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Los choques culturales entre México y Francia

A lo largo de nuestra vida, todos crecemos recibiendo los mismos estímulos de comida, música, palabras, repetimos las costumbres, gestos y formas de hablar de las personas que nos rodean y aunque muchas veces escuchamos rumores o historias de lo diferente que hacen las cosas en otros países, no nos damos cuenta de todos los pequeños detalles que para otras culturas pueden ser impactantes, quiero compartirles algunas de mis experiencias sobre los choques culturales que tuve y que los franceses tuvieron al ir a México.

El concepto del tiempo es sumamente diferente para los mexicanos y los franceses, sé que es mundialmente conocido que los mexicanos llegamos tarde a todos lados, cuando comencé a vivir en París tuve que hacerme responsable de mi tiempo, empezando porque llegar tarde es muy mal visto, hay entrevistas de trabajo en donde no te reciben por 10 minutos de retraso, personas que se molestan mucho por dejarlas esperando un poco y lo peor de todo es que el metro, bus y trenes tienen un horario muy exacto. En cada estación de autobús, metro o tren tienes una pequeña pantalla en donde te indica en cuanto tiempo pasara el próximo, todos utilizan las aplicaciones del teléfono para saber a que hora salir y ver los horarios.

Los franceses son puntuales, mismo en las fiestas informales, si la hora de llegada es a las 20H00, a esa hora tus amigos estarán tocando la puerta, planean todo con mucha anticipación, recuerdo al principio cuando le preguntaba a algún amigo o amiga francés si quería hacer un picnic o cenar, sacaban su teléfono y veían su agenda para decirme que estaban libres en dos o tres semanas, era algo que me causaba mucho conflicto.

Llegar a la casa de un amigo o incluso un familiar de « sorpresa » solo para tomar un café o platicar un rato es algo imposible, los franceses pueden ofenderse mucho, su tiempo y planes son sagrados, es necesario preguntar y hacer una cita para llegar a la casa de alguna persona. Recuerdo cuando mi esposo fue por primera vez a Zihuatanejo y veía llegar a mis primos, tíos, incluso unos primos llegaron de Guadalajara para quedarse a dormir y todo fue de « sorpresa », para él era sorprendente ver como no habíamos planeado nada y ellos habían pasado simplemente por estar cerca.

Continuando con las fiestas, siempre tuve muy claro que en México que mientras más personas llegaran a tu fiesta era mejor, una carne asada, un cumpleaños, podías llegar con un primo, un amigo, siempre son bienvenidos, bueno en Francia es necesario preguntar al anfitrión si puedes llevar a un amigo extra y es muy normal que te digan que no, generalmente es porque prefieren convivir con personas cercanas, esto hace que sea un poco complicado como extranjero entrar en un grupo de amigos franceses.

Igualmente es mal visto llegar a la casa de un amigo o familiar « con las manos vacías », siempre es necesario comprar una botella, flores, el postre todas las personas llevan algo al anfitrión de la casa. Las fiestas o reuniones familiares son menos que en México y generalmente las personas cenan o comen y se van directamente, cosa que en México no sucede, fiesta familiar es igual a estar todo el día con tu familia, una carne asada siempre termina en « vamos a tomar café a casa de la abuelita», recuerdo las reflexiones de mi esposo, siempre dice que mi familia cambio ese concepto de hospitalidad que él tenía.

La comida es todo un tema, claramente los ingredientes y platillos son distintos pero los horarios de comida también lo son, recuerdo que en mis primeras semanas saliendo de la universidad a las 15H00 de la tarde pase por un restaurante y moría de hambre, me senté, me dieron la carta y estaba por pedir algo cuando el mesero me dijo « ah no, la cocina esta cerrada », yo estaba impactada pero resignándome pensé en comerme un croisant, el mesero me dijo que no tenia y me vio muy extrañado, tiempo después me entere que los panes solo se venden en la mañana, ningún café o restaurante tendrá croisants a las 15H00 de la tarde, las personas comen entre 12H00 y 13H00, muchas veces si vas a las 14H00 encontraras pocas cosas o la cocina estaraá cerrada.

Pedir un café tampoco es lo mismo, el café en Francia es un expresso, si quieres un americano tendrás que pedir un « cafe allongé », que literalmente significa café acostado, para un café con leche debes pedir un « café au lait » y bueno el capuchino y latte se piden de la misma manera, pero mi papá y primos que me han visitado siempre se sorprenden por recibir un café expresso, esto me causo mucha gracia porque cuando la familia de mi esposo fue a Zihuatanejo se preguntaban porque al pedir un café les servían un café tan grande.

La comida en una típica familia francesa tiene este orden, primero todos toman una bebida y botanean con verduras, cacahuates, rábanos, papas, aceitunas, este es el momento del « apero », en este momento todos hablan se preguntan cosas sobre trabajo, vida, etc.

Después todos pasan a la mesa, en donde cada uno tiene varios cubiertos, una copa para vino y una para agua, se sirve la entrada que puede ser un poco de verduras, carne tartara, cosas pequeñas, continúan con el platillo principal generalmente es carne, pollo, pato o cordero con verduras, papas, arroz o pasta.

Lo siguiente es la ensalada, lechuga con aceite de oliva y vinagre balsámico, se pasa una tabla llena de quesos y cada persona corta un pedazo de los distintos quesos y se lo come con un poco de pan.

Para finalizar esta el postre, algunas veces ponen uvas o duraznos con una charola de agua para que lo laves rápidamente antes de comerlo o parten una tarta de manzana, cerezas ó limón.

Durante toda la cena se sirve vino rojo o blanco, dependiendo de lo que se este comiendo, en el aperitivo generalmente toman champagne o cócteles, las personas que no toman alcohol consumen agua natural o mineral. Esto también los impacto de México, la cantidad de refrescos o las distintas aguas frutales que consumimos.

En Francia las personas no comen mucho y respetan las horas de comida, es raro verlos comer solo para botanear, cosa que también los impacto de México, comemos todo el tiempo, los distintos puestos de frutas, papas, tacos, las cantidades e ingredientes son muy diferentes.

Ah sido difícil acostumbrarse a la cultura francesa, seguro que para mi esposo también a la cultura mexicana, somos muy diferentes, sin duda lo hermoso de las culturas es descubrir cosas nuevas y adaptarse o contarle a los demás como se hace en tu país. La familia de mi esposo estuvo en Zihuatanejo el año pasado por nuestra boda y desde que regresaron cuando se despiden o saludan (antes del covid-19) se abrazaban y decían, « un saludo a la mexicana », siempre me hacía sonreír ese momento.

Creo que el mundo esta lleno de diferencias para que todos podamos aprender todos los días y enseñar lo hermoso de nuestra cultura, no significa que un país es mejor que otro ni mucho menos, solo quiere decir que en cada lugar se hacen las cosas de distinta forma, seguramente todo tiene un trasfondo histórico y social.

Los choques culturales nos enseñan y sin duda alguna nos recuerdan todo eso que amamos tanto y que talvez nunca notamos de nuestra hermosa cultura mexicana.

RUTH MORELOS

INSTAGRAM : ruthmorelos

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