IRZA
Chilpancingo, Gro. (IRZA).- Este fin de semana, en un clima de creciente tensión, en esta ciudad capital fueron blindados inmuebles del gobierno porque se esperaban protestas violentas de normalistas de Ayotzinapa, quienes el sábado retuvieron a una docena de efectivos de la Guardia Nacional y quemaron dos patrullas en la ciudad de Tixtla.
Esto se deriva de la muerte por disparo de arma de fuego en la cabeza del normalista Yanqui Kothan Gómez Peralta, la noche del jueves en el viejo Libramiento a Tixtla, cerca de un retén de la policía del estado.
El viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador llamó a los normalistas a no realizar acciones de protestas violentas y anunció que pediría a la Fiscalía General de la República (FGR) que atrajera las investigaciones y se aclare plenamente cómo fue asesinado el normalista.
El sábado fue el sepelio del joven Yanqui Kothan, en Tixtla, y después de las 6 de la tarde los normalistas sorprendieron a elementos de la GN que iban en dos patrullas a la altura del entronque de El Caballito, frente al internado “Adolfo Cienfuegos”, donde se divide la carretera federal de Tixtla a Chilpancingo, y el libramiento de cuota para llegar a esta capital.
Los normalistas retuvieron a más de una docena de uniformados y los llevaron a las instalaciones de la normal rural de Ayotzinapa y, de acuerdo a información extraoficial, fueron liberados posteriormente, dos de ellos graves que fueron ingresados al hospital militar de la 35 Zona, localizado en esta capital, aunque no se ha aclarado plenamente qué sucedió con las armas de cargo que portaban y solo se han mostrado fotografías de dos rifles de asalto de los uniformados.
Las dos patrullas que les quitaron a los agentes de la GN fueron incendiadas y desde la noche empezaron a circular mensajes en redes sociales donde advertían que los normalistas vendrían a esta capital a realizar protestas violentas y destrozos en edificios públicos.
Fue así que se desplegaron operativos de salvaguarda de edificios públicos con agentes de la GN, por ejemplo, en las oficinas de Finanzas en el edificio Álvarez, en el centro de la ciudad, y en las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE).
El edificio de Palacio de Gobierno es el que más se blindó. Se cerró la circulación en sus rutas de acceso, donde colocaron camiones pesados y camionetas como barricadas. El sábado se reforzaron las vallas metálicas que rodean el inmueble y este domingo por la mañana llegaron desde la Ciudad de México más vallas con las que resguardaron Palacio Nacional en la marcha del pasado 8 de marzo, en el Día Internacional de la Mujer.
En las inmediaciones del ex Palacio de Gobierno, en esta ciudad, también se colocaron como barricadas pesadas losas de contención hechas de concreto y que se utilizaron para dividir los carriles de la Autopista del Sol, y se mencionó que el sábado llegaron al menos 600 efectivos de la GN para reforzar la fuerza desplegada ante probables protestas violentas.
Inclusive varias tiendas comerciales de esta capital aledañas a Palacio de Gobierno cerraron sus puertas, ante la psicosis que se generó en redes sociales, pero horas más tarde reabrieron.
Este domingo antes del mediodía salieron de la normal de Ayotzinapa dos autobuses y una Urvan con normalistas hacia esta capital y se encendieron las alarmas en las autoridades, quienes de inmediato prepararon los dispositivos de seguridad.
Los normalistas llegaron hasta la lateral del bulevar, a un costado de la tienda Mega Soriana, cerca de las instalaciones de la 35 Zona Militar, y se estacionaron ahí.
Hasta ese sitio llegó el secretario general de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez, y el director de Gobernación estatal, Francisco Rodríguez Cisneros, quienes dialogaron con tres jóvenes que portaban el uniforme de deportes de la normal rural de Ayotzinapa.
Fue un diálogo de unos 20 minutos. Luego, los normalistas subieron a los vehículos en los que llegaron y se dirigieron hacia el norte, por el bulevar, para irse por el libramiento de cuota a sus instalaciones, en Tixtla.
Reynoso Núñez no quiso dar ninguna declaración y solo dijo que se trataba de un primer encuentro, pero no abundó si acordaron un nuevo diálogo. La misma postura asumieron los normalistas.