California.

Y, por otro lado, para no variar, seguimos hablando de Morena, pues también la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), trae en salsa de chile habanero al gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, por desacato a una orden de la máxima Corte.

El Poder Judicial local acusó ante la Corte que el mandatario morelense (quien es de militancia petista, pero que llegó al poder en alianza con Morena), no trasfirió el total de los recursos para el pago de jubilaciones de Trabajadores del Tribunal Superior de Justicia del Estado.

Son 4 millones de pesos de ese gasto, pero el gobernador trasfirió 2 millones de pesos 299 mil 762 pesos, faltando por trasferir 1 millón 919 mil 835 pesos, según el TSJEM.

La Corte le dio un plazo de 10 días hábiles al gobernador morelense para que efectúe el depósito del resto del dinero. De no cumplir con la orden de la Corte a más tardar el 25 de julio, con el pago total requerido por el Tribunal Superior de Justicia del Estado de Morelos, el gobernador Cuauhtémoc Blanco, podría estar en riesgo de que la Corte lo declaré en desacato y resuelva su destitución. ¡Me lleva la que me trajo! 

¿Pero qué les pasa a estos funcionarios? Sabemos que casi todos no pueden controlar el poder que les dieron, y la mayoría andan volando muy alto, no pisan tierra, olvidan que el poder es efímero y no dura para toda la vida. Pero no entienden los políticos y tampoco pueden controlar la soberbia se creen dueños de la verdad absoluta. Algunos ni siquiera sabían qué irían a hacer a los congresos o a los ayuntamientos; sin embargo, están ahí. Desvariando de poder, pero ahí están.

Aún es temprano para saber qué tanto fallamos los mexicanos con el tan anhelado cambio que deseábamos todos. Era necesario un cambio, es cierto, aunque hubiéramos querido que fuera bueno. Es temprano para saberlo, pero no se divisa nada bueno con el gobierno de Morena, más bien el panorama pinta gris y todo indica que los discursos de Morena se quedarán en eso en arengas y promesas.

Pero también la esperanza muere al último, ¿qué no? Jojojo. El cambio es para los valientes, acuérdense, aguanten vara, pues los mexicanos somos aguantadores y resistentes.       

La ‘Pulga’ aérea

Manuel J. Jáuregui

Como una especie de “Pulga” (mercado o bazar) aérea, el Gobierno federal puso en exhibición y venta un total de 72 aeronaves con las que se daban gusto paseando el anterior Presidente y sus subalternos. Muestra ésta de la AUSTERIDAD que pretende imponer el nuevo Gobierno federal.

Esto de la eliminación de gastos superfluos y lujos inaceptables resulta ser algo loable y merecedor de ser reconocido al Gobierno del Presidente López O., mas aún así no dejó de presentarse una piedrita en el arroz. Se les permitió (y seguro argumentarán razones de seguridad) al Secretario de la Defensa y al Secretario de Marina conservar para su uso exclusivo sendos jets ejecutivos de gran lujo y prestaciones: éstos un par de Gulfstreams G550 comprados en 2016 con un costo de CINCUENTA Y CUATRO millones de dólares CADA UNO.

Tendremos entonces la contrastante paradoja de que mientras el Presidente se mueve en aerolínea, dos de sus jefes militares viajarán en aviones privados como los que utilizan los magnates empresariales más acaudalados a nivel mundial. Como por ejemplo el co-chairman del Carlyle Group, David Rubenstein, quien comanda uno de los fondos de inversión más grandes del mundo y tiene a su disposición uno de estos Gulfstreams. Fuera de este detalle nos parece excelente que el Gobierno federal haya decidido deshacerse de tanto y tan caro JUGUETE para ingresar recursos a las arcas nacionales, ahorrar gasto y evitar tentaciones.

Sería bueno saber, por ejemplo, si están incluidas en la SUBASTA las aeronaves, tanto de ala fija (aviones) como de ala rotativa (helicópteros) que emplean paraestatales como PEMEX y la CFE. Recordamos que el que fuera director de PEMEX, Emilio Lozoya Austin, solía darse enorme gusto apuntando horas de vuelo en la bitácora de los aviones de PEMEX, tan lujosos que hasta se los solicitaban en “préstamo” otros funcionarios del Gobierno peñanietista.

Dentro del total de 72 aeronaves de las que pretende deshacerse el Gobierno morenista hay una muy buena cantidad que son “chatarra”, esto es, viejos y descuidados, por los cuales seguramente no recibirán gran cosa, dado que quien los compre será sólo para el deshuesadero. Nos explicaban que en el caso de los aviones viejos el mantenimiento rebasa por mucho en costo el valor de la aeronave. Es el caso de aquel compadre que le ofreció a su amigo un excelente burro: “No, gracias, compadre”, le respondió el potencial comprador, “no es lo que cuesta el burro, ¡sino lo que vale el maíz!”.

Los más codiciados elementos de este aerobazar, pues, son dos de los tres Gulfstreams con los que se quedaron nuestros jefes militares. El deshacerse de tanto avión, no obstante, representa un gran ahorro para el Gobierno federal: menos sueldos de tripulaciones, menos costo de entrenamientos, menos pago de refacciones, de mecánicos, de turbosina, de reparaciones, de pagos por uso del espacio aéreo, etcétera.

No puede menospreciarse el poder de la señal que emana de tal decisión en lo que a la práctica de la austeridad se refiere. No hay más potente prédica que el ejemplo, por lo que al deshacerse de tanto avión y helicóptero el Gobierno morenista sienta un buen precedente: no es posible montar sobre los vencidos hombros de un pueblo pobre una clase elitista de burócratas que rápido y pronto se acostumbran a los lujos y los privilegios CON CARGO AL PUEBLO.

Muerto el perro, se acabó la rabia. Idos los juguetes y con las riendas del gasto bien apretadas, nuestra burocracia tendrá que ajustarse a lo modesto y prudente, acorde a las necesidades de una sociedad en la que abundan las carencias. Se acabaron esos episodios en los que bajaba un helicóptero Augusta 109 en el Campo Marte para recoger al “foursome” del Presidente Peña (Emilio Gamboa & Co.) para irse a jugar golf.

Esto, por supuesto, con cargo a los mexicanos, pues el costo de adquisición y operación de los helis y jets que usaban los funcionarios del pasado sexenio iba directo contra las aportaciones fiscales pagadas por todos los ciudadanos cautivos del fisco mexicano, en el pasado tan bueno para exigir, pero tan malo para rendir cuentas claras.

Editorial…

El enemigo útil

         En una mañana en que lanzó una andanada de tweets, Donald Trump amenazó ayer nuevamente a México. “Los soldados de México recientemente apuntaron a nuestros soldados de la Guardia Nacional, probablemente como una táctica de desvío de atención para los narcotraficantes en la Frontera. ¡Mejor que no pase otra vez! Estamos enviando ahora SOLDADOS ARMADOS a la Frontera. México no está haciendo lo suficiente en aprehender y devolver”.

         Un tweet anterior afirmaba: “Una Caravana muy grande de más de 20 mil personas ha empezado a avanzar por México. Ha sido reducida de tamaño por México, pero todavía viene. México debe aprehender al resto o nos veremos forzados a cerrar esa sección de la frontera y llamar al Ejército. ¡Los Coyotes y Cárteles tienen armas!”

         Trump está en son de guerra, preparando su campaña de reelección, tras la exoneración por su supuesta colaboración con Rusia en el proceso electoral de 2016; y está recurriendo nuevamente a la estrategia que más beneficios le ha rendido: hacer de México y de los mexicanos un enemigo.

         Benjamin Moffitt, profesor de la Universidad Católica Australiana y autor de The Global Rise of Populism, señala que una de las características más significativas del populista es pretender que representa al “pueblo” frente a un enemigo perverso. Según la posmarxista belga Chantal Mouffe: “No hay un ‘nosotros’ sin un ‘ellos’.” Para Hitler el enemigo eran los judíos, para Hugo Chávez los capitalistas y los yanquis, para Nigel Farrage la Unión Europea, para Marine Le Pen los inmigrantes, para López Obrador la mafia del poder, los conservadores/neoliberales y la prensa fifí, para Trump los medios de fake news y los mexicanos.

         En el caso de los soldados mexicanos que según Trump encañonaron a militares estadounidense para “probablemente” proteger a narcotraficantes, la secretaria de gobernación Olga Sánchez Cordero declaró: “Creo que pensaban que estaban en territorio mexicano, los soldados mexicanos, y ya estaban, creo que ya estaban en territorio norteamericano. Ahí hubo una confusión en la línea divisoria”. Según el canciller Marcelo Ebrard estas confusiones son comunes, pero no hay duda de que el presidente Trump la está aprovechando.

         Trump está aprovechando también el ingreso a México de nuevas caravanas de inmigrantes para generar alarma entre sus posibles electores. Las propias autoridades mexicanas han reconocido que hay un aumento “inédito” en los inmigrantes, especialmente hondureños, pero tampoco podemos sorprendernos. El nuevo gobierno mexicano está ofreciendo protección, apoyos y empleos a quienes lleguen a nuestro país; son incentivos enormes para quienes en sus países no tienen nada.

         López Obrador ha sido insistente en sus respuestas a las amenazas de Trump. Ayer, en la mañanera, dijo: “Nosotros no vamos a caer en ninguna provocación. Le digo al presidente Donald Trump que nosotros queremos mantener una relación respetuosa y de amistad con su gobierno”.

         El presidente no se equivoca al tratar de mantener una relación respetuosa con Trump, pero Trump ya está haciendo daño a México. El cierre parcial de la frontera por el retiro de personal de las aduanas está generando pérdidas millonarias a exportadores y transportistas mexicanos. Trump sabe el poder que Estados Unidos puede tener sobre México y nos está dando apenas una probadita. Si necesita tomar medidas adicionales para su reelección lo hará. Somos para Trump un enemigo útil.

SOS COSTA GRANDE

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

Hace siete años de que entró en vigor la Ley General contra la Trata de Personas, y a 15 años de que México ratificó el Protocolo de las Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, México sigue en pañales en esta materia.

Vergonzosamente, apenas leímos la noticia de que más de 20 personas estaban en calidad de esclavas en una cueva de Chihuahua, y algunas de ellas tenían más de 2 años en esa condición, siendo utilizadas por grupos armados para levantar cosechas de enervantes.

Por fortuna no los mataron y los sobrevivientes de este negro episodio pudieron ser rescatados, tras una denuncia a las autoridades, y luego de que se realizó una investigación para dar con el sitio exacto de la cueva donde tenían a los secuestrados.

¿Esto es trata de personas, o secuestro? Es trata. El secuestro se configura cuando una persona es raptada para pedir un rescate por su vida. Pero en este caso se ejerció la desaparición forzada no para pedir dinero por liberarlos, sino para usarlos como esclavos. De esa manera, los jefes del narco lograban cultivar los campos sin que les costara pagar un jornal.

De acuerdo la ley vigente, la trata de personas es la comercialización de las personas con fines de explotación, y un fin de explotación es obligar a las personas a actividades delictivas, ilícitas.

¿Qué está haciendo el gobierno en este sector? Bueno, primero decir que el problema de inseguridad es demasiado complejo, porque poco a poco el simple trasiego de estupefacientes se fue combinando con otros delitos, abarcando diversos sectores de la vida pública, y la trata es uno de ellos, quizás el más difícil de combatir, pues estamos ante poderosas redes cuyos tentáculos son incluso de alcance internacional.

Por ejemplo, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dio a conocer  un diagnóstico que refleja la situación de trata de personas en México, con información desde el 15 de junio de 2012, cuando entró en vigor la actual Ley General Contra la Trata de Personas, al 31 de julio de 2017.

Este diagnóstico, aunque incompleto, reveló diversos puntos finos que las instituciones del Estado Mexicano han sido incapaces de superar. El informe dice que más de 2 mil víctimas de trata fueron auxiliadas en los consulados de México en Estados Unidos, lo cual significa que tales personas fueron sacadas de este país, con fines de explotación sexual o laboral, y que sólo allá tuvieron la oportunidad de dar a conocer sus casos.

Pero el caso es todavía más tenebroso, porque la CNDH revela que sólo una de cada 10 víctimas de trata de personas  puede denunciar y se puede librar de sus captores. Luego entonces, esas 2 mil víctimas que sí lograron escapar, representan el 1 por ciento de las que no han corrido con esa suerte.

Y esa es sólo la cifra de los casos internacionales, porque la trata se da mayormente dentro de nuestras fronteras, como es el caso de los esclavos de Chihuahua, caso similar al que sucedió en Zapopan, Jalisco, hace unos dos años, cuando se descubrió una red de trata que obligaba a los esclavos a laborar para una empresa extranjera, y quienes vivían en condiciones infrahumanas. O bien a los esclavos del narco en Guadalajara, la mayoría jóvenes que eran reclutados con engaños, a través de anuncios de oferta de trabajo, pero que eran llevados a zonas inaccesibles para entrenarlos como sicarios.

El informe de la CNDH reporta que a lo largo de 5 años, de 2012 a 2017, se detectaron unas 5 mil 245 víctimas de delitos en materia de trata de personas (más de mil por año, según información de las Procuradurías y Fiscalías Generales en el país).

Pero, ojo, la gran mayoría de estas, son mujeres. Hasta 85 por ciento de las víctimas de trata son mujeres de todas las edades, y sólo 15 por ciento son hombres y niños.

Y aquí radica el gravísimo nivel de riesgo para las mujeres y niñas en México, quienes están en la mira de los tratantes.

Por lo tanto, a propósito del despliegue de la Guardia Nacional por el territorio del país, urge que se reactiven los programas contra la trata de personas, que según expertos se quedaron en veremos al cambio de gobierno, y que esto se haga tanto dentro como fuera del país.

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