Lilia Arellano
*¿Y los Ingresos, señor Herrera?
*Vacuna para salvar elecciones, no vidas
*Quienes menos saben, más van a recibir
*Tren Maya, la piedra en el zapato de LO
Con un Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio del año próximo, es decir la presentación del reparto de un dinero del cual todavía se desconoce de donde va a salir hasta alcanzar la cifra de más de seis billones de pesos, la incertidumbre sobre el futuro próximo se acrecienta, más aún si, como está planteado, se dedican miles de millones de pesos dizque para programas sociales cuando son ocupados para la compra de votos, o se dedican a sembrar arbolitos cuando se tiene a niños no solamente con cáncer sino con otras enfermedades mortales sin los medicamentos suficientes y necesarios, cuando el desempleo sigue en aumento sin darse a conocer de una sola política pública para detenerlo.
Pero, como cuando se trata de repartir la jodidez no hay límites, a las entidades les van a recortar 108 mil millones de pesos y, como este reparto también se realiza con base a dos renglones: el primero de acuerdo a un número de habitantes registrado hace años y segundo de conformidad con la obediencia, paciencia, entrega y aprobación de todo lo demandado por la federación, particularmente por el tabasqueño, ya se verá de la existencia de diez entidades para quienes la entrega de recursos sí se verá recortada, o mejor dicho, recortadísima. El panorama es tan vergonzoso e indignante que no se trata de recortarles fondos a los partidos políticos ante el mínimo número de militantes registrados ante el IFE, sino para que le entren con su cuerno para las vacunas, lo cual contradice la afirmación de tener ya listo, destinado, guardadito, un fondo de miles de millones de pesos para su adquisición. Y, no olvidemos: también se venden “cachitos” de Lotería y para ello ya pusieron 500 millones de pesos sustraídos de esas inacabables arcas públicas abiertas para cumplir los caprichos presidenciales.
Eso sí, ningún freno para quienes tienen que dar las aprobaciones correspondientes, es decir los tres veces “H” diputados. A sus gastos les aumentaron el 14 por ciento y, obviamente ahí no habrá sacrificios ni austeridad, aunque tal vez, y solo tal vez, existe una oportunidad de que se queden con lo autorizado para ejercer este año ante la posibilidad de ser Mario Delgado el elegido para presidir Morena. Su última actuación, porque también ya es un actor y está dispuesto a leer cualquier guion o gesticular lo necesario, podría ser poniéndole freno al aumento o por lo menos llevarlo al terreno de la farsa de cancelación, para salir con la tarjeta de presentación de ser un político responsable frente a la crisis económica actual. O sea, todo para los reflectores, nada para abonar a la verdad y a la realidad.
En el 2019, y sin pandemia, se llegó a una paralización económica, vinieron las cifras de franco retroceso y resulta que, mágicamente, llegaremos en el próximo año a tener un crecimiento económico del 4.6 por ciento. ¿De dónde les salen esos números a los morenos y al hombre al frente de Hacienda? Porque el IMSS tiene otros datos y en ellos hay 10 mil empresas cerradas. El INEGI tiene unos más señalando la perdida millonaria de empleos formales. El Infonavit está en quiebra ante, por un lado, la reducción de cuotas producto de las actividades todavía no frenadas ni supervisadas del todo de las pagadoras y por el otro ante el desempleo. En lo referente al ISSSTE, también la corredera de burócratas los ha dejado sin los ingresos anteriores. Ha disminuido ostensiblemente la captación tributaria y, por si fuera poco, los sueños guajiros en torno a los ingresos petroleros se están esfumando.
Algarabía y positivismo en la persona del hidalguense Arturo Herrera tiene como base, columna, sostén, la vacuna contra el coronavirus, pero seguramente ya incluyó la aplicación de la de influenza. Solamente controlando estos males se podría regresar a las actividades económicas y sería sin la necesidad de contar con un negado una y otra vez, respaldo gubernamental. Como en el … rebaño, así actúan en el terreno de apoyos a empresarios: que cierre el que tenga que cerrar y que sobrevivan aquellos no solamente con capitales fuertes, sino a quienes se obligará a pagar hasta el último centavo en impuestos, sin canonjías, sin consideraciones porque, aunque generen empleos son enemigos de la cuarta, corruptos, neoliberales, saqueadores y todo tipo de calificativos sin encontrar ni excepciones ni satisfacciones. Y vaya que lo anterior va en contra de quienes están empeñados en una transformación, porque se ha visto solamente la multiplicación de negocios y empresas ligadas al gobierno federal e inventadas o creadas, si lo prefiere definir así, recientemente.
Los contrasentidos son muchos en este documento. Educación Pública recibirá un ligero incremento, el del 0.2 por ciento y se pretende otorgar cuando las escuelas están cerradas, cuando los gastos se dieron en 450 millones de pesos para, solamente para la difusión a la que bien podrían obligar fuese gratuita por parte de las concesionarias de televisión; se pagan gastos de producción porque el material presentado corre por cuenta de presentadores, de locutores, hasta de actores extranjeros, no por maestros. A Salud le dedican poco más de un 9 por ciento que no alcanza la cifra de más del 25 por ciento recortado este año, es decir, de lo entregado, de los renglones no satisfechos con los cuales se llegó a una crisis en este sector sin precedente alguno. Está otro 15 por ciento de aumento para la Secretaría del Bienestar, la dependencia controlada por un paisano del tabasqueño cuya preparación académica alcanza la excelencia en preparatoria o bachillerato, ninguna de las dos ha logrado comprobar, y quien fue corrido por su ex jefa y hoy titular de la Semarnat, por incumplimiento en el programa Sembrando Vida y otros temas relacionados, obviamente, con el manejo de recursos. Casi 190 mil millones tendrá este ejemplar ¿le durarán?
Seguramente a Miguel Torruco le dio un pre-infarto al conocer le aumentarían el 641.5 por ciento el presupuesto, si éste se relaciona con el ejercido y recortado del 2020.
Pero pudo sobreponerse cuando se enteró que no será aplicada la cifra de 38 mil 613.4 millones de pesos al sector turístico, sino serían más de 36 mil de ellos para ser aplicados a una de las tres obras insignes: el Tren Maya.
A la Sedena también se le otorga un incremento pero no precisamente para, como antaño, disque afianzar las labores de seguridad, ni para vigilar el combata el huachicoleo en serio y no se abran más tomas, o para sus acciones de defensa nacional, sino para seguir haciéndole frente a la instalación de hospitales móviles o financiar las compras de medicamentos o fondear los gastos de la construcción del aeropuerto Felipe Ángeles, aunque algunos mal pensados consideran es la forma de retribuir a toda la clase de servicios para los cuales han sido utilizados. Es un Ejército mil usos.
En un área actualmente dedicada disque al Trabajo y sensible en muchos renglones acordados en el T-MEC, le recortan, o sea ya pueden darse muchos de esos integrantes del programa dedicado a los jóvenes, por despedidos o ¿será este el renglón a salvar con cargo la eliminación de otros de cientos de burócratas? Hacienda se dio un balazo en el pie y se redujo 17.3 por ciento. Otros afectados son las Comisiones: Nacional de Hidrocarburos y la Reguladora de Energía y ambas sufrieron en esta etapa de venganza cruel lo inesperado, porque ya esperaban su eliminación sin provocarle al gobierno sonrojo alguno, pero todavía pesan renglones internacionales y contratos firmados. Julio Sherer tendrá que recurrir a su tocayo si quiere estabilizar las finanzas de la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal porque también le mocharon pesos.
Como puede apreciarse de inversiones estatales o de obras públicas hablaremos para el Presupuesto del 2022, el cual no es electoral y seguramente habrán de aplicarse otros criterios, aunque el derrumbe económico nacional siga produciéndose.
De los pasillos
Con todo ese capital dedicado a la construcción del Tren Maya hay mucho no dicho, oculto y otro tanto rechazado inexplicablemente, incluyendo en ambos el estira y afloja en el costo y mucho en lo referente a la viabilidad económica, al trazo serio de la ruta, de las estaciones tanto de recorrido como de servicio y carga, a los permisos de impacto ambiental y a la disposición de terrenos.
El titular de Fonatur, Rogelio Jiménez Pons, responsable de la obra, hizo anuncios con bombo y platillo; es más garantizó participaciones y resulta que una a una, van cayendo, por desgracia, sus aseveraciones. Ni que decir de la posibilidad de hacer presente esa fórmula de participaciones privadas y la pública, pues ahora se sabe que, ni una ni otra, se rechazaron. Si bien primero se aseguró estaría a cargo del Ejercito la obra, fueron asignándose a supuestos ganadores de licitaciones algunos tramos, excluyendo a los uniformados. Ahora resulta que el tramo nunca publicitado de Tulum a Chetumal va a realizarlo también el Ejército. Y, algo más: ¿cuándo contemplaron una estación de este célebre Tren en la capital quintanarroense? Esto aún no termina porque sin llevar a cabo sino unos cuantos levantamientos de vía ya la obra se cotiza un 20 por ciento más cara y no se sabe si porque van a subir los materiales, si es porque aumentaron la construcción de estaciones, si cambiaron los trazos o porque van a realizar derrumbes de puentes de primera necesidad para la movilidad, principalmente el situado en Solidaridad.
Habrá de confirmarse si es verdad el rechazo de la concesionaria del Aeropuerto cancunense, ASUR, a construir la terminal que surtiría de pasajeros al Tren al deslizarse de la terminal aérea a la terminal ferroviaria y si el nombrado supervisor de la obra y dueño del Grupo Vidanta, adquiriente de la franquicia del Cirque du Solei ya también se les rajó…