Ruth Tamayo Hernández
Para amortiguar la crisis, consume al comercio local
“Desechad
tristezas y melancolías. La vida es amable, tenemos pocos días y tan sólo ahora
la hemos de gozar”: Federico García Lorca.
Mis
estimados, por las situaciones críticas que vivimos ante el azote del
coronavirus, por el que cada día aumentan en el país las cifras, tanto de
muertos como de contagiados; y también hay que decirlo, algunos recuperados, el
gobernador Héctor Astudillo Flores, durante la sesión de la Mesa de
Coordinación para la Construcción de la Paz, reconoció a los titulares y
elementos de la Policía Estatal, del Ejército Mexicano, la Armada de México, de
la Guardia Nacional, la Fiscalía General del Estado, y de los ayuntamientos de
zonas con vocación turística de Guerrero por su participación en las acciones
preventivas para evitar los contagios del coronavirus.
El
mandatario agradeció a los agentes estatales y federales el respaldo para
inhibir actos de rapiña en centros comerciales.
Durante
su participación en esa Mesa de Coordinación, el secretario de Salud, Carlos de
la Piña Pintos, expuso que al corte del sábado se han registrado 25 casos
positivos por Covid-19 y un total de tres defunciones por este padecimiento. Sin
embargo, debido al Covid-19 la crisis se agudizó en el comercio local; por eso
la entrega es referente a ese sector en la Costa Grande de Guerrero, aunque los
datos no varían mucho en lo general, pues la crisis que enfrenta el comercio
local en el país es enorme, y los expertos en esa materia explican que por la
pandemia del Covid-19 la economía se verá duramente afectada. Por eso, ellos
recomiendan que, para mitigar ese golpe económico, la población consuma en
negocios locales.
Es
decir, debemos comprar a los pequeños negocios, al de la esquina, al negocio
del amigo o compadre, para apoyar a la economía local, pues el coronavirus no
es sólo un problema de salud, sino también un problema humanitario y económico.
Por
eso les comento lo que los expertos sugieren, que los ciudadanos nos apoyemos
entre nosotros mismos, para que de esa manera se pueda mitigar un poco el golpe
económico, porque las crisis no tienen una fecha de expiración. Aun con la
buena actitud del mandatario federal, que dice que los mexicanos son gente
buena y que vamos a salir pronto de este problema, sin duda tiene razón el
mandatario, pero con buena actitud no se sale de la crisis económica, es
importante destinar recursos para incentivar a la pequeña y mediana empresa, las
llamadas Pymes. Necesitamos comprar al comercio local, para que se mantenga la
economía local.
En
la Costa Grande, de Guerrero, el panorama pinta desgarrador, pues en su mayoría
la gente se quedó sin nada; no puede vender sus productos, porque no hay gente,
pues todo el corredor vive del turismo y la situación en la zona se divisa
devastadora, ya que ni al pescador le permiten sacar pescado para llevar
acomida a su casa.
Ayer,
en el municipio de Petatlán la gente comenzó a bajar cortinas de sus negocios,
pues también les dijeron del Grupo Modelo que hoy domingo era el último día que
le surtían producto, ya también esta empresa cerrara este mes por la
contingencia del coronavirus.
Algunos
pobladores comentaron que ni pescar los dejan, pero que tienen que sacar
pescado para comer ellos y su familia; sin embargo, cada día se agudiza la
vigilancia policial en las playas, para evitar que la gente llegue.
En
el municipio de Zihuatanejo, algunas familias de pescadores piden al gobierno
que los dejen pescar para comer ellos, no para vender; o que de lo contrario
les ayuden para sobrevivir estos días.
Muy
crítica viene la situación en la región y el estado de Guerrero. Aunque algunos
municipios ya prepararan paquetes alimentarios para las personas más
necesitadas, eso no será suficiente. Urge una reactivación económica, para
cuando la emergencia de salud pase, la vida de la gente siga.
Cuando
los expertos dicen que la crisis no tiene fecha de expiración es porque es
verdad, esto va para largo, pues, aunque el 30 de abril digan que regresamos a
las actividades cotidianas, para que se recupere la economía en México y
Guerrero va a ser tarde. Por eso administre el poco dinero que recibe, pues en
México el coronavirus agrandó el número de desempleados y este tema es el que
más preocupa a las autoridades de los tres órdenes de gobierno.
Aunque
al presidente Andrés Manuel López Obrador, no le inquita tanto el sueño el tema
del desempleo, pero adelantó que crearán 2 millones de nuevos empleos, esto
durante el informe trimestral que dio este domingo por la tarde, cuando anunció
un plan de reactivación económica. AMLO aseguró que dará prioridad a la salud,
bienestar y empleo.
Sin
embargo, sin el afán de alarmarlos, les cuento que la Organización
Internacional del Trabajo (OIT), expuso que por la emergencia sanitaria del
Covid-19 el número de empleos que se perderán en todo el mundo, será de 25
millones. De esa magnitud será la crisis económica que desató el covid-19.
Por
otra parte, la Agencia de Naciones Unidas, expresó que con base en diferentes
escenarios que tendría la emergencia sanitaria en el crecimiento económico del
mundo, dejaría 5.3 millones y 24.7 millones de desempleados. Aunque todo indica
que el número de desempleados será mucho mayor al que pronostica el organismo.
En
México, el panorama en el sector turístico es triste, pues el hotelería en el
Sureste se rendió ante la pandemia y comenzó a despedir a los trabajadores. Se
habla de más de 259 mil trabajadores los que fueron despedidos en los últimos
días en esta franja.
Con
la misma suerte corre Ixtapa-Zihuatanejo, donde se suman 10 hoteles más al
cierre temporal del 1 de marzo al 30 de abril. Hotel Azul Ixtapa y Azul Ixtapa
Grand, Barceló, Sunscape (antes Dorado Pacífico), Tesoro, entre otros. Según
algunos trabajadores hoteleros de base, en su mayoría llegaron a acuerdos con
los gerentes, para que les den la mitad del salario. A otros le redujeron el 50
por ciento y el trato fue con su líder sindical y directivos del hotel. El
trabajador desconoce los acuerdos y otros de plano se fueron sin salario.
Los
más amolados fueron los empleados sin base, pues no reciben salario ni les
dieron esperanza de regresar algún día a trabajar al hotel. Algunos
administrativos que también despidieron, se fueron sin goce de sueldo, pero al
menos les conservaran el lugar para cuando reactiven el hotel.
Y
no se ha hecho un balance de las tiendas que cerraron sus puertas y que tenían
entre cinco y seis empleados. Esas personas se fueron sin salario, otros
llegaron a acuerdos con el patrón para percibir un salario mínimo diario, tal
como les obliga la ley; sin embargo, hay muchos micronegocios a los que no les
alcanza para cubrir esos salarios, pues también pagan renta y son altísimas. Varios
microempresarios cerrar sus cortinas para no volver más. Ése es, pues, un
escenario de película de terror del que aún se desconoce el final. Pero es el
momento donde debemos apoyar al comercio local, a la microempresa, para evitar
un desplome generalizado.
Vaya
al mercado, compre los productos que la gente trae del campo, y ese dinero se
quedará aquí y volverá a circular, pues el que vende alimento abarrotes y
alimentos en general aquí vive y aquí gasta sus ingresos.
¡Feliz
lunes, mis estimados!