El Sevilla ya tiene el primer desembolso apuntado en su lista de fichajes para la próxima temporada. Se trata de Suso, quien firmó el pasado mes de enero un contrato de cesión por 18 meses procedente del Milan, en el que se contemplaban dos opciones para que el club andaluz se lo quedase en propiedad de forma obligatoria.
En el caso de que en este primer año (como así ha sido) o el siguiente se lograse la clasificación para la Champions, el Sevilla se comprometía a quedarse en propiedad con el extremo abonando 21 millones a su club de origen.
Suso tenía muy claro, cuando firmó, que su única intención era la de permanecer mucho tiempo en el Sevilla. No llegaba a Nervión para una aventura puntual, por lo que también puso de su parte para que la cesión fuese de año y medio, tiempo suficiente para convencer a los dirigentes del Sevilla y, de paso, que el equipo lograse el ambicioso objetivo de quedar entre los cuatro primeros. No ha hecho falta más que seis meses para ayudar a lograr este éxito deportivo.
El gaditano suma 17 partidos con el Sevilla. Ocho de ellos antes del confinamiento, en los que fue titular en seis de ellos y anotó un gol frente al Espanyol, partido en el que también dio una asistencia.
Lleva nueve en esta segunda serie, apareciendo siempre, aunque ahora con menos peso, con sólo tres partidos de titular y aún lejos del nivel ofrecido en su primer mes y medio. Lopetegui confía mucho en él y debe ser pieza importante del Sevilla de la Champions. El primer fichaje de la 20-21 ha caído casi sin pensarlo.