Estatal

Reprochan inacción ante desplazados

By Despertar Redacción

February 03, 2020

Jesús Guerrero

Agencia Reforma

CHILPANCINGO. Crescencio Pacheco, uno de los desplazados de la Sierra de Guerrero, tuvo que migrar junto con su familia a Estados Unidos luego de recibir una serie de amenazas de muerte por parte de una organización criminal.

“Hubo llamadas, recados, de que querían atentar contra mí y mi familia”, relató el ex comisario de la comunidad de Campo de Aviación, del municipio de Leonardo Bravo.

En noviembre del 2018, 400 familias, incluida la de Pacheco, fueron expulsadas de sus comunidades –Filo de Caballos, Los Morros, Campo de Aviación, El Carrizal, La Quebradora– por supuestos policías comunitarios de Tlacotepec.

Se refugiaron en la localidad de Chichihualco, cabecera municipal de Leonardo Bravo.

Pacheco, quien desde agosto del 2019 trabaja de manera ilegal en obras de construcción en el estado de Utha, recordó que en febrero los desplazados instalaron un plantón afuera de Palacio Nacional para exigir al Presidente Andrés Manuel López Obrador que se les garantizara el regreso a sus pueblos y el repliegue de los supuestos policías comunitarios.

En marzo firmó una minuta donde Gobierno federal se comprometió a pagar la renta de viviendas a las familias desplazadas y la dotación de despensas cada mes, además de medidas de seguridad.

Sin embargo, luego de recibir amenazas de muerte decidió salir de Guerrero y del país junto con su familia.

“El 15 de julio del 2019, salí de Guerrero, fui por mi esposa y mis tres hijos que los tenía en el Estado de México y de ahí partimos hacia la frontera”, refirió.

El ex líder de los desplazados aseguró que recibió las amenazas luego de sostener reuniones con el Secretario de Gobierno, Florencio Salazar y el subsecretario de Asuntos Políticos, Martín Maldonado quienes, afirmó, lo querían sobornar para que dejara el movimiento, lo que rechazó.

Por esta razón, afirmó, las amenazas de los criminales se incrementaron.

“Yo siempre he dicho que el Gobernador Héctor Astudillo protege a los grupos criminales que operan en la Sierra y que tienen aterrorizada a la gente”, aseguró.

El activista indicó que regresar a Guerrero sería un riesgo porque en la Sierra siguen en activo dos grupos criminales que para él son protegidos del Gobierno.

También lamentó que el Presidente López Obrador haya dicho que el desmantelamiento de las policías comunitarias de la Sierra y de otras partes del estado llevará tiempo.

“Esas policías comunitarias de la Sierra y de otros lugares de Guerrero son integrantes de la delincuencia que están defendiendo su territorio”, señaló.

En esas localidades, aseveró, la gente tiene más carencias debido a la caída de los precios de la amapola.

Pacheco dijo que durante su estancia en un albergue religioso en Nogales Sonora constató que alrededor de mil personas de diferentes zonas de Guerrero, que también fueron desplazadas por amenazas de grupos criminales, buscan cruzar a Estados Unidos.

“En Guerrero, el Gobierno no da ninguna garantía para los desplazados de vivir en un lugar donde no seas amenazado por las bandas”, lamentó.