Ruth Tamayo Hernández
*Autoridad en San
Lázaro, cuento chino
*Tricolores no hallan
como levantarse
“La
soberbia es una discapacidad que suele afectar a pobres infelices mortales que
se encuentran de golpe con una miserable cuota de poder”: José de San Martín.
Mis
estimados, a partir de que los miembros de la 64 Legislatura de la Cámara de
Diputados tomaron el cargo, hicieron creer a los mexicanos que habían establecido
un plan de austeridad; incluso algunos legisladores hasta dijeron que ya no
convenia ser diputado federal, pues era muy poco recurso el que recibían,
aunado a que ya no les autorizaban recursos para obras a sus distritos y que
les concedían mas recursos a los diputados locales que a federales. Sin
embargo, de acuerdo a los datos publicados por la Cámara de Diputados, la
dichosa austeridad que tanto cacaraquearon, es un cuento chino.
Miren
porqué se los digo: Los diputados se aprobaron para la compra de vales de
despensa y alimentos, de legisladores federales, empleados y colaboradores, 162
millones 831 mil 729 pesos. La empresa que dará esa prestación se denomina Sí
Vale México S.A de C.V.
Y
tal parece que el nuevo gobierno y los poderes, persistirán con el mismo
sistema, pues ya vieron que les funciona a la perfección y el pueblo les cree
lo que ellos dicen. No obstante, como ellos publican, la ignorancia mata a los
pueblos, y es preciso matar a la ignorancia. Por eso el pueblo debe saber que
en San Lázaro lo que cambió fue conforme a los intereses de los diputados; lo que
autorizan es para ellos, sin darle nada a sus distritos.
Lean
bien: Cada legislador federal recibe mes a mes en su cuenta bancaria 73 mil 910
pesos por su dieta; además 45 786 por Asistencia Legislativa y 28 mil 772 por
Atención Ciudadana. Estos dos rubros deben ser comprobados.
Peor
tantito, acuérdense que son 500 diputados y nunca asisten los 500, y los mexicanos
nunca hemos sabido qué se hace con ese dinero que no les entregan a los
faltantes; además, los diputados les deben a los ciudadanos una oferta, ya que prometieron
en campaña aprobar una ley para reducir el número de diputados en la Cámara,
pero no han cumplido a su palabra; la cámara sigue siendo demasiado costosa
para los mexicanos. E imagínense, les dan un bono a los diputados por asistir a
la cámara. Esto es una gran burla, porque se supone que fueron votados por sus
distritos para legislar y defender a sus representados, por trabajar, pues.
Pero no van, escudándose en que no les conviene, porque ya no hay dinero.
¿Cómo
ven a los angelitos diputados? No tienen vergüenza, porque ni la conocen.
En
otro tema, mis estimados, se dice mucho de la división que hay al interior del
PRI en Guerrero, según es porque el poder lo concentran tres personajes que no
tienen buena imagen con los guerrerenses; sin embargo, ellos sienten que pueden
conservar el poder en 2021.
Pero
como en política no hay nada escrito y las circunstancias son distintas de
cuando ellos eran cabeza y no cola, se complica las aspiraciones de los viejos
lobos de mar. Incluso ni su gran experiencia les sirve en estos tiempos, que
muestran que son tiempos de los jóvenes, de las nuevas generaciones, pero no de
sus hijos, tienen que abrir las puertas a nuevos elementos con brillo e
inteligencia para asegurar que el tricolor se mantenga vivo en 2021; de lo
contrario se comienzan a despedir de este mundo cruel.
Si
el PRI no aprovecha su estructura -porque es el único partido que tiene
estructura, Morena no tiene, el PRD está muerto y la chiquillada no cuenta- entonces
los tricolores no aprovechan la formación no tienen futuro. Pero si lo hacen, tienen
con qué ganarle a Morena.
Los
priístas tienen que seguir haciendo lo que les funcionó durante más de 80 años:
dividir a sus partidos adversarios; pero lo dejaron de lado, y ahora se pelean
entre ellos. En vez de unirse los hijos de la guayaba, andan en pleitos entre
tricolores comprando problemas, cuando ellos tienen hasta para regalar.
El
PRI, sin embargo, tiene un grave problema: no ha podido levantarse del gancho
al hígado que le propino Morena –aunque con candidatos chocolates.
Por
su parte, los morenos siguen tirados y el 2021 se acerca rápidamente. Cabe
hacer mención que no se hace un gobernador en dos años, y a los tricolores se
los está comiendo el tiempo y no se mueven.
Otros
angelitos que sueñan con la silla de Héctor Astudillo, pero no tienen balsas
para nadar, y todo indica que se va a hacer realidad el sueño del presidente
Andrés Manuel López Obrador, pues el mandatario añora gobernar esta entidad
porque, para AMLO, Guerrero es un estado especial y hace todo para ganarlo,
mientras que los tricolores están pasmados, tirados, no reaccionan. Y los
dirigentes de dicho partido siguen aferrados a sus propios intereses, no abren
las puertas del partido a nuevos talentos para conservar la gobernatura en 2021.
Siendo
un partido bien estructurado, es el instituto político con mayor riego de
desaparecer. Le podría suceder al PRI lo mismo que a los caballos finos: ya de
viejos, sólo les va a quedar el pedo y el relinchido.
Les
decía que el presidente AMLO quiere Guerrero para su anhelado Morena, sólo que
la caballada está muy flaca y quemada, peor que los del frente, porque los
vecinos no niegan la cruz de su parroquia, pero los colindantes que añoran la
silla grande del estado de Guerrero, se asustan el muerto y se abrazan de la
mortaja; tienen una cola más larga que la Costera Miguel Alemán.
Figúrense
que los de Morena están preparando a la senadora Nestora Salgado para jugar la
gubernatura, por aquello de la equidad de género. Dicen que por si le toca a
Guerrero jugar con mujer, ya tienen candidata, pero la señora tiene
antecedentes tan oscuros como la noche.
Y
los demás morenos ni se digan, están igual o peor que los otros gallitos
alaquines. A los demás nombres, ustedes los conocen, de todos no hay cual irle.
De plano tienen que haber gente nueva para que los electores les pueda dar el
voto.
Por
eso el PRI tiene la oportunidad de conservar el gobierno, porque tiene con qué
hacerlo. Su organización es buena, sólo que tienen que dar oportunidad a nuevas
generaciones.
Guerrero
tiene mujeres y hombres bien preparados, capaces de gobernar una entidad. No
necesitan experiencia, eso es un cuento. La tarea de los tricolores es de
liberar al partido de caciques acedos, que sólo han jodido al pueblo.
Y
ya se escucha en los corrillos del estado por priistas viejos, que indican que
si los dirigentes no dan cabida a nuevas personas al PRI, van a perder en 2021
y van a perder el estado de Guerrero; y no solo eso, va a desaparecer el PRI.
Les
digo, traen pleito casado los tricolores. ¡Feliz inicio de semana, mis
estimados!