Ruth Tamayo Hernández
Titubea industria
turística en caso de incrementar el DNR
“Aferrarse
a la ira es como agarrar un carbón caliente con la intención de tirarlo a otra
persona; es uno mismo el que se quema.” Buda
Mis
estimados, hemos dicho que el turismo es uno de los principales motores de la
economía en México. Esta actividad ocupa el tercer lugar como generador de
ingresos, pues la industria turística sostiene económicamente a millones de
mexicanos.
Sin
embargo, el gobierno no lo ve de esa manera; siempre dejan al último al turismo,
aun cuando ellos conocen cabalmente de la derrama económica que genera en el
país, y no le dan el valor que tiene.
En
cada sexenio la industria turística sufre quiebras fuertes, y cada estado y municipio
con vocación turística sufre con las decisiones de los gobernantes. Para darles
una idea clara, puedo asegurar que los destinos turísticos se mantienen de pie
actualmente por la gracia de Dios, ya que han sido duramente atacados por el
crimen organizado y por la crisis económica.
Para
nadie es secreto el quiebre de la industria turística, un sector que aporta recursos a la Federación
por concepto de impuestos. Uno de ellos es el Derecho de No Residente. Dicho gravamen
es cubierto por visitantes que arriban a México vía área, al momento de
adquirir su boleto de avión. Por ese concepto, el año pasado cobraron alrededor
de 6 mil millones de pesos.
También
este impuesto es cubierto por los visitantes que arriban a México vía
terrestre, y cuya permanencia es menos de una semana; pero según la consultora
Gemes, el paquete económico 2020 plantea modificar la Ley Federal de Derechos
para derogar una de las exenciones de pago de derecho de visitantes sin permiso
para realizar actividades remuneradas (DNR).
La
nueva disposición del gobierno federal pretende que todo el turista que entre a
México por vía terrestre, pague el DNR, independientemente de la duración de
sus estancia.
La
consultora Gemes menciona que la Ley Federal de Derechos establece la exención de
ese derecho a quienes ingresan a territorio nacional por vía terrestre, siempre
que su estancia en el país no exceda de siete días. En caso de superar este
plazo, el visitante deberá pagar el DNR al momento de su salida.
Las
disposiciones propuestas por el gobierno federal crearon enojo en la iniciativa
privada; y según los empresarios, el gobierno pretende un incremento de 53 por
ciento en el DNR, para quedar en 865 pesos.
Se
incrementa también 388 por ciento el derecho por prestación de servicios migratorios.
Dicho
aumento, señalaron los empresarios, afectará directamente a la industria
turística; no obstante, el titular de la Secretaría de Turismo, Miguel Torruco
Márquez, mostró que con el incremento no se tendrá ninguna afectación al
turismo y que se continuará el crecimiento del mismo.
Expresó
que esos mayores recursos se utilizarán para mejorar los servicios migratorios
en los aeropuertos. “Ésta es una propuesta de la Secretaria de Hacienda y yo la
respeto. No considero que se afecte al turismo, por el patrimonio que tenemos y
hay otras prioridades, y para resolver problemas migratorios en aeropuertos,
necesitamos recursos”, refirió el secretario.
Sin
embargo, la iniciativa privada siguió diciendo que la distribución del recurso
del Derecho de No Residente (DNR), que el año pasado fue de 6 mil millones de
pesos, también cambia.
Anteriormente,
esa cantidad se distribuía entre el desaparecido CPTM, en una proporción de 70
por ciento; el Fondo Nacional de Fomento al Turismo, un 10 por ciento; y al
Instituto Nacional de Migración (INM), iba un 20 por ciento.
Sin
embargo, revelaron que con el desaparecido Consejo de Promoción Turística de
México (CPTM), a partir del próximo año, el pago por concepto de DNR está
dirigido a la construcción del Tren Maya, dejando prácticamente en ceros la
promoción de los destinos del país.
La
angustia de los miembros de la iniciativa privada sigue siendo la desviación
del recurso al Tren Maya, pues ellos dicen que ese dinero está destinado para
la promoción de los destinos en México y no para otros fines, y ahí está muy
peligroso desviar el recurso.
Por
otro lado, la consultora Gemes reveló que la disposición también podría acarrear
dificultades para la administración y cobro del DNR, afectando la agilidad de
los cruces fronterizos, lo cual podría desmotivar que los extranjeros visiten
las ciudades fronterizas del país.
Es
decir, que de confirmarse, la iniciativa podría implicar una complicación
operativa importante e impactar negativamente al turismo fronterizo.
La
consultora Gemes agregó que en 2018, 64.9 millones de personas arribaron a
México a través de las fronteras terrestres, de las cuales 46.9 millones
tuvieron una estancia inferior a 24 horas y 18 millones fueron considerados
turistas.
Y
revela la consultora que las modificaciones a la Ley Federal de Derechos
incluyen nueva distribución de los recursos captados por el DNR, ya que el
gobierno federal propuso que 20 por ciento de ese dinero se destine al
Instituto Nacional de Migración para mejorar los servicios en materia
migratoria, y 80 por ciento restante se destinen para estudios, proyectos e
inversión en infraestructura que determine el gobierno federal. Los empresarios
de la iniciativa privada indican que es para la construcción del Tren Maya.
Cabe
hacer mención, mis estimados que esta iniciativa ya fue aprobada por la Cámara
de Diputados y está a la espera de ser analizada en el Senado.
Sin
duda es un tema critico que apenas comenzará a dar tela para cortar y hasta
repartir, pues si el año pasado recabaron 6 mil millones de pesos por concepto
de pago de Derecho No Residente, imagínense con el incremento la millonada que
van a recabar; sin embargo, como estado de Guerrero en nada nos alegra, porque han
de saber que el impuesto al hospedaje varía de acuerdo a la entidad federativa,
y hay estados como Sinaloa que destina el 95 por ciento de estos recursos para promoción
e impulso de los productos turísticos, y 5 por ciento para la administración
del impuesto
En
cambio, el estado de Guerrero y Quintana Roo destinan dos tercios para fines
turísticos y un tercio de toda la recaudación para otros fines diferentes al
turismo.
Y
no coloco cantidades, mis estimados, porque se van a infartar al ver cuánto
dinero desvían los gobernantes a otros fines que no es la industria turística,
y Guerrero se queda chiquito en billetes al lado de Quintana Roo. Y como cuido
su salud, mejor les voy a ir revelando cantidades de poquito a poquito, ya que
veamos que aprobó el Senado la iniciativa.
Propone
también la iniciativa privada que en vez del incremento al DNR, cobren un
impuesto a los cruceristas, ya que ellos no pagan el Derecho de No Residente.
También
sugieren que paguen el hospedaje las casas que brindan ese servicio y no han
sido regulados.
Exponen
que debe cambiar los mecanismos y la normatividad para lograr una mayor
recaudación, además de buscar que todos los recursos recaudados por gravámenes
turísticos se destinen a la promoción y desarrollo de los productos turísticos;
es decir, agregaron, se necesita una trasparencia estricta en los recursos.
Se
tenía que decir y se dijo. Jojojo.
El
secretario de Turismo, al terminar el seminario en la Universidad Panamericana,
comentó que el aumento no afectará al turismo. “Contamos con muchos atractivos
para los visitantes; por ejemplo, esperamos 14 mil personas a la Fórmula 1. Tendremos
gran atractivo para los espectadores durante los tres días que durará la
competencia. Además de ello, el Pabellón tendrá una exposición de artesanías y
Querétaro exhibirá una réplica de Lele, la muñeca emblemática de las artesanas
de Amealco”, dijo Torruco Marqués.
Neta,
mis estimados, me encanta el entusiasmo del secretario de Turismo, por eso lo
sigo en las redes, tiene un positivismo del tamaño del mundo. Lástima que con
entusiasmo no se crece, ni se avanza.
¡Feliz
fin de semana!