Por la sana distancia, más ciclovías
Como era inevitable, llegamos. Esta semana entramos en la fase tres de la pandemia, un periodo en donde aumenta el riesgo de contagio y durante el cual necesitamos redoblar esfuerzos: quedarse en casa y mantener la sana distancia resulta fundamental y la ciudadanía está poniendo todo de su parte.
Sí, los ciudadanos de a pie hemos reducido nuestra movilidad en las ciudades por encima del 60%, y hasta en un 80% en el caso de la Ciudad de México en algunos momentos.
Pero cuando quedarse en casa no es opción porque hay que salir a trabajar, a ganarse la vida ¿qué están haciendo los gobiernos para ayudar a quienes si o si deben salir día tras día?
En esta fase, es necesario y hasta un acto de justicia, facilitarles los traslados con seguridad. Necesitamos aumentar el cuidado colectivo e individual en el espacio público y desplazarse en bicicleta, con seguridad, es una alternativa.
Ya son muchos países los que han impulsado a la bicicleta o ir a pie como medios seguros de moverse por la ciudad mientras dure la pandemia.
Alemania, Francia, España y Colombia ya están instalando ciclovías temporales y Nueva York podría ser la primera ciudad en llevar a cabo una enorme reordenación urbanística con hasta 120 km de calles destinadas a ciclistas y peatones, buscando convertir a sus ciudades en lugares mucho más amigables con la bicicleta como una forma de transporte individual más higiénica e idónea para evitar contagios.
México no debería quedarse atrás, por eso debemos pedirle a los gobiernos locales y al federal implementar este tipo de acciones que otorguen el espacio en la calle que necesitamos para mantener un distanciamiento social adecuado cuando, también por supervivencia, tengamos que salir.
Adicionales a las medidas nacionales, la CDMX ha anunciado acciones para reducir el contagio: Cerrar el 20 por ciento de las estaciones del metro, mb y tren ligero. Aumentar la frecuencia de RTP y transporte concesionado. Aplicar desde el día 23 de abril el programa Hoy no circula para vehículos que no sean taxis, transporte de carga o automóviles para personas con diversidad funcional. Mayor sanitización del espacio público y transporte público. Acciones restrictivas ante la actividad empresarial no esencial que siga operando.
Si bien dichas medidas han sido un buen ejemplo para la prevención inmediata y la protección de los derechos humanos de acuerdo con los retos sociales y económicos que enfrenta la mayoría de la población, es necesario que la prevención sea atendida con una visión a futuro para prepararnos ante posibles eventos venideros, y que además sirvan para repensar el orden urbano en favor de la mayoría de las personas.
Medidas como aumentar la red de ciclovías temporal y luego definitivamente ayudaría a atender otras crisis como los niveles de contaminación en las grandes urbes del país y a reducir la emisión de gases de efecto invernadero en un contexto de emergencia climática.