Ruth Tamayo Hernández
Ya hay fecha para la reapertura del sector turístico en Guerrero
“El éxito no se logra sólo con cualidades especiales. Es sobre todo un trabajo de constancia, de método y de organización”: J.P. Sergent.
Mis estimados, hay buenas noticias para Guerrero. Aunque los índices del Covid-19 siguen a la alza, las autoridades estatales confían que mañana 1 de julio el color del semáforo por Covid-19 cambie de rojo a naranja.
Por eso el gobernador, Héctor Astudillo Flores, se reunió con la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, y acordaron con hoteleros, prestadores de servicios turísticos y restauranteros, la reapertura para el jueves 2 de julio.
En esta primera etapa, abrirán los hoteles y áreas de condominio, espacios deportivos y polideportivos, restaurantes y parques, pero ofrecerán servicios al 30 por ciento de su capacidad.
Dicho acuerdo obliga a empresarios y sociedad en general a cumplir las medidas sanitarias establecidas por la Secretaría de Salud, para evitar un repunte de la pandemia, y la vuelta al confinamiento.
El mandatario estatal planteó otra reunión para este 1 de julio y para dar a conocer los nuevos datos que presenta la Secretaría de Salud federal, en relación al semáforo epidemiológico.
Para ello, pidió que se incluyan a esa reunión a representantes de muncipios turísticos.
Sin embargo, el gobernador, hizo un llamado enérgico a la sociedad: “Si no nos cuidamos, a los diez días vamos a volver a cerrar o nos va a durar poco la felicidad de estar en color naranja”.
Todo esfuerzo vale la pena, mis estimados. La reapertura del sector turístico va a ser estricta, pues está de por medio la vida y la salud de todos.
El compromiso es cumplir los protocolos y lineamientos de Salud, federal, estatal y municipal. Nada nos cuesta.
El compromiso es de todo el sector turístico y es ahora cuando deben caminar en una misma dirección, unidos, para que el plan funcione y no les suceda lo que en Baja California, donde el gobierno volvió a cerrar las playas porque se tuvo un repunte de contagios, pues no respetaron los protocolos de salud, y así no funciona.
Señores, el pacto es para que todos respeten los protocolos de salud. No esperen que los anden vigilando, cumplan su palabra. Ya les dijeron que la playa es para acceder en forma individual, no en grupos.
Entiendan, respeten y bien pronto podremos disfrutar al 100 por ciento el destino, pues las playas van a permanecer abiertas de 7:00 de la mañana a 7:00 de la noche.
Claramente se prohíbe el acceso a grupos, cuatrimotos, caballos y mascotas.
También están prohibidas las hieleras, ni se pueden ingerir bebidas alcohólicas en las playas.
El secretario de Turismo, Ernesto Rodríguez Escalona, expuso que los hoteles, restaurantes, condominios y los negocios establecidos en zona federal marítimo-terrestre, podrán abrir con un máximo del 30 por ciento de su capacidad, pero no permitirá servir alimentos ni bebidas en el área de playa, y tampoco se permitirá el consumo de alimentos, bebidas alcohólicas y tabaco en la franja de arena.
También expuso Rodríguez Escalona, que se reanudan actividades náuticas y deportes acuáticos, así como los servicios religiosos al 30 por ciento y con suficiente ventilación.
La alcaldesa Adela Román, asegura que Acapulco “resurgirá como el ave Fénix y será el reencuentro con el paraíso, porque vamos hacer que la gente se encuentre con esa generosidad del pueblo acapulqueño, con esa disposición servirle a quienes nos visitan”.
Pues Ixtapa-Zihuatanejo, aunque en este momento el Covid-19 sacude con furia a la sociedad zihuatanejense, la esperanza de la gente se mantiene viva para que pronto pase esta pesadilla y tambien vuelva a brillar la estrella que siempre ha dado luz a este destino.
Los negocios que permanecerán cerrados el próximo 2 de julio son: bares, cines, gimnasios, discotecas, plazas comerciales, salones de fiesta y demás establecimientos no esenciales.
Les decía que los números rojos por Covid-19 en Guerrero son altísimos. Así lo señala el informe del secretario de Salud estatal, Carlos de la Peña Pintos, quien dijo ayer que este lunes fue el de mayor número de muertes por Covid-19, sumando el estado 868 defunciones por coronavirus, desde el inicio de la pandemia a la fecha, y 5 mil 336 contagiados, de los cuales, 194 se registraron en las últimas 24 horas, siendo este lunes el de mayor cantidad de casos confirmados.
Es preocupante el dato. Sin embargo, mantengamos la esperanza que cambie el semáforo epidemiológico del Covid-19 de color rojo a naranja para el 1 de julio.
Dentro de todo el municipio de Zihutanejo y Taxco, así como Chilpancingo e Iguala, que son las principales ciudades de actividad turística en Guerrero, se aplicarán las mismas operaciones de apertura para el próximo 2 de julio.
Manos a la obra, empresarios del sector turístico. Querían fecha para abrir, pues ya la tienen. Preparen el terreno con todos los protocolos que trazó la Secretaría de Salud.
En algunos estados se aplican multas altas a quienes no respeten los protocolos de salud federal. Y si en Guerrero, seguimos siendo testarudos, también que apliquen multas para que de esa manera nos apliquemos todos. .
Además, mis estimados, tenemos que acostumbrarnos a la “nueva normalidad”. No hay otra forma de abrir las actividades comerciales, industriales, sociales, deportivas y turísticas en la entidad, salvo de esta manera, con suma precaución.
Aun cuando pase el pico de la pandemia, las precauciones tendrán que continuar, máxime cuando se abran todas las actividades. Por lo tanto, mientras más pronto comencemos a acostumbrarnos, mejor.
Lo malo que desaprovechamos la cuarentena para tomar los hábitos que nos harán sobrevivir la apertura, pero nunca es tarde para comenzar, cuando se trata de nuestra vida.
No se lo tomen tan a la ligera, mis estimados. La apertura no significa que el Covid-19 se fue. Al contrario, como ya expuse, puede repuntar la pandemia, y cobrar más víctimas.
Lo bueno de todo, es que 80 por ciento de los contagiados sólo registran síntomas leves, y únicamente 20 por ciento de ellos está propenso a agravarse.
Imagínense, si en esta proporción las cifras de hospitalizados y fallecidos son graves, si fuese al revés no habría hospitales ni panteones suficientes.
Pero no nos confiemos. Los testimonios de los infectados son de terror. Noches sin dormir, sin poder respirar. Algunos no caminan de tanto que se debilitan. Otros incluso pierden el habla, y conozco casos en donde pierden la memoria, ya no conocen a nadie.
Los que de plano no soportan, pues tienen que ser intubados y recibir respiración mecánica, a causa de la imposibilidad de sus pulmones para suministrar oxígeno.
Y no, no los intuban a todos. Se necesitarían miles y miles de ventiladores, de los que cuestan 1 millón de pesos cada uno. Así que no se crea eso de que en cuanto entre a la Sala Covid lo van a intubar. Si así fuera, qué bueno; pero más bien los que mueren es porque no tuvieron acceso a ese servicio.
Para colmo, el contagio es prolongado. En pacientes jóvenes y sanos, pueden salir en 7 días, pero son los menos. Generalmente bajar la carga viral se toma 15 días. O como en personas con enfermedades concomitantes, hasta 3 semanas.
El caso es que no se les da de alta hasta que dos o tres pruebas demuestran que están libres del virus, y que por lo tanto ya no representan riesgos de contagios para otros.
Desde este espacio, felicito al gobernador Héctor Astudillo Flores, quien ayer fue dado de alta por el contagio de Covid-19. Al mandatario guerrerense le tomó 22 días salir de su propio martirio, y él mismo comentó que vivió momentos difíciles.
No necesita decirlo. Al paso de los días se le veía más delgado y demacrado, pues padece diabetes. Afortunadamente, el gobernador ya salió del problema y ahora es uno de los guerrerenses con inmunidad. Enhorabuena, señor gobernador, y bienvenido a la vida ordinaria, que a decir verdad nunca dejó de lado su trabajo, pues siempre estuvo al pendiente, dirigiendo este barco llamado Guerrero.
Y a ustedes, mis estimados, bienvenidos también a la “nueva normalidad”.