fbpx

Editorial

¿Y dónde está Marcelo?

En la diplomacia mexicana causó un gran recibimiento la selección de Marcelo Ebrard para ser el responsable de la política exterior de López Obrador. Después de todo, Ebrard no llegaba a aprender, como su predecesor, sino que el canciller llegaba a reencontrarse con sus compañeros de la licenciatura en Relaciones Internacionales, hoy embajadoras o ministros del Servicio Exterior. Después de todo, como jefe de Gobierno, Ebrard impulsó una vigorosa proyección internacional del entonces DF. Y sin embargo, hoy muchos nos preguntamos ¿y dónde está el canciller?

La pregunta es válida, pero tiene un matiz. Es válida porque la relación bilateral con Estados Unidos está en piloto automático y con turbulencia desde la llegada de Trump al poder. Asuntos fundamentales de la relación como el comercio fueron renegociados por funcionarios de ambos países y se consiguió un rediseño del tratado comercial más importante para México, EU y Canadá, pero ahora en el camino hacia la ratificación solo la embajadora Bárcena está mandando los mensajes optimistas o la certidumbre que el canciller debería estar dando. Nadie sabe cuál es la ruta de la ratificación, si México ya emprendió o no un cabildeo vigoroso en EU y nadie tampoco está diciéndonos cómo enfrentar la turbulencia electoral del 2020 en este tema.

El tráfico de armas de EU a México sigue sin control, en parte debido a la corrupción de nuestras aduanas, pero también por la facilidad en la compraventa de armas en EU. El combate al narco, la absurda guerra contra las drogas, sigue siendo una imposición de un sector militarista y conservador que pesa demasiado en EU y de los sectores que en México se benefician de que sigamos con esta estrategia, en lugar de emprender la misma ruta de casi 40 estados de nuestro vecino, donde ya han regulado el mercado de la mariguana. En México necesitamos romper el paradigma y regular todas las drogas y hasta ahora Ebrard no ha dicho ni pío al respecto.

El otro tema donde no se ve al canciller es el migratorio. Al arranque del sexenio, desde la Secretaría de Gobernación parecía asumirse la rectoría en la materia. Pronto, Sánchez Cordero, Encinas y desde el Instituto Nacional de Migración se mandaba el mensaje de que México no trataría a los inmigrantes que cruzan por nuestro territorio o que desean quedarse en él de la misma manera en la que EU trata a los inmigrantes mexicanos. México dio brazaletes oficiales que permitían a los inmigrantes centroamericanos el libre tránsito por el territorio nacional sin ser detenidos por las autoridades migratorias. Incluso corren rumores de que varios gobernadores pusieron autobuses para transportar a los inmigrantes a Tijuana.

México puso el ejemplo de cómo tratar dignamente a los inmigrantes, pero esto le valió abrir la desconfianza y el enojo del gobierno de Trump. Sin embargo, en estos poco más de tres meses parece que cambiamos la postura y que ahora ya somos un Tercer País Seguro, tal y como quiere Trump, sin haber firmado ningún convenio.

Hasta el momento, lo que parece ser la prioridad de Ebrard es un acuerdo de cooperación para el desarrollo de Centroamérica y esto es loable y necesario. Sin embargo, cuando la relación bilateral con EU pasa por uno de sus peores momentos, cuando el yerno de Trump viene a México, cuando se conoce el contenido de una carta en la que se tensa la relación bilateral con España y cuando en nada de esto el canciller parece protagonista, entonces la pregunta de ¿y dónde está Marcelo? adquiere mayor relevancia.

El matiz está en la comunicación. El monopolio de la comunicación por parte de la Presidencia causa estos vacíos en la información y no deja que quienes dirigen las oficinas de comunicación social y conocen bien los temas hagan su trabajo. Ebrard necesita estar más presente. Hay demasiados temas del devenir internacional donde la 4T debe estar y en donde hoy no se nota quién dirige la política exterior.

About Author

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *