ELEAZAR ARZATE MORALES
Fue suspendido el desalojo de las familias que invadieron el parque El Limón, reserva ecológica del puerto de Zihuatanejo, luego de sostener un diálogo con los representantes de las diferentes autoridades.
Fue la tarde de este martes, que incursionaron elementos de la Policía Municipal, Estatal y agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) para efectuar el desalojo del que estaba al frente Diego Aquino Mercado, Jefe de Patrimonio del Fideicomiso Bahía de Zihuatanejo (Fibazi), que dialogó con los invasores que llevaban consigo palos y machetes.
Uno de los líderes de este movimiento, Severiano García Feliciano, señaló que sólo colgaron hamacas, sillas, lonas para cubrirse del sol, entre otras y reprochó que hay otro grupo de personas que desde hace tiempo tiene invadida esta zona sin que nadie los moleste.
“La gente de este lado está por lo mismo, desalójalos primero, nosotros sin decir nada nos vamos a retirar también, si quieres llevar presos llévanos a todos, estamos dispuestos a luchar este terreno”.
Otro líder de este movimiento, Marcial Dircio Ortega, reprochó la manera en que llegaron a abordarlos, en un operativo en el que implicaron a las diversas corporaciones policiacas.
“Nosotros queremos ver propuestas de ustedes no que sálganse, vámonos, nosotros también queremos escuchar sus propuestas del gobierno del estado pues”
En tanto el ciudadano Juan Herrera Hernández, expuso que es costoso rentar un lugar donde vivir y siempre los condicionan de no llevar consigo niños.
“No quieren a los menores, por qué, un menor es hiperactivo, entonces no podemos más que incurrir a los lugares más cercanos porque no tenemos la solvencia económica para ir a buscar un lugar lejano, por la cuestión del transporte, si nosotros vivimos en Barrio Viejo y vamos a trabajar a Ixtapa se nos acaba el salario”.
Agregó que, “lo único que estamos pidiendo es un pedazo de tierra donde podamos vivir felices y contentos, nosotros somos gente trabajadora, no les estamos pidiendo nada regalado, queremos negociar, necesitamos de un terreno”.
Por su parte, Juvenal Maciel Oregón, delegado de gobierno en la Costra Grande de Guerrero, les advirtió que una reserva ecológica no es apta para vivir, que buscarían una alternativa para ellos y que de lo contrario sería su responsabilidad.
“Es una reserva ecológica, es eso, no está apta para vivienda, lo que se va a buscar es la alternativa para que ustedes tengan vivienda, si y no es de ahorita se les ha plateado con anterioridad.”
“Yo les pediría que antes de seguir en la deforestación, de plano eso no está bien, vamos armar la mesa para suspender lo que se haya hecho, lo que se haya hecho, y les pido, eso si ustedes quieren, sino es su responsabilidad, su responsabilidad, yo les digo que no está bien y que si ponemos suspenderlo lo que se haya hecho, suspenderlo y formar una mesa de dialogo, rápido, porque eso tiene que ser rápido”.
Al final, los líderes acordonaron con Diego Aquino Mercado, responsable del desalojo, que no se retirarían de la zona ecológica hasta después de reunirse en Fibazi para buscar soluciones para los invasores, que aseguraron son 500 familias, aunque en ese momento no estaban todos porque este hecho ocurrió en sus horas de trabajo.