Isaac Castillo Pineda
*El crecimiento de la laguna y fuertes vientos provocaron las afectaciones
Más del 80 por ciento de las enramadas ubicadas en la comunidad turística Barra de Potosí en el municipio de Petatlán, están inundadas y destruidas por el crecimiento del cuerpo lagunar y las fuertes rachas de viento que ocasionó “Hilary”.
Enramaderos informaron que la madrugada de este jueves el agua terminó por alcanzar buena parte de sus negocios, incluso se destruyeron completamente palapas.
Las barricadas con costales de arena que cada año colocan fueron insuficientes para evitar el ingreso del agua que superó los dos metros de altura, más de lo habitual.
Los prestadores de servicios turísticos turísticos afectados calculan que los gastos de reparación rondan de los 6 a 10 mil pesos, dependiendo el grado de afectación en cada una.
Al tratarse de un fenómeno que ocurre año con año, en cada una de las enramadas alcanzaron a poner a salvo el mobiliario y algunos electrodomésticos, lo que evitó que las pérdidas fueran mayores.
Inundados es más difícil que los turistas se queden y generen una derrama económica, por lo que el proceso para recuperarse será más lento, es por eso que piden la ayuda del gobierno federal o estatal.