El gobierno
municipal que encabeza el alcalde Jorge Sánchez, a través de los Servicios
Municipales de Salud, a cargo del médico Onasis Pinzón Oregón, continúa trabajando
para elevar los niveles de salud en la población, en especial la de los niños y
jóvenes. Por lo que llevan a cabo la certificación de “Escuelas Promotoras de
la Salud”, en un esfuerzo conjunto con el Gobierno del Estado. La
administración municipal busca a través
de diferentes instancias crear las
condiciones favorables para que desde edades tempranas los niños y jóvenes
adquieran los conocimiento que les permitan cuidar su salud, prevenir
enfermedades y aprender a cuidar su cuerpo a través de la aplicación de los
principios de la promoción de la salud en los espacios donde las personas pasan
gran parte de su tiempo, así mientras disfrutan, conviven y trabajan, aprenden las
destrezas para llevar una vida sana. Para lograr que cada vez sean más y más
las escuelas certificadas, los gobiernos estatal y municipal a través de los
distintos departamentos de la dirección de salud municipal trabajan en la
certificación de “Escuelas promotoras de la salud”. Dando cumplimiento a las indicaciones del
Gobernador del Estado, Héctor Astudillo Flores, de darle continuidad a este
ambicioso programa puesto que la salud y la educación son condiciones
necesarias para que los niños, niñas y jóvenes se desarrollen plenamente y
tengan una buena calidad de vida, la próxima semana se develarán las placas de
las escuelas secundarias Luis Guevara Ramírez y Caritino Maldonado (Técnica No.
52), que las certifica como “Escuelas Promotoras de la Salud”. Los estudiantes aprovechan
mejor si están sanos y está comprobado que, a mayor nivel educativo, las
posibilidades de que una persona cuide su salud y evite conductas de riesgo
incrementan. La salud y la educación van de la mano. Hoy en día, los niños y
jóvenes enfrentan desafíos en el contexto educativo como de salud cuyas
dimensiones e implicaciones exigen de mayor coordinación y mejores respuestas
por parte de las autoridades responsables. Tenemos el primer lugar en obesidad
y sobrepeso infantil. Esta situación aumenta la probabilidad de padecer graves
enfermedades. Los jóvenes también enfrentan riesgos como el embarazo
adolescente, enfermedades de transmisión sexual, adicciones y depresión, que
impactan en su capacidad de aprendizaje, ocasionando bajo rendimiento escolar y
obstaculizan su pleno desarrollo, lo que les impide llegar sanos a la edad
adulta. El sector salud no puede hacer frente a estas problemáticas, complejas
y multifactoriales, de manera aislada. Es importante destacar que la atención a
niños, niñas y adolescentes es prioritaria y estratégica por distintas razones.
En primer lugar, porque la incidencia de estos padecimientos entre esta
población representa un problema de salud pública que hay que atender
urgentemente y de manera prioritaria. En la actualidad, uno de cada tres niños
y uno de cada cuatro adolescentes, padecen sobrepeso u obesidad; anualmente se
registran casi medio millón de nacimientos de madres adolescentes y el consumo
de drogas en escolares ha aumentado alarmantemente en los últimos años y en
edades cada vez más tempranas. En segundo, porque la infancia y la adolescencia
son las etapas formativas más importantes para una persona. El trabajo más
importante de prevención debería empezar en casa, dentro del núcleo familiar y
deberían ser los padres los principales promotores de valores, salud, educación
y cuidados para los niños y jóvenes. Por
desgracia no es así y es por ello que el gobierno se ve en la necesidad urgente
de implementar políticas de promoción de la salud, prevención de enfermedades y
conductas de riesgo y de atención médica desde la infancia. Para lograr esa certificación, personal de la
dirección municipal de salud realizó diversas actividades en esas escuelas,
impartiendo talleres, pláticas y conferencias informativas y de prevención dirigidas
a alumnos, profesores y personal administrativo. En esos planteles impartieron pláticas informativas sobre:
Enfermedades de Transmisión Sexual, Buillyng, Nutrición, Violencia en el
Noviazgo, Depresión, Suicidio, Alcoholismo y Drogadicción. Se supervisaron los
espacios deportivos y se trabajó con el personal de las cooperativas para
verificar la calidad de alimentos que ofrecen, así como para supervisar el buen
manejo de los alimentos y la cloración del agua, todo con el fin de tener una
juventud sana. Fomentar la prevención mediante el aprendizaje de habilidades y
hábitos que permitan a los adolescentes mantenerse sanos y evitar conductas de
riesgo, es la mejor manera de garantizarles un futuro próspero. Por el otro, se
debe mejorar la detección y atención oportuna de padecimientos diversos que
comprometen el sano desarrollo de una persona. Ya que uno de los mayores problemas
que enfrentan los adolescentes, son los embarazos prematuros y las enfermedades
de transmisión sexual, ambos productos de una vida sexual activa sin uso de
algún método anticonceptivo o de protección sexual. El embarazo en esta etapa,
no solo afecta su salud, también termina muchas veces con su educación,
proyecto de vida, economía, relaciones sociales y culturales, entre otros
aspectos. La falta de preparación para enfrentar una paternidad o maternidad en
edades tempranas genera condiciones de vulnerabilidad que afectan el desarrollo
psico-emocional tanto de los padres adolescentes como de sus hijos al nacer.
Asimismo, el embarazo también afecta la salud física de las adolescentes, ya
que éste se vincula con muertes materno-infantiles y abortos. Por su parte, las
infecciones de transmisión sexual son más comunes en adolescentes que en otros
grupos de edad, por lo que se considera a esta población como grupo vulnerable
con el que se debe trabajar constantemente para evitar que cada día sean más
los jóvenes que se convierten en padres. Infecciones de transmisión sexual,
como la gonorrea, clamidia, sífilis, chancro, herpes, tricomona, entre otros,
son muy comunes entre los jóvenes. El VIH también es parte de este grupo, no
obstante que su transmisión puede ser por vías no sexuales, como en el caso de
transfusiones sanguíneas. Y según las estadísticas el 15% de las personas
infectadas son adolescentes que lo adquirieron a través de relaciones sexuales
sin protección. Otro problema que enfrentan los jóvenes en la actualidad, y que
crece de manera alarmante, cobrando cientos de vidas anualmente, son los trastornos mentales, cada vez son más
los jóvenes que padecen depresión, ansiedad y otros desordenes que los llevan
al suicidio e incluso al homicidio de compañeros de clase, maestros, sus
propios padres o novios, por lo que estos padecimientos son una prioridad para la salud pública en
nuestro país por su alta prevalencia y porque afectan a toda la población sin
distingo de edad, género o nivel socioeconómico. La salud mental está
determinada por múltiples factores de tipo social, psicológico y biológico.
Entre los primeros, las dificultades económicas y la inestabilidad social
persistentes constituyen un riesgo para el desarrollo de trastornos mentales;
asimismo, los cambios sociales súbitos, la violencia, la discriminación de
cualquier tipo, la exclusión social y las violaciones a los derechos humanos,
entre otros factores, se encuentran directamente relacionados al desarrollo de
problemas mentales y sus potenciales complicaciones, como el suicidio. Los
adolescentes cada vez son más vulnerables a padecer depresión o ansiedad, ya
que es justo al final de la infancia y comienzo de la adolescencia cuando
aparecen o se fortalecen más estos problemas, los cuales constituyen la
principal causa de morbilidad en los jóvenes y comúnmente se asocian con el
consumo de alcohol, tabaco o sustancias psicoactivas. Estos problemas si no son
detectados y atendidos a tiempo conducen a los adolescentes al consumo, abuso y
dependencia de sustancias como el tabaco, el alcohol y otras drogas que no solo
generan problemas de salud para el individuo que las consume, sino también para
sus familiares, amigos, compañeros de trabajo y la sociedad en su conjunto. El
consumo de sustancias psicoactivas en adolescentes generalmente inicia por
curiosidad, debido a la fuerte influencia de la presión de sus pares o como una
forma de disminuir los sentimientos de angustia o depresión que puedan
desarrollar antes o incluso después del primer contacto con dichas sustancias.
Existe el riesgo de que el consumo se vuelva habitual y menos controlado, con
el riesgo de sentir la necesidad de tomar dosis más altas o más frecuentes.
Estos son signos inequívocos de una adicción, la cual tiene consecuencias negativas
en los planos físico, psicológico y social.
Además de que ponen en riesgo a los jóvenes de involucrarse en
actividades delictivas y criminales, que detonan en mayor inseguridad y acaban
por destruir el tejido social.
Continuando con
los trabajos de prevención para evitar riesgos en la salud de los habitantes, en
unos días se pondrá en marcha el “Programa de Descacharrización 2019”, el cual
consiste en retirar de los hogares recipientes que pudieran servir como
criaderos del mosquito transmisor del dengue, zika y chikungunya, que
proliferan en la temporada de lluvias, por las condiciones de humedad en el
ambiente. La dirección de salud recolectará cubetas, envases y todo tipo de
recipientes que puedan acumular agua y servir de criaderos. Materiales como
llantas, recipientes, envases, baldes y juguetes son retirados de los hogares
por una cuadrilla de la dirección de ecología y servicios públicos, seguidos de
personal de la dirección de salud municipal y la coordinación de alud del
estado, quienes además realizan labores de abatización en aljibes, piletas y
tinacos. El material recolectado es separado y revalorizado para su posible
reciclaje.