Ruth Tamayo Hernández
Empresa SIMSA y
Aseguradora Quálitas, no responden por daños en La Unión e Infiernillo
“La
irresponsabilidad es parte del placer del arte. Es la parte que las escuelas no
saben reconocer”: James Joyce.
Mis
estimados, el accidente de la pipa de doble remolque que trasladaba 80 mil
litros de amoniaco, propiedad de la empresa SIMSA, de la que se desprendió un
contendor en territorio guerrerense y ocasionó terribles desgracias, aún sigue
dando de qué hablar, porque además de la gente que murió en el lugar de los
hechos, al inhalar ese gas, otros que fueron hospitalizados también han muerto.
Sin
embargo, lo que intento destacar con esta entrega, es cuán abandonado está el
municipio de La Unión y sus comunidades, por los tres órdenes de gobierno. Es
vergonzoso que las autoridades abandonen a la población ante semejante tragedia.
En serio, esas pobres comunidades están cerca de la opulencia y lejos del
gobierno. Con este triste suceso, confirmo lo que dicen en la capital del país,
donde nos llaman “los provincianos de la Costa Grande”. En serio, son
comunidades atrasadas y abandonadas.
Aunque
ustedes no lo crean, el accidente ocurrió el pasado viernes por la noche; y
hasta el sábado por la mañana dieron aviso de lo ocurrido. Del gobierno estatal
y municipal de Lázaro Cárdenas, ni sus luces; quienes se compadecieron y
evitaron una desgracia peor en la zona, fueron empleados de la empresa del
complejo Siderúrgico, antes Sicartsa, hoy ArcelorMittal. Fueron ellos quienes
enviaron bomberos equipados, porque esa empresa maneja químicos altamente
contaminantes y tiene sus propios bomberos y equipo especial para el manejo de
ese químico entonces, ellos fueron en apoyo de la gente, para evitar más
tragedias, y ellos levantaron a los heridos y muertos, porque de la empresa
SIMSA ni sus luces.
Tampoco
la aseguradora de la empresa se presentó, ni mucho menos se ha hecho cargo del
problema. La información que se tiene, es que la aseguradora es la empresa Quálitas,
que se sigue haciendo pato ante la indolencia del gobierno michoacano, que no
le exige cubrir los daños.
Ayer,
pobladores de los municipios de La Unión de Isidoro Montes de Oca, en Guerrero,
y también de Infiernillo, Michoacán (y vaya que la localidad hasta el nombre
tiene de infierno, porque es una de las comunidades del vecino estado que en
verdad está en completo abandono; miseria y pobreza se divisa en esa zona); les
comentaba que al menos 50 personas tomaron la caseta de Feliciano y ellos
cobraron 50 pesos para poder cubrir gastos de sus familiares, que resultaron
afectados por el amoniaco.
Don
Delfino Solano Bustos informó que hasta este miércoles la cifra de fallecidos
es de 12 personas, pero hay al menos otras 40 personas graves, entre niños y
adultos.
También
el pasado martes dijo don Delfino que al menos 35 personas de la comunidad Las
Compuertas se habían ido a Lázaro Cárdenas, a atenderse de dolor de cabeza,
dolor de garganta, de vómito, irritación en nariz y ojos, y que el mal olor del
gas persiste en la comunidad.
Además,
comentó que aún están hospitalizados en la clínica Estar Médica, de Morelia,
Michoacán, varios heridos, y que ellos están pidiendo dinero en la caseta de Feliciano
para cubrir los gastos de su familiares, porque son de bajos recursos y de esa
manara buscan recabar fondos para pagar los gastos médicos, ya que la empresa
SIMSA y la aseguradora Quálitas se han negado a cubrir los gastos funerarios de
las personas fallecidas.
El
hombre contó que él perdió a su hermano, un checador de autobuses, quien iba en
el autobús que quedo atrapado en la nube tóxica de amoniaco la noche del
viernes.
El
afligido hombre pide al gobierno de Guerrero y Michoacán ayuda para los gastos
médicos de las familias que están internadas.
Incluso,
exhiben los pobladores que hasta hoy ninguna autoridad ha ido en su apoyo para
enterrar a sus animales muertos. “Toda la zona es una pestilencia”, dijo.
Agregó:
“El gobierno debe tomar este asunto con seriedad, pues ya vieron cuánto daño
provocó ese accidente a las personas; entonces, que vengan y chequen los
manantiales de agua, por si se contaminaron, antes que se convierta en una
tragedia mayor este asunto”.
Al
mismo tiempo, afectados de Infiernillo señalaron que el gobernador Silvano Aureoles
Conejo, ni siquiera ha enviados funcionarios de su gobierno a ver cómo se
encuentran ellos, y a conocer los daños, pues el químico no sólo los afectó a
ellos, sino que también mató muchos animales; los huertos de árboles frutales
quedaron negros, el pasto se ve oscuro. “Quién sabe qué tanto dañó la tierra o
el campo ese químico, quedamos afectados todos y el gobierno no ha venido a
vernos, menos a ayudarnos”, dijeron.
En
entrevista con un doctor acerca de este problema, comentó que el asunto es
delicado por las secuelas que pueden quedarles a las personas, y que el
gobierno debe enviar brigadas médicas de inmediato para hacer estudios a la
gente, o de plano enviarlas a Lázaro Cárdenas, a recibir atención médica todos.
“Veo
que el gobierno estatal de Guerrero y de Michoacán minimizaron el caso, pero es
grave; este tipo de químicos es mortal y creo que las autoridades deben tomar
cartas en ese asunto de inmediato, antes que crezca la tragedia, en efecto que
se haya contaminado los pozos de agua”, dijo. ¡Charros, pero no panzones!
Les
digo, mis estimados, siempre al perro más flaco se le cargan las pulgas. Los
funcionarios no van a ver a la gente a las comunidades; hasta que necesitan de
ellos, van en las elecciones, porque quieren votos. De ahí, nunca más regresan
hasta que los vuelven a necesitar.
El
gobernador de Michoacán ya debió exigir a la empresa SIMSA y a la aseguradora que
se hagan responsables del caso y cubran los daños de todas las personas en las
comunidades. Aunque desde un principio debió clausurar dicha empresa, porque
aparte no cuenta con las herramientas para el traslado de ese químico.
Por
algo suceden las cosas, deben actuar antes de que ocurra una tragedia mayor. Deben
cerrar esas empresas que incumplen con los requisitos para el traslado de
químicos peligrosos.
En
otro tema, mis estimados, les comento que el gobernador del estado, Héctor
Astudillo Flores, estuvo en Zihuatanejo coordinando la Mesa para la
Construcción de la Paz en Zihuatanejo, en donde por cierto el mandatario
estatal pidió a la empresa SIMSA hacerse responsable de la indemnización a afectados
por la intoxicación con amoniaco en La Unión, y que también la aseguradora se
apure a resarcir los daños.
El
mandatario dijo que implementarán en el estado de Guerrero, el operativo para
las fiestas decembrinas, en una acción coordinada y rediseñada con nuevas
estrategias, que incluye colocar nuevos puntos de revisión con la presencia de
la Guardia Nacional, Ejército Mexicano, Marina, Policía del Estado, Fiscalía
General del Estado y Policía Municipal, que juntos deben contener el fenómeno
delictivo.
Sin
embargo, la incidencia delictiva continúa. Y en el puerto, aunque no quisiéramos
que pasen esas cosas para no dar malas noticias, suceden. Ayer, por ejemplo, asesinaron
de un balazo en la cabeza a una joven madre embarazada de ocho meses. Ya estaba
bien grandecita su bebita, bien formada, a la cual metieron en otra cajita porque
no podía ir junto a la mamá.
Éstas
son de las cosas que te hace sentir impotencia. ¿Por qué tanta maldad de esos
homicidas? ¿Qué tanto daño pudo hacer esa madre para que la mataran de esa
manera junto con su cría? No puede ser. ¿En qué nos hemos convertido, mis
estimados? Somos peores que los animales, porque los animalitos no se atacan
cuando ven otro animal indefenso, pero nosotros los humanos somos inhumanos.
Horroroso suceso, son bien malvados los feminicidas.
No
obstante, el gobierno plantea mesas de seguridad para todo el estado, intentando
disminuir la incidencia delictiva.
El
mandatario estatal también asegura que al menos 1 millón 100 mil turistas
nacionales arribarán a los puertos turísticos de Guerrero, Acapulco,
Ixtapa-Zihuatanejo, al Pueblo mágico de Taxco, y demás municipios guerrerenses
con vocación turística, que también están preparados para recibir al visitante
nacional en esta temporada de invierno. ¡Enhorabuena!