Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO. El Presidente Andrés Manuel López
Obrador celebró ayer a los maestros con la consumación de la nueva reforma en
materia educativa, que echa por tierra la aprobada en el sexenio de Enrique
Peña Nieto.
Frente docentes de 32 estados del país y un profesor
indígena, dio por avalados los cambios constitucionales -aprobados en tiempo
récord por los congresos estatales-, ordenó su publicación en el Diario Oficial
de la Federación y se comprometió a que su Gobierno no ofenderá a los
profesores, como ocurrió en el sexenio pasado.
“Se hizo el compromiso de no continuar con la misma
política educativa que ofendía al magisterio. Afortunadamente se logró la
cancelación de la mal llamada reforma educativa. Nunca se va a ofender a los
maestros, como se hizo de echar a andar una campaña de desprestigio a la labor
de los maestros, algo que no había sucedido en nuestro país”, expresó.
“La nueva reforma educativa tiene otros propósitos,
sobre todo el que ya no se ofenda a los maestros de México, que se les respete
y que todo lo que se haga para mejorar la calidad de la educación se haga de
común acuerdo con las maestras y los maestros de México”.
En el encuentro, el Secretario de Educación, Esteban
Moctezuma, destacó que con esta reforma se acabó el enfoque punitivo en la
relación con el magisterio.
“Se elimina el texto constitucional previo y se
eliminan las reformas que lastimaron al magisterio. El enfoque punitivo en la
relación con los maestros ahora se transforma en un reconocimiento para agentes
de cambio que merecen todo nuestro reconocimiento”, aseveró.
El titular de la SEP aseguró que los derechos laborales
de los maestros quedan completamente protegidos.
“Nunca más una reforma en contra de los maestros”,
dijo.
En el salón Tesorería, sin la presencia de líderes
sindicales –como se estilaba en sexenios anteriores–, el tabasqueño aprovechó
su conferencia matutina para entregar la condecoración “Maestro
Altamirano” y el reconocimiento “Othón Salazar Ramírez”.
Esta es la primera ocasión en la que se entrega el
reconocimiento en memoria del maestro normalista, nacido en Alcozauca,
Guerrero, y quien falleció en diciembre de 2008 en el municipio de Tlapa, en la
zona de La Montaña.
El docente elegido por López Obrador fue disidente
sindical y candidato del Partido Comunista al Gobierno de Guerrero en 1980.
A nombre de los profesores, el maestro indígena Salomón
Maximiliano Emeterio pidió a Dios que ilumine a López Obrador para lograr la
transformación que necesita el País.
“Pido al creador y dador de vida para que, con este
Gobierno que encabeza el licenciado Andrés Manuel López Obrador, nos vaya bien,
y le pido también al creador y dador de vida para que le dé la suficiente
inteligencia, la perseverancia y se haga realidad la transformación que tanto
necesita nuestro país”, indicó.
Tras la entrega de reconocimientos a docentes y el
anuncio de la consumación de la reforma educativa, el Presidente canceló el
timbre conmemorativo del Día del Maestro.