Ricardo Castillo Barrientos
Este día viernes 22 de agosto se cumple un acariciado anhelo de la burocracia guerrerense, federal y estatal, con la puesta en marcha del Hospital Regional de Alta Especialidad del ISSSTE (HRAE), en Acapulco, a cargo de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, después del compromiso adquirido por el ex presidente Andrés Manuel López Obrador de poner en funcionamiento un hospital de alto nivel, en las instalaciones del cercenado Centro de Convenciones.
Los trabajadores al servicio del estado, familiares y pensionados, venían soportando el cúmulo de deficiencias cotidianas como la demora de citas y cuadro básico de medicamentos incompleto, en las unidades hospitalarias de Acapulco, Chilpancingo, Iguala y las unidades médicas periféricas, con atención de primer nivel (medicina preventiva) y segundo nivel (especialidades y cirugías menores).
Las cirugías mayores se tenían que derivar con un buen tiempo de espera, al Hospital Regional de Cuernavaca, al Centro Médico “20 de Noviembre” y al Hospital Regional “Lic. Adolfo López Mateos”, en la Ciudad de México, con las dificultades de tipo económico, laboral y familiar.
Una ardua y prolongada lucha magisterial hizo factible el cumplimiento de su justa demanda, considerada casi imposible ante oídos sordos de autoridades federales por la magnitud de la inversión superior a los 3 mil millones de pesos.
El nuevo Hospital Regional de Alta Especialidad del ISSSTE, dispondrá de equipo médico de alta gama o última generación para otorgar servicio en todas las especialidades, hasta en medicina nuclear, comprendiendo laboratorios, banco de sangre, tomografía, mastografía, ultrasonido y rayos X, para atender cirugías de urgencias, tococirugías, ginecoobstetricia y densitometría.
Contará con 44 consultorios, 50 máquinas de hemodiálisis, 6 de diálisis y 18 equipos de quimioterapia. Entre las especialidades se encuentran: psiquiatría, endocrinología, angiología, alergología, neurología, medicina interna, oncología, pediatría, ortopedia, traumatología y cardiología.
Como Hospital Regional recibirá pacientes derivados de los estados de Oaxaca y Michoacán, de los municipios aledaños a la entidad que carecen de atención médica de alta especialidad.
La población derechohabiente del ISSSTE en Guerrero es superior a los 650 mil trabajadores, familiares y pensionados, lo cual revela que el nuevo centro médico deberá tener una gran capacidad resolutiva, con calidad y calidez, que superen todas las deficiencias que se han venido arrastrando en médicos, enfermeras, medicamentos y equipos hospitalarios.
Marea Baja.- Recuerdo a Jaime Irra Carceda cuando fuimos estudiantes en la Prepa 2, muy inquieto y propositivo en las lides universitarias, hacia mancuerna con Lorenzo Ramírez Gallardo, presidente de la Sociedad de Alumnos.
Después se fue a Chilpancingo a continuar con sus estudios, pero le ganó más el periodismo que abrazó con abnegación y profesionalismo, en compañía de los periodistas más brillantes de la época, forjando una nueva generación de tundemáquinas, entre ellos, el propio Jaime, Pedro Julio Valdez, Andrés Campuzano, Gustavo Salazar y Leoncio Domínguez Covarrubias, maestro universitario.
Le tocó el turno al amigo Irra, como tantos amigos que han dejado el plano existencial. Cumplió con creces y pasó la prueba de fuego con profesionalismo como periodista, poeta y escritor. ¡Hasta siempre comandante! Mis condolencias fraternas a su hermano Ángel, a su hijo Jaime, a su esposa y a la familia.
Marea Alta.- Fuerte la polémica desatada por el ejercicio de prueba del Marinabús por la bahía de Acapulco, observándose con más detalles las características de la embarcación, no resultando lo esperado, cuando se insiste en nuevos atractivos turísticos para el resurgimiento del puerto.
La cosa no para ahí, pues pasaron por alto los insignes mandos navales, que los pasajeros del Marinabús arribarán a la terminal del muelle de Puerto Marqués y de ese lugar tendrán que abordar otro medio de transporte para trasladarse a la glorieta del bulevar de Las Naciones, implicando más gasto, al menos que la MARINA absorba el costo, o los traslade en su propia flota de vehículos. Por esta serie de cosas, proyectos novedosos se reducen a su mínima expresión.
Maremoto.- Pedro Segura Balladares o Valladares, hay confusión en la primera letra de su segundo apellido, unos lo ponen con B grande y otros con V chica, pero es el mismo que salió bien librado de las supuestas acusaciones de tres testigos protegidos de la FGR, que lo habían señalado como partícipe de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, la noche trágica del 26 de septiembre de 2014, en Iguala.
Hay quienes argumentan que el fondo de su detención se debió porque acostumbraba despotricar contra los gobiernos federal y estatal, o por pretender ser candidato a gobernador del estado y era la forma de frenarlo y darle su “estate quieto”.
La grave acusación que le formularon a Pedro Segura, fue porque en el hotel “Vida en el Lago”, esa noche trágica llevaron cautivos, a seis estudiantes. Ciertamente por esa fecha, ese hotel estaba abandonado y pertenecía a la familia Checa Kuri, empresarios de abolengo de Taxco. Pedro Segura lo adquirió cinco años después, por lo que se desvaneció la endeble acusación, gozando de libertad y cabal salud.