fbpx

MORENA Y ALIADOS PUEDEN ARRIBAR AL GOBIERNO MUNICIPAL DE ZIHUATANEJO DE AZUETA EN 2024 / parte 2

César Antonio Aguirre Noyola

“PERO TIENEN QUE VOLVER LA MIRADA A LOS PROCESOS ELECTORALES DE ANTAÑO, ADMITIR LA FALLAS Y APRENDER DE ELLAS, ASÍ COMO GENERAR LA UNIDAD REAL”

En la entrega próxima pasada exponía yo el yerro que los dirigentes del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) tuvieron al “imponer” como candidatas a la presidencia municipal de Zihuatanejo de Azueta, en el 2018 a la señora Leticia Rodríguez Rodríguez y, en el 2021 a la licenciada Maricarmen Cabrera Lagunas. Los resultados en la jornada comicial evidenciaron, en cada momento histórico, la fallida decisión.

En el primer caso, o sea el de la señora Leticia Rodríguez Rodríguez, ésta fue postulada merced al antiguo lazo de amistad que la une con el ex delegado Federal de los Programas Integrales del Desarrollo en Guerrero, ex presidente del Comité Ejecutivo Estatal del Movimiento de Regeneración Nacional, ex diputado del Congreso del Estado de Guerrero, ex candidato a la Gubernatura del Estado y actualmente diputado por el distrito 04 del Instituto Nacional Electoral con asiento en el puerto de Acapulco, Guerrero, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros. El rechazo de personas fundadoras del MORENA, de militantes con un trabajo político, de simpatizantes que habían luchado con Andrés Manuel López Obrador desde muchos años atrás y de un importante sector de la población que no se identificaba con ella, fue notorio, y ese malestar se reflejó, lógicamente, en la votación aquel domingo 1 de julio de 2018.

Pese a esa desagradable experiencia, los dirigentes no aprendieron la lección, y lanzaron a la arena política ―con la promesa de aplicar un estudio demoscópico (encuesta) imparcial, transparente y con certidumbre― a un sinnúmero de hombres y mujeres que buscaban encabezar la planilla a la presidencia municipal de Zihuatanejo de Azueta. Se observó entonces un recorrido intenso en colonias y comunidades de varias personas aspirantes buscando posicionar su imagen y su nombre con el propósito de obtener el favor de la mayoría de las personas encuestadas. Pero, ¡oh, sorpresa!, no hubo tal ejercicio de consulta ciudadana, y lo que sí hubo fue el mecanismo que caracteriza a un viejo partido político: “lo que diga mi dedito”. Así, le empezaron a hablar a las y a los aspirantes que la dirigencia del partido a nivel Estado había manifestado “habemus canditum” y que tal nominación caía en la figura de la ex diputada del 11 distrito electoral local, ex diputada federal por la Costa Grande y actual secretaria de Desarrollo y Bienestar Social del Gobierno del Estado de Guerrero, licenciada Maricarmen Cabrera Lagunas. Las personas que aspiraban encabezar esa candidatura por el partido marrón simplemente cayeron en desanimo al calificar tal designación como “arbitraria e impositiva”. Se manejó que las personas que la arroparon para alcanzar el cometido fueron Mario Delgado Carillo (su compañero en la cámara baja del Congreso de la Unión y presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Movimiento de Regeneración Nacional), el Ing. Félix Salgado Macedonio (su compañero también en el Poder Legislativo federal) y el ciudadano Marco Antonio Ortiz Salas, dirigente nacional de la Coalición de Organizaciones Democráticas Urbanas y Campesinas (CODUC). En el pecado llevarían la penitencia.

La soberbia es mala consejera, y la soberbia en la licenciada Maricarmen Cabrera Lagunas se evidenció a partir de que no se tomaba la molestia de buscar y tampoco llamar personalmente a sus compañeros y compañeras aspirantes, limitándose a enviarles mensajeros o representantes para tratar de ofrecerles algún espacio en la planilla o dentro de la estructura organizativa de la administración pública municipal con el fin de que apoyaran el proyecto político. Aunque en descargo de ella, también varios y varias aspirantes del partido guinda hicieron gala de una ausencia de madurez política. Cabe añadir, por otro lado, que los dirigentes del MORENA no tuvieron oficio político para llevar a cabo la “operación cicatriz” y dejaron que las cosas transcurrieran con una pasmada normalidad.

Innegable es que la licenciada Maricarmen representa un importante activo político, pues basta en recordar que los dos puestos de elección popular que ostentó ―las diputaciones local y federal― las obtuvo participando a través del principio de mayoría relativa, esto es, sometiéndose de forma directa al escrutinio y voluntad de la ciudadanía. Sólo que esos antecedentes no le bastaban porque enfrentaba a un rival poderoso en diversos aspectos.

Otro factor determinante para obtener la derrota en la elección municipal de 2021 fue la inexistencia de una coalición de partidos políticos que vienen aglutinándose para enfrentar juntos las elecciones desde 2019 a la fecha (MORENA-PT-PVEM) denominada “Juntos Hacemos Historia”. La falta de estatura política ante las circunstancias prevalecientes, principalmente por parte de los dirigentes del MORENA, hicieron abortar una asociación electoral de este tipo aplicable a los comicios locales (Gubernatura del Estado, Diputaciones Locales e Integrantes de Ayuntamientos Municipales), determinando marchar solos…

César Antonio Aguirre Noyola

Investigador en materias política y electoral.

About Author

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *