Ruth Tamayo Hernández
Guerrero y sus
necesidades prioritarias
“Recordar
es fácil para el que tiene memoria; olvidar es difícil para quien tiene
corazón”: Gabriel García Márquez.
Mis
estimados, en serio que fue motivo de discusión el primer informe del presidente
Andrés Manuel López Obrador. El tema de todos es el informe del mandatario
federal. Hasta los medios le entraron al tema. Algunos de plano dejaron ver su
enojo; otros, más mesurados, señala ron que el mandatario no ha cumplido en todo
lo que dijo.
Pero
todas las críticas contra el presidente AMLO se las llevó el viento, nada lo
perturba al presidente.
En
cafeterías y restaurantes, así como en los mercados, la conversación de las
personas era el informe del mandatario. La gente lanza flores y más flores para
el presidente AMLO, y eso no les gusta a los enemigos políticos del mandatario
federal. Pero bien poco le importa a la gente que se enojen los contrarios del
presidente; la gente dice y lo hace adrede para hacerlos enojar.
Los
temas a discutir son buenos y no debiera confrontarnos porque somos todos
guerrerenses. Es cierto que últimamente los partidos políticos han dividido a
las familias mexicanas y no debiera ser así. Las propuestas nutren, las
disputas dividen; esa lección debemos aprenderla.
En
este informe no hay ganadores ni perdedores, no son urnas, faltan mucho para el
2021. Morena no tiene por qué adjudicarse un triunfo rotundo en las próximas
elecciones, partiendo del informe del mandatario federal. No pueden los morenos
tomar como bandera política el primer informe y decir que AMLO es el mejor
presidente de toda la historia de México; que en tan sólo nueve meses, de 100
promesas que hizo, ya cumplió con más de 60 de ellas.
Esto
es sólo un ejemplo. Se alegran los morenos de lo que es capaz de hacer el
presidente AMLO y dicen que todo esto confirma en el poder al Movimiento de
Regeneración Nacional (Morena), y que no les quita ningún partido la Presidencia
ni la mayoría en el Congreso de la Unión.
Así
de alzados están los morenos. ¡Caray!, no sean fachosos, pues falta mucho para
el 2021 y no se puede predecir eso. Por favor, sean serios.
Lo
bueno es que el presidente AMLO ya les envió una carta muy directa: Si veo que
no se alinean y comienzan hacer cosas indebidas en Morena, renunció, les dejó
el partido; es más, que le cambien de nombre, dijo el mandatario.
Les
decía, mis estimados, que el presidente AMLO aceptó que su principal desafío es
la inseguridad en el país y mantuvo su promesa de bajar los índices delictivos y
serenar México. Su principal estrategia es el combate a la corrupción: “No
permitiré el contubernio de la delincuencia con la autoridad. El que se meta a
proteger delincuentes, va ir a la cárcel sin derecho a fianza. Ya no hay
influyentísimo”, dijo. ¡Uuuuuffff! en pleno mes patrio la amonestación, ¡Sobre
aviso no hay engaño, señores!
Pero
se cimbró el Palacio Nacional, cuando el presidente AMLO volvió al tema de los
43 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa desaparecidos; dijo que
investigará el paradero de los muchachos y eso indica que se regresa a remover
el cuadro de dolor y lágrimas que aquel suceso provocó en Guerrero.
Y
a como pinta el panorama, también se torna caliente el caso Ayotzinapa, pues además
el delegado federal en Guerrero, Pablo Amílcar Sandoval, agarró valor después
del informe y dijo que encontró “grandes irregularidades” en los programas de
comedores comunitarios y guarderías infantiles de la Sedesol durante la
administración pasada, y que buscan proceder penalmente contra estos ex
funcionarios. ¡Caracoles bien refritos! ¡Sálvese quien pueda!
Oigan,
está bien cañón el ambiente político, y el que se ríe se aguanta, y el que se
lleva también, así reza el refrán.
En
relación al estado de Guerrero, entidad que nos importa a los guerrerenses, no
son tan animadores los datos que dio el presidente AMLO, viéndolo desde el
panorama que vive la entidad suriana, porque todos saben las carencias y
problemas que vive Guerrero de hace décadas. Tenemos pobreza extrema en grandes
proporciones, pues en el estado no hay manera de que la gente viva de otras actividades,
sino que la principal fuente de ocupación son el campo y el turismo.
La
entidad no está recibiendo el respaldo por parte de la Federación para estos
rubros que son tan necesarios para los guerrerenses, pues según en el informe
del presidente AMLO, en ningún inciso se lee algún plan para impulsar estas
actividades en el estado. El mandatario mencionó sus programas sociales y dijo
que la Federación había dado al campo en los últimos meses 147 mil toneladas de
fertilizante de manera gratuita, a 270 mil productores del estado de Guerrero;
sin embargo, no cuadran las cifras, ya que según el secretario de Agricultura y
Desarrollo Rural (Sader), al menos 70 mil campesinos del estado de Guerrero se
quedaron sin el insumo. Alguien miente en este tema o le falsean la información
al mandatario federal.
Bien
pronto conoceremos quien miente en este tema del fertilizante, pues el número
de campesinos que se quedó sin abono es grande, y no se podrá ocultar el daño
al final de las cosechas.
El
mandatario federal también expuso en el informe que en los primeros seis meses
de este año los migrantes mexicanos enviaron remesas a sus familiares por 16
mil 845 millones de dólares, siendo éste el monto más alto que se ha registrado
en toda la historia del país. Y agregó que las remesas son la principal fuente
de ingreso de México, por encima de las exportaciones petroleras.
¡Bárbaro!
Pensar que ahora dependemos de los braceros para sobrevivir como nación, siendo
un país productor de petróleo.
Asimismo,
dejó ver el mandatario federal que el Banco de México (Banxico), expuso que a
Guerrero llegaron por esta vía 841.86 millones de dólares en el primer semestre
de 2019, y también expresó que era una cifra histórica.
Pero
tampoco perdamos de vista que las remesas enviadas por los guerrerenses
radicados en los Estados Unidos a sus familiares en Guerrero, hace años que pasaron
a ser la principal fuente de ingreso para miles de familias guerrerenses, pues
entre más crisis hay en Guerrero, más dinero envían migrantes radicados en
Estados Unidos a su gente.
Según
datos oficiales, más de 1 millón 500 mil guerrerenses radican en el país del
Norte; es decir, que cuándo arrecia la crisis en el país, crece el envío de
dólares de los migrantes mexicanos a sus familias en México, y también estas
cifras favorecen al país financieramente hablando.
Con
este dato no pretendo contradecir al mandatario federal, pues no mastico temas
de finanzas y de dólares menos. Lo que sí quiero compartir es que el gobierno
tiene que poner más interés en los rubros que están al alcance de la gente
local. Incluso el gobernador Héctor Astudillo Flores -quien asistió al informe
del presidente AMLO-, reiteró que en el presupuesto de Egresos de la Federación,
el cual entregan a la Cámara de Diputados el próximo 8 de octubre, el estado de
Guerrero debe ser considerado aparte, por las condiciones de atraso y violencia
que se viven aquí.
Astudillo
espera que 2020 no sea tan difícil como lo fue 2019.
Incluso
el gobernador, al reunirse con gobernadores priistas, exige que Guerrero sea
incluido por su potencial turístico en el Presupuesto de Egresos para el 2020.
“Debe
volver la inversión al turismo, pues me preocupa -dijo el mandatario estatal- que
en el informe no hubo palabra sobre el turismo y Guerrero es un estado con
vocación turística, sus puntos centrales Taxco, Acapulco y Zihuatanejo, sin duda
no interesa mucho el turismo”, recalcó.
Por
esto el gobierno debe activar la economía local con el turismo y el campo. Si
no hay inversión en estos rubros, el estado no caminará hacia delante, seguirá en
retroceso.
El
presidente AMLO señaló con bombo y platillo el programa de Jóvenes Construyendo
el Futuro. Él dice que cuenta con un padrón de 930 mil jóvenes aprendices, ¿pero
de qué oficio? Pienso que los organizadores debieron dar estadísticas al
presidente de cuántos muchachos hay aprendiendo algún oficio.
De
ese número de chicos, ni la mitad está aprendiendo algún trabajo. Me temo que
el programa de Jóvenes Construyendo el Futuro va a ser un rotundo fracaso, pues
varios de estos muchachos, con el fin de entrar al programa y recibir los
chelines, pactaron con los organizadores del programa y también con dueños de
negocios para que les den la firma, y ellos trabajen de empleados medio tiempo
o turno completo, al fin que paga el gobierno federal.
¡Qué linduras! Hasta cinco muchachos llegaron
a un solo negocio, y no es cuento lo que le digo. Si le mandan muchachos,
primero preguntan qué van hacer; si no les gusta, se van y buscan otros
negocio. Obvio, donde no hacen nada. Están cuatro horas sentados en el
mostrador de un negocio esperando cumplir su horario. Si no me creen,
verifiquen por ustedes mismos en la comunidad donde vive. Vea a los muchachos
que están de cajeros en algún negocio, de meseros, de choferes, de guardias en
un hospital particular, cuidando niños o vendiendo tortillas en una
tortillería.
La
verdad es que muy pero muy pocos están aprendiendo oficios, cuando la intención
del programa fue eso, que los llamados ninis aprendieran a trabajar en algún
oficio que les guste; por ejemplo, carpinterías, tapicerías, electricidad, y un
largo etcétera, para que después de finalizado el programa estos chavos
trabajen y se mantengan y dejen de andar de flojos en las calles.
Pero
no lo están haciendo de esta manera. Por eso me atrevo decirles que el programa,
si no lo corrigen ahora mismo, será un rotundo fracaso.
Les
contaré una vivencia que sucedió a una sobrina que aún no termina su carrera,
pero quiere aprender un oficio para ayudarse. Ella quiere aprender repostería y
se inscribió al programa. La enviaron a una juguería. Les dijo que ella quería
aprender un oficio, pero le dijeron que ya no hay espacio, “entras ahí o te
quedas fuera”. Bueno, se quedó en la juguería. Al otro día la mandaron a vender
manzanas con chile y tenía que vender cincuenta o ya no la aceptaban. Y aparte
tenía que pagar la fruta y de lo vendido todo era para la señora de la juguería,
buen negocio ¿qué no?
Éste
es un ejemplo, ya no sigo porque me van a linchar, pero tengo varios. Incluso
sé hasta de esos organizadores que les quitan mil pesos a los muchachos que
ingresan al programa. Obvio, tampoco asisten a los negocios los chavos, ese es
el plan.
Por
eso les digo que la intención del presidente AMLO fue buena. Lástima que en
México somos muy tramposos. Ya ven que dice el dicho popular que el que no
transa, no avanza. Somos bien canijos, pues, bien flojos; y nos gusta el dinero
fácil, nos gusta ganar billete sin hacer nada.