Trinidad Zamacona López
“La peor forma de injusticia es la justicia simulada.” Platón.
Por falta de legislación, la UNAM, no puede revocarle el título a la Ministra Jasmín Esquivel Mossa. Por lo que seguirá siendo integrante de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, asistirá a las sesiones y votará los asuntos que resuelva el máximo tribunal del país.
Nadie que se recuerde en la vida de la UNAM, conocida como la máxima casa de estudios, había metido en problemas a dicha institución, la poderosísima escuela gozaba de una reputación, que incluso la ponían como las mejores del mundo.
Cómo va el caso, pues bien el día de ayer la Secretaria de Educación Pública, mediante el oficio UR-100/OCSEP/0013/2023, firmado por la titular Leticia Ramírez Amaya, si como lo escucha aquella que no supo contestar a una reportera de cómo era la evaluación a los niñas y niños de México, en la materia de matemáticas, y contesto “eso no te lo puedo contestar” es la misma que le regresa el expediente a la UNAM, para que con base en el principio de autonomía, establecido en el artículo 3º de la Constitución Política del País, resuelvan si el título de Esquivel Mossa es legal o no. Y para el caso de que se determine que es nulo e ilegal, entonces presenten la denuncia ante las instancias como podría ser la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, o bien ante la Fiscalía General de la Republica. La primera instancia ya la exoneró en menos de 6 días antes de que se votara en la elección de la nueva Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. La segunda es la instancia (FEPADE) que exoneró a Pío López Obrador, recientemente con respeto a los dineros recibidos por David León Romero, es decir no hay en quien confiar, pues de haber llegado el expediente a sus manos de los titulares, la hiciesen declarada mártir de la justicia.
Pero regresemos a la misiva, que la SEP envía al devolver el expediente a la UNAM, dice que del estudio que realizó del expediente, se desprende que la autonomía que establece el artículo 3º Constitucional, establece la autonomía, de las universidades públicas a las que la ley les reconoce esa facultad deben de gobernarse a sí mismas, por lo que estas las que deben de resolver el asunto; pero además le manifestó lo siguiente, también le dice que de las constancias de lo actuado se desprende que el Comité de Integridad Académica y Científica de la Facultad de Estudios Superiores Aragón, estimo que el asunto de mérito deberá ser valorado por las instancias universitarias competentes para que en el uso de sus facultades proceda conforme a la ley universitaria aplicable; en pocas palabras les dijo resuélvanlo ustedes con lo que tengan de norma, nosotros no podemos invalidar el título.
Pero ustedes, se refiere al comité de la FES, Aragón, en lo que determinó el comité aplicó la legislaciónuniversitaria, deben de resolver, o en su defecto dar aviso a la autoridad ministerial, siempre y cuando se le haya dado el derecho de audiencia, es decir las garantías al debido proceso.
Ya por la tarde del día de ayer, la UNAM, a través de su Abogado General, dio a conocer que ante la ausencia de una regulación, no se podría anular el título de licenciatura de la Ministra Jasmín Esquivel Mossa, aun y cuando este la confirmación del plagio de su tesis. Lo que se entiende como un carpetazo, por lo que tenemos Ministra Esquivel Mossa, para mucho rato, contra y todo el plagio de su tesis, la ausencia de una ley aplicable al caso la salva de por vida, no se ira del máximo tribunal del país.
Alfredo Sánchez Castañeda, quien es el Abogado General de la UNAM, declaró que la máxima casa de estudios, no tiene facultades para anular el título de Licenciada en Derecho a Jasmín Esquivel Mossa; el letrado en entrevista con Joaquín López Doriga, expreso, “No porque no tenemos prevista la infraccióncuando algún estudiante, o en su momento, cuando algún estudiante hace uso de un trabajo que no es propio. Hay uno que se llama Derecho Administrado Sancionador, y justamente para proteger a las personas, la autoridad debe de tener muy delimitado lo que puede hacer y cómo puede sancionar” según la nota de Radio Forula.mx que se publicó por la tarde de ayer. Y fue a la pregunta del porque no se le puede sancionar con la legislación vigente que tiene la UNAM.
En la entrevista con López Doriga, tal como ya lo habíamos dicho que no se le puede aplicar una norma de forma retroactiva a Esquivel Mossa, en caso de que la UNAM, le diera creación en estos momentos con tal de sancionarla. “Hay un principio de no retroactividad de la norma que se tiene que hacer respetar. Justamente se va a tener que verificar ese supuesto, si existe posibilidad o no, ya es una cuestión que tendrá que decidir en su momento la Comisión de Legislación Universitaria del Consejo Universitario” terminó diciendo el Abogado General de una institución que hoy, por hoy, su prestigio esta por los suelos, asumirán el costo de dejar pasar a una persona que les cometió fraude en su propia casa en sus propias narices.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador, desde que ha sido candidato a la Presidencia de la Republica, no ha querido a la UNAM, y porque habría de quererla ahora cuando un Profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, Guillermo Sheridan, le dio una estocada a la 4t en donde más ha presumido, no robar, no traicionar y no mentir, su honestidad valiente no es tan pura, no es limpia, legal o transparente. López Obrador, le ha llegado de decir al propio Rector Enrique Graue, Poncio Pilatos, la lavarse las manos y no resolver el asunto de fondo, la institución actuó con legalidad, no tiene ley que aplicar, les dio a ellos el beneficio de la duda, pero prefirieron devolver en lugar de ser legales en un asunto que también les atañe a ellos, pero no fue así, quieren el control de la institución, este es el momento para hacerse los mártires y echarle toda la culpa a la Universidad, y ellos si lavarse las manos.
Con esto solo queda el Juicio Político, pero nadie dice yo¡ veremos que le depara a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que no han dicho absolutamente, con un afán de no enfrentarse al mandatario federal, hasta donde llegará el prestigio que deben defender, y no han hecho absolutamente nada.