Ruth Tamayo Hernández
Coronavirus amenaza a la prensa escrita
“No se puede hacer nada para cambiar lo que ya pasó, pero sí se puede hacer mucho para cambiar lo que viene”: Martha Guerri.
Mis estimados, discúlpeme, pues en la edición del pasado miércoles se publicó la columna Palabra de Mujer sin corregir, error de dedo, sufro con la tecnología.
Sigo con la entrega: Es imposible no dar seguimiento al tema las pérdidas económicas que dejará a los mexicanos la pandemia del coronavirus. Hay descontento entre micro empresarios, transportistas, pescadores y prestadores de servicios turísticos en general, porque tienen 40 días sin ingresos. Además, temen porque no saben cómo volverán a empezar, pues están descapitalizados.
La verdad es que la mayoría desconoce las consecuencias que el virus dejará tras el pico de la pandemia; y lo peor es que ignoramos hasta cuándo se va a acabar la crisis por el coronavirus, porque no sabemos si será el próximo mes o se alarga la contingencia, ya que las acciones para aplanar la curva nos ayudaron para evitar la saturación de los hospitales, pero en cambio alargaron el periodo de contagios y con ello aumentaron los estragos económicos, pues a mayor desmovilización, mayor caída de ingresos y mayor pobreza.
No se necesita ser experto en economía para entender esta ruta lógica. Pocos negocios en este país pueden sobrevivir más de una semana sin ingresos. Para muchos, bastan 3 días para derrumbarlos o ponerlos en aprietos. Imaginemos los estragos que ha causado esa prolongada cuarentena, máxime cuando se alargará durante todo este mes de mayo.
El regreso será también lento, por fases, y es obvio que el turismo, el pilar de nuestra economía estatal y local, no se recuperará de un día para otro, porque sencillamente depende de los visitantes, que en otros países también están pasando por sus propias crisis económicas y sanitarias.
Por lo tanto, estamos pues ante un panorama desolador todos, y el gobierno en todos sus niveles tiene la obligación de crear un plan de apoyos y soporte económico de alcance nacional. No sólo para los amigos, como lo hacían los gobiernos anteriores, pero tampoco sólo para los pobres, como actualmente es la política nacional de programas sociales.
Y es necesaria la prudencia, mis estimados, pues ningún gobernante sabía de todo esto; ni idea tenían de las consecuencias de la pandemia, pues los efectos apenas se divisan, pero definitivamente será rudos.
Algo que no debemos perder de vista es que la crisis del coronavirus es ante todo una amenaza de salud pública, y en este punto entra la conciencia de la gente, porque no es justo discutir intereses propios en estos momentos, pues se trata de la salud pública de todo un municipio, no sólo de los empresarios.
Sin embargo, no trato de persuadir a nadie, cada quien es responsable de sus actos, pues aunque hacíamos votos porque el Covid-19 no llegara a Zihuatanejo, finalmente llegó. Y ahora la tarea es contenerlo, porque si avanza en el puerto de Zihuatanejo hasta hacerse algo inmanejable, como sucede en Iguala, cada quien cargará en su conciencia lo que dejó de hacer.
En relación al contagio del coronavirus en el municipio de Petatlán, surgió de un paciente que murió, pero que llegó de Tijuana a su casa ya enfermo, pues es oriundo de ese municipio; no obstante, nadie aceptó que el petatleco hubiera sido positivo del Covid-19, lo negaron todos, inclusive familiares dijeron que murió de infarto por la diabetes, trataron de mentirosos a los doctores, los amenazaron, les dijeron hasta de qué se van a morir. Al mismo presidente Estaban Cárdenas, lo insultaron, dijeron que inventaba, que el paciente había muerto de coronavirus para que el gobernador, Héctor Astudillo, le diera dinero.
El alcalde buscó la manera de aislar a la familia para evitar más contagios del virus, pero la familia no aceptó, y ahí están las consciencias. Ya hay otra señora muy grave en el hospital, está intubada y se debate entre la vida y la muerte.
Así lo informó el edil petatleco ayer a este medio.
¿Ahora qué va a decir la gente? ¿Qué van a inventar? ¡Caray!, ¿por qué somos tan testarudos los seres humanos?
La gente cree en todo, en brujos, en palos con vestido de monja, hasta se hincan y los adoran. Pero en un tema de salud no creen. Para creer, quieren que les digan dónde está la persona, dónde vive para ellos ir a ver si es verdad; si no es así, no creen.
El coronavirus es serio señores, por piedad, tomen precauciones, no espere que se muera su familia para entonces soltar el llanto. Perdón por insistir tanto en el tema, pero aquí vivimos todos y Zihuatanejo es pequeño. Si se expande el virus, corremos el riesgo de contagiarnos varios, por no decir todos. Aguantemos un poco más; según autoridades de Salud federal, si seguimos como vamos, el 17 de mayo podrán abrirse algunos municipios en Guerrero.
En serio mis estimados, no deseo que nos ocurra en el municipio de Zihuatanejo lo que ocurre a algunos municipios que están completamente cerrados, como en la Tierra Caliente, seamos prudentes.
Los problemas económicos no son sólo de un sector, sino que entramos todos al costal; incluso la familia, pues también ellos no tienen dinero, no hay empleo, es una cadena en la que todos estamos atados.
Es cierto que nadie veía venir esto, mis estimados, y estamos los mexicanos en problemas graves, por lo que es necesario que comiencen a prepararse para lo peor, pues está en riego el patrimonio familiar de millones de mexicanos, por no decir que el de todos, principalmente la quiebra de negocios, varios comenzaron esta racha endeudados, otros recurrieron a la deuda para subsistir, y de pilón engañados por discursos de grupos políticos, que ya estamos comenzando a escuchar por todos lados.
Aunque nos quedemos sin nada, pero tenemos salud, podemos seguir trabajando, eso decía mi madre. Se los comparto, por si les sirve de aliciente.
Inclusive, mis estimados, un tema que me cuesta decirlo es en relación a la pérdida de medios de comunicación a nivel mundial, y es que no es fácil desprenderse de una empresa que costó tanto mantenerla. Si algo duele en la vida, son estas cosas; y aunque debo decirles que en lo personal no soy ambiciosa ni me tienen atada los bienes materiales, más bien siento dolor y pena que este medio se apague porque la misión y la visión de su editor y fundador fue dar voz a la gente que no tienen ese derecho.
Sin embargo, relata la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), que derivado de la crisis económica por coronavirus prevén que para 2020 habría extinción de medios de comunicación a nivel nacional mundial. Y es que mis estimados, no están ustedes para saberlo ni yo para contarlo, pero cayeron las ventas hasta un 80 por ciento. Así como se derrumbaron las ventas de los microempresarios de otros sectores, también se desplomaron las ventas del periódico. A eso agréguele las amenazas al medio, condicionando que notas sí y que notas no puede sacar. Hace más de un año que todos ustedes conocen el problema que enfrentó esta empresa, hecho que desplomó la venta de periódicos, porque la gente quiere la nota roja y desde esa fecha fue en decadencia.
A Dios gracias podíamos sostenernos, pero hoy es imposible sostener el medio, pagando impuestos del SAT, IMSS, luz y nómina e insumos. Imposible. Los costos de papel, láminas y demás insumos están por los cielos, y es muy difícil seguir; menos si el gobierno no compra publicidad a los medios regionales. Los periódicos se mantienen de la publicidad, y si el gobierno en sus tres niveles no gasta el recurso destinado para ese rubro y publica sus actividades en las empresas que generan empleos, en lugar de beneficiar a medios fantasmas, a llaneros solitarios y blogueros, no tendremos salida.
Es, pues, una cadena todo esto. La UNESCO expone que debido a la crisis económica por la pandemia del Covid-19, varias empresas periodísticas despedirán a los empleados, pues también tienen graves problemas económicos relacionados al flujo de publicidad. Debido al coronavirus. Mermaron las ganancias de los medios. Y algunos de ellos nos confirmaron, dijo Guilherme Canela, consejero de Comunicación e Información de la Oficina de la UNESCO, la posibilidad de un escenario de extinción, para fines de este mismo año, particularmente medios locales y comunitarios.”
Como les decía, el coronavirus vino a darnos el tiro de gracia a todos; sin embargo y aunque a muchos les va alegrar que no haya prensa escrita, es necesario que sepan que las empresas no quiebran solas, quiebra también el pueblo, porque de aquí vive mucha gente.
Los gobernantes aprovechan las crisis para fortalecer su poder; de eso no queda duda; sin embargo, hoy por hoy la prioridad de esos gobernantes debe ser la salud de los mexicanos, son ellos los que deben activar a la economía de la micro, pequeña y mediana empresa, para que no se pierdan empleos. Asimismo, respaldar con publicidad a las empresas periodísticas, es el gobierno el que debe unir esfuerzos con otros capitales, para una política pública de rescate económico. ¡Feliz jueves para todos!