El habitante de la colonia irregular Ampliación Buenos Aires, Héctor Rojas Martínez, acusó al líder del asentamiento, Isaí Hernández Landa, de estar preferenciando a otras personas con la asignación de lotes por supuestos intereses personales; manifestó que lo quieren mover a un predio más lejos, cuando él lleva cerca de 12 años viviendo en el mismo terreno.
En entrevista Rojas Martínez, relató que su vivienda se ubica justo donde termina el área afectada por el incendio del pasado 23 de diciembre, sin embargo a la hora de que las autoridades realizarán las obras de mitigación, le argumentaron que una parte del predio donde tiene edificada sería utilizado para ampliar la calle principal, lo cual aceptó, bajo la promesa de que no iban a mover.
“La inconformidad de nosotros es que respeten nuestras familias como mexicanos que somos que nos dejen donde estamos que no anden tratando de desestabilizarnos, ni amenazas ni nada porque nuestro terreno, aunque uno sea pobre no importa, nosotros tenemos derecho a vivir ahí, no hay necesidad de que nos quiten para dársela a otra persona”.
Según Héctor Rojas desde hace unos días, el líder de la colonia irregular Isaí Hernández, supuestamente le dijo que tenía que mover de predio porque ese ya lo había asignado a otra persona, que tenía el dinero para pagar el enganche que pide el Fideicomiso Bahía de Zihuatanejo (Fibazi) para que puedan contratar.
Ante eso, Héctor Rojas y su esposa, María del Carmen Martínez, acudieron al Fibazi para solicitar una explicación, porque consideró injusto que después de vivir 12 años en ese lugar, ahora por supuestos intereses personales del líder, lo quieran mover a un terreno más lejos; fue entonces que ahí en la paraestatal les prometieron que los iban a ayudar.
No obstante, este martes, acudió personal del Fibazi al asentamiento junto al líder para hacer el listado de los lotes a contratar y los posibles dueños, fue ahí cuando el predio de Héctor Rojas,ya había sido asignado a otra mujer, lo que provocó una pequeña discusión; ante esa situación, los declarantes acudieron de nueva cuenta a la paraestatal, quienes se comprometieron a checar la situación.