Opinion

SOS COSTA GRANDE

By Despertar Redacción

July 21, 2020

 (Misael Tamayo Hernández, in memóriam)

¿Se acerca la cura del Covid-19? A pesar de que el subsecretario de Salud en el país, Hugo López Gatell, era pesimista al respecto, ayer dijo que la humanidad se acerca a la obtención de una vacuna segura para evitar los contagios por coronavirus.

Como nunca, en tiempo récord y a marchas forzadas, la comunidad científica de varias naciones trabaja cada una en sus propios prototipos de vacuna, acelerando los procesos de prueba, pues recordemos que para este tipo de biológicos, las pruebas primero se hacen en animales, y posteriormente en humanos.

Las vacunas deben probar que generan anticuerpos contra el Covid-19, pero sobre todo que son seguras; es decir, que no matan, porque entonces nos saldría más caro el remedio que la enfermedad.

Ayer, López Gatell reconoció que el mundo está ante una alta probabilidad de tener una vacuna contra el Covid-19 en el corto plazo.

“En esta última semana salieron tres publicaciones sobre las tres candidatas a vacunas que están en la fase más avanzada de investigación, que es la fase tres de investigación clínica, los tres dan resultados prometedores con distintas características. Yo recomendaría entusiasmo por saber que se acerca el mundo a una o más vacunas”, afirmó.

En efecto, ayer, una empresa británica anunció que su vacuna ya fue probada en humanos y dio resultados positivos.

“La vacuna contra el coronavirus que desarrolla la universidad británica de Oxford resultó segura y ‘entrena’ el sistema inmunológico”, según revelaron los estudios de las primeras fases del estudio, divulgados este lunes.

Se agrega en el análisis que la fórmula denominada AZD1222, está siendo elaborada por AstraZeneca en colaboración con científicos de la Universidad de Oxford, y no presentó ningún efecto colateral grave en los 1.077 voluntarios, adultos sanos de entre 18 y 55 años, que produjeron respuestas inmunes de anticuerpos y células T que pueden combatir el virus, según los resultados del ensayo publicados en la revista médica The Lancet.

Amable lector, estas son noticias maravillosas, luego de 7 meses de que la humanidad vive una de las pandemias más devastadoras que ha sufrido a lo largo de su historia.

Y aunque también hay avances en la mezcla de medicamentos para evitar muertes, éstas no se han podido evitar, y en nuestro medio la mortalidad es muy elevada, merced a enfermedades concomitantes, como la hipertensión, obesidad y diabetes, en ese orden.

Nótese que uno pensaría que un diabético es más vulnerable que una persona hipertensa u obesa, pero no es así. Demostrado está que la hipertensión y la obesidad están matando a más personas con Covid-19, que la misma diabetes, siendo ésta que es una enfermedad que vulnera mucho a las personas. Luego entonces, es peor la obesidad, de la cual se deriva la hipertensión. De ahí que López Gatell señalara que la Coca-Cola concretamente, y todas las bebidas azucaradas, son venenos para los mexicanos.

En efecto, en esta pandemia hemos sido desnudados de muchas maneras, y sólo esperemos que las muertes que se han registrado hasta ahora, y aun las que faltan, no sean en vano. Que el gobierno -como ya lo prometió el presidente Andrés Manuel López Obrador-, se profundice en la reforma de salud, para que la industria alimenticia -si es que se le puede llamar así-, sea obligada a dejar de engañar a los consumidores, y que estos a su vez sean reeducados y volvamos a la alimentación original, la que por muchos años nos dio resistencia contra muchos padecimientos, incluidos el cáncer de mama, que antes era menor entre las mujeres de México mientras diezmaba a las de Estados Unidos, pero que hoy figura entre las primeras causas de muerte.

Volviendo al tema, el pronto desarrollo de una vacuna contra el Covid-19, es una excelente noticia. Trae mucha esperanza a un mundo condenado a sufrir y morir por un nuevo virus, para el cual la humanidad no tiene inmunidad.

Pero en el fondo, los países tienen que revisar sus procesos alimenticios, porque somos una sociedad enferma ya de antemano.

Afortunadamente, en México 63.5 de cada 100 enfermos se han recuperado. Pero esa cifra debió ser mayor. Se nos había dicho que el 80 por ciento pasaría sin problemas el contagio, y que una mínima parte perecería. No es así. Estamos con cifras muy altas de mortalidad, que nadie puede ocultar.

Y entre tanto se prueban las vacunas, se autorizan, se registran y se producen, pasarán muchos meses, en los cuales, estamos obligados a seguir cuidándonos. Esa es la única medicina por ahora, para evitar el contagio.