La NBA y la Asociación de Jugadores (NBPA) aseguraron este lunes que las pruebas de COVID-19 realizadas a 346 jugadores en el complejo de Disney World en Orlando desde el 13 de julio no han dado ningún resultado positivo.
El dato supone una extraordinaria noticia, pues la burbuja está cumpliendo su misión de aislar a los jugadores. Se trata de un gran paso adelante para la reanudación de la competición, que debería comenzar el próximo 30 de julio, aunque a partir de este miércoles ya habrá amistosos de preparación. Cada uno de los 22 equipos jugarán tres encuentros de pretemporada.
Durante la primera semana que los jugadores pasaron en Orlando, entre el 7 y el 13 de julio, dos jugadores habían dado positivo. Uno de ellos fue Russell Westbrook, base de los Rockets. Otros 19 casos se habían registrado antes de que los equipos viajaran a Florida para confinarse en la burbuja.