(Misael Tamayo Hernández, in
memóriam)
Hacienda bajó desde marzo el Impuesto Especial sobre
Producción y Servicios (IEPS), que es el impuesto que se paga por la producción
y venta o importación de gasolinas, pero esto no tuvo ningún impacto en el
precio del combustible que Pemex vende a los distribuidores, sino todo lo
contrario.
Los gasolineros no sólo se quedaron con el dinero del
subsidio, sino que además incrementaron los precios de las gasolinas y el
diésel, agravando así mismo la inflación en el mercado nacional.
¿Qué sucedió? Que a pesar de que el gobierno está haciendo
su parte para que la gasolina no sólo mantenga su precio, sino que baje, los
gasolineros se determinaron a hacer incrementos al precio de los hidrocarburos
que les surte Pémex a precios subsidiados, algo que es absolutamente
injustificable.
El subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, explicó que en
el primer trimestre de este 2019 el margen de ganancia de los gasolineros
aumentó notablemente, “y sin una razón clara de costos”.
Dijo, por ejemplo, en comparación con el primer trimestre de
2018, los gasolineros se están quedando con un margen de beneficio de 70
centavos más por la venta de gasolina Magna, lo que implica un 55% al alza. En
la Premium el margen es todavía mayor: 1.20 pesos, un 84% al alza. Y en el
Diesel, 47 centavos, un 36% al alza.
Esto provocó que el pasado martes, el presidente de la
República, Andrés Manuel López Obrador, los exhibiera públicamente, y les
advirtiera que de continuar con esta práctica desleal hacia el consumidor
final, Pemex crearía su propia red de gasolineras, para sembrarles una real
competencia.
Así pues, luego de ser acusados de “embolsarse”
estímulos fiscales y no bajar por ello los precios de las gasolinas,
empresarios gasolineros buscan aclarar con Hacienda costos al público.
Obvio, los representantes argumentan que recurrieron al
incremento de precios porque por la estrategia de combate al guachicol tuvieron
pérdidas cuantiosas, por el desabasto que provocó el cierre de ductos de Pemex,
y la transportación vía terrestre del combustible desde las refinerías.
Los empresarios buscan una reunión con la Secretaría de
Hacienda para establecer cuáles son los verdaderos factores que influyen en los
costos de la gasolina, pues para ellos no basta que Pemex se las dé a menor
costo, sino que desean agregarles otras minucias, como la distancia entre las
estaciones de servicio y las terminales de almacenamiento, que obviamente son
las mismas, pues hasta ahora no se sabe que Pemex haya construido nuevas, sino
al contrario, se tiene un rezago en esta materia de unos 25 años.
Pero el subsecretario de Hacienda fue claro al explicar que los
precios de las gasolinas aumentaron principalmente por decisiones de los mismos
empresarios gasolineros, quienes aumentan los estímulos fiscales a sus
ganancias en lugar de aprovecharlos para reducir sus precios al público.
¿Qué tal? Consideramos que el presidente debe meter la
competencia del Estado, porque si nos atenemos a que los empresarios piensen en
nosotros, eso jamás va a suceder. Ellos están para ganar-ganar, nunca para
perder.
Para darnos una idea del atraco, desde el viernes 5 de abril
hasta hoy se aplicó un estímulo fiscal al Impuesto Especial sobre Producción y
Servicios (IEPS) de 1.62 pesos por litro de la gasolina Magna, pero eso no se
reflejó en el precio final, sino todo lo contario. Y la semana anterior a ésta,
el subsidio fue de 1.05 pesos al IEPS.
Los gasolineros se quejan de que Pemex les da un margen de
ganancia reducido; por lo tanto, se sirvieron con la cuchara grande.
Se supone que la apertura comercial de Pemex Distribución se
hizo para que el consumidor final tuviera un mejor servicio. Y que la creación
de nuevas marcas de gasolinas se autorizó para que el consumidor tuviera de
dónde elegir. Pero todo es un montaje, porque no importa el nombre de la
gasolinera, si es Pemex el que les surte a todas, y sobre todo si el gobierno
está subsidiando el IEPS, impuesto que se aplica al precio final, y por lo cual
los consumidores debemos ser los beneficiarios directos, no ellos.