IRZA
Chilpancingo, Gro., (IRZA).- Este viernes se registraron “compras de pánico” en esta ciudad capital, como consecuencia del desabasto de alimentos y otros artículos que causó la devastación que causó el huracán “Otis” en Acapulco.
Decenas de personas se trasladaron del puerto a esta capital para abastecerse de combustible y víveres, particularmente agua y alimentos. En todas las gasolineras de la ciudad se registran interminables filas de vehículos.
La demanda de combustible de habitantes de Acapulco provocó que los capitalinos también se volcaran hacia las gasolineras, debido a especulaciones sobre un posible desabasto en los próximos días.
En la gasolinera Jacarandas, ubicada en la avenida Gobernadores, se registró un embotellamiento que se prolongó durante todo el día. Algunos automovilistas tardaron hasta dos horas en la fila para comprar gasolina.
En el bulevar Vicente Guerrero, a la altura del Parador del Marqués, efectivos del Ejército y de la Guardia Nacional instalaron un operativo para coordinar el tráfico debido a acumulación excesiva de vehículos.
Colocaron señalamientos y despejaron los acotamientos exclusivamente para los automovilistas que buscaban combustible y, sobre todo, para no interrumpir el tráfico con dirección hacia Acapulco.
La historia fue similar en todas las estaciones gasolineras de esta capital. Y hasta la tarde de este viernes continuaba la compra masiva de combustible.
Sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que un buque cargado de combustible se dirigía al puerto.
Mientras que los supermercados fueron abarrotados, tanto por ciudadanos de Chilpancingo como de Acapulco, en busca de víveres.
También se reportó un lleno total en las hospederías de esta capital, y la mayoría de los huéspedes son de Acapulco.