Opinion

SOS COSTA GRANDE

By Despertar Redacción

August 20, 2020

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

La alianza PRI-PRD-PAN es un hecho, pero el cuarto en ese proyecto, el partido Movimiento Ciudadano, todavía no toma una decisión al respecto. Su líder en el estado, Adrián Wences Carrasco, dijo que irán a las elecciones de 2021 sin alianzas ni coaliciones.

Eso, claro, aún está por verse. No vemos cómo el líder nacional del partido naranja, que es una franquicia de Dante Delgado Rannauro, no quiera hacer alianza con el PRI y el PAN, porque ya lo hizo en 2018 con PRD y PAN.

Dante es alguien que ya perdió la brújula ideológica, y no tendrá empacho en aliarse también con el PRI, máxime cuando en diversas cartas ha venido exponiendo diversos problemas con el presidente Andrés Manuel López Obrador, sobre todo relacionados con el gobernador de Jalisco, su correligionario Enrique Alfaro Anguiano.

Ahora bien, es posible que los emecistas de Guerrero decidan salirse de los pactos de Dante, como en 2018 lo hizo el líder del PT, Victoriano Wences Real.

No olvidemos también que el próximo año viviremos cuatro distintas elecciones, y de éstas 3 serán locales, y una de índole federal.

Luego entonces, Dante sólo puede pactar con PRI, PRD y PAN, para la selección de diputados federales, sobre todo porque la oposición tiene la consigna de ganar la mayoría de los 300 distritos federales, para hacer del Palacio Legislativo de San Lázaro un contrapeso al Palacio Nacional.

Sin embargo, en las 3 elecciones locales, como la de gobernador, la de alcaldes y la de legisladores locales, el partido podrá estar o no estar en esa alianza, de acuerdo con sus conveniencias.

Se sabe de gente que no está de acuerdo en esas alianzas, que los obligarían a hacer campaña con sus acérrimos enemigos de otros partidos. No olvidemos que donde más se caldean los ánimos es en las elecciones para presidentes municipales, y que estos procesos electorales se convierten prácticamente en batallas campales, donde los candidatos se dan hasta por debajo de la lengua, y quedan los pueblos divididos y las familias enojadas.

Ahora mal, a la salida de Luis Walton Aburto del MC para buscar la candidatura a gobernador por Morena, pocos de su partido lo siguieron. Más bien, el partido permanece y hoy lo dirige alguien que ni siquiera es emecista, pero sí alguien muy cercano al ex gobernador Ángel Aguirre, quien desde hace tiempo ha venido colocando sus fichas en el ajedrez político, para que llegado el momento poder dar jaque mate.

Por ejemplo, Aguirre también tiene injerencia en el Partido Acción Nacional, a través de la diputada panista Lupita González Suástegui, pues el padre de ella, don Proceso González, fue siempre afín al aguirrismo.

No será la primera vez que el ex mandatario haga este juego de fuerzas políticas. Ya una vez lo logró, cuando se postuló él mismo para gobernador. Y ahora volverán a repetir la hazaña, en tratando de contener a Morena y su proyecto llamado la 4 Transformación.

Además, en las elecciones de 2015 y 2018, se pudo ver a los aguirristas compitiendo por diversos partidos, señal de que tienen la consigna de arribar al poder por cualquier vía.

Hay gente en los ayuntamientos, por ejemplo, que era priísta y lo siguieron en su aventura como perredista. Luego se les ha visto en MC, PT y hasta en Morena.

Las encuestas determinan que MC no ha crecido realmente en guerrero. Igual que el Partido Verde y el PT, los espacios que ha logrado han sido porque prestó su plataforma para gente desplazada del PRD.

La preferencia electoral para el partido naranja, de hecho, es muy baja a nivel estatal, y a nivel nacional salvaron el registro por un pelito.

De acuerdo con Wences, el acuerdo de ir solos fue tomado durante una sesión del consejo en diciembre de 2019. “En una reunión de consejo, entre otros puntos se acordó que en esta elección 2021 íbamos solos, sin coaliciones, sin alianzas, sin candidaturas comunes, con candidato a gobernador propio y a todos los demás puestos de elección que van a estar en la competencia electoral, hasta ahora esa la decisión”, comentó.

No obstante, Wences olvida que la política es de coyunturas, que nada está escrito y pronto veremos a Dante Delgado enviando a alguien o viniendo personalmente a dictar línea.