CHILPANCINGO. Autoridades de la Secretaría de Educación en Guerrero (SEG) podrían estar lucrando económicamente con el desperdicio de fierro y material de aluminio recuperado en la demolición del ex Ineban, denunciaron integrantes de la delegación magisterial disidente que se mantiene en ese lugar.
Hace dos meses, la Comisión de Infraestructura Carretera y Aeroportuaria del Estado de Guerrero (CICAEG) inició la demolición del viejo edifico que hasta hace cuatro años albergó a 2 mil 800 trabajadores de la educación, y donde en las últimas semanas al menos seis vehículos han salido cargados con desperdicio metálico, como acero, pedazos de varilla y aluminio.
Los denunciantes asumen que el director de los Servicios Generales de la SEG, Nabor Ojeda, podría estar detrás del “acaparamiento” del material de desecho para su venta.
En un recorrido por ese lugar, se pudo constatar que la maquinaria usada para la demolición fue retirada y al menos dos trabajadores se encuentran separando el fierro de los escombros.
De ese mismo espacio se retiraron también puertas y marcos de ventana de aluminio del edificio que quedó reducido a escombros durante las últimas semanas, y entre los cerros de concreto se puede observar que un largo vehículo de carga está siendo llenado de material desechado.
El dirigente de la delegación D III (16) 02 del ex Ineban, Jorge Cisneros Salinas, comentó que tienen conocimiento de que por falta de dinero no se ha retirado el escombro de cemento de ese lugar.
“Lo que sí hemos visto es la salida de camiones repletos de fierro que pudiera estarse vendiendo por cientos de pesos y que no se ha aclarado cuánto es y en qué se invertirá”, dijo entrevistado en ese lugar.
Concluyó que, por otra parte, la SEG no les ha presentado el proyecto de construcción, montos o el diseño del inmueble, ni mucho menos la licitación de la obra.