ELIUTH ESPINOZA El cierre oficial de playas y cualquier actividad turística en los 325 kilómetros del litoral de Costa Grande, transcurre en orden y con gran participación, e iniciativa, de la población. Microdestinos de la región como Barra de Potosí, en Petatlán, y Puerto Vicente, en Tecpan de Galeana, además de los balnearios, bloquearon el acceso carretero a sus comunidades para protegerse de la propagación del coronavirus. La pesca ribereña continúa su producción en los municipios de Costa Grande, sin embargo, sin visitantes y restaurantes cerrados, su demanda es mínima. “No hay nada más triste que ver nuestras playas y todos nuestros destinos turísticos vacíos, sin turistas”, describe lo que se vive el secretario de Turismo de Guerrero, Ernesto Rodríguez Escalona. “Pero no hay mayor satisfacción que saber, que se está haciendo lo correcto. Pronto vamos a volver a sonreír”, refirió ayer. El viernes, habitantes de Barra de Potosí colocaron un retén para impedir la entrada a personas ajenas. Ya que no faltó quien a pensar del cierre temporal de playas y negocios, precedido de constantes llamados oficiales de quedarse en casa, acudiera a la laguna. Por lo que tuvieron que cerrar completamente el acceso a la localidad, informó el comisario municipal, Juan Carlos Cedeño Solís. El sábado, la comunidad turística Puerto Vicente, en Tecpan de Galeana, hizo lo propio. La medida inició a las ocho de la mañana. Pobladores encabezados por su comisario Alejandro Bello, se congregaron en el entronque federal al microdestino. Portando tapabocas atravesaron algunos vehículos. El bloqueo pacífico sólo da entrada a proveedores de alimentos y servicios básicos. “Para cuidar a mi comunidad, no se deja ingresar a ningún turista local o extranjero. Con un contagiado que venga se afecta el puerto”, compartió Bello. En Ixtapa-Zihuatanejo, el presidente del Consejo de Participación Ciudadana de playa La Ropa, considera que “como una medida efectiva y contundente se debería cerrar el destino. Y sólo permitir la entrada de alimentos y productos indispensables, añade, en Zihua sí nos queremos y valoramos la vida. Quédate en casa amigo turista por el momento no podemos atenderte. En Playa Troncones, municipio de La Unión, a pesar de que no hay señalética del cierre del balneario, los hoteles y restaurantes están cerrados al 100 por ciento. “Hay temor en que alguien pueda traer el virus y mejor así, perdiendo, ganamos la salud que es primero”, comentó Ausencio Solís Hernández, presidente de la Asociación Civil Riviera Troncones Saladita. Estamos tomando muy en serio las medidas de precaución, es mejor prevenir que llorar después, dijo, “hay muchas perdidas económicas, pero saldremos adelante y aguantaremos hasta donde podamos”. “Sé que estamos pasando tiempos difíciles, que nadie esperaba, y para los cuales no estamos prevenidos, ni mucho menos preparados, para algo de este tamaño”, explicó. Somos miles los que estamos bajo esta calamidad, que vivimos 100 por ciento del turismo; Playa Troncones, La Saladita, La Majahua y las comunidades que trabajan aquí. Como Lagunillas, Pantla, Los Llanos, Buena Vista, entre otras, afirmó Solís al tiempo de confiar en que si hay algún tipo de apoyo de parte del gobierno, serán tomandos en cuenta. En Bahías de Papanoa, Tecpan, el presidente de la Asociación de restaurantes y hoteles, comunicó que previo al cierre, el secretario del ayuntamiento visitó cada uno de los negocios. En el operativo para cerrar playas en los 500 kilómetros de litoral de la entidad, participan la Guardia Nacional, la Marina Armada, la Policía Estatal y Protección Civil.