Trinidad Zamacona
“Si las personas propuestas para sustituir a Arturo Zaldívar Lelo de la Rea, son militantes de Morena, o afines al mandatario en turno, entonces no cumplen con lo que establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos”.
En una participación anterior escribí esto: “La designación de los Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, no son actos jurídicos, son actos políticos, pues cada uno de ellos le deben el nombramiento al Presidente en turno o bien a un ex Presidente, por lo tanto el Ministro o Ministra no tiene autonomía en su actuar”. Lo sostengo en el sentido de que se quiere un Poder Judicial a modo, sumiso, que sea una extensión de las decisiones del Poder Ejecutivo, sin importar la división de poderes, o en su defecto la autonomía que este debe de gozar al emitir sus resoluciones.
Antes de entrar al análisis de lo que pasó diremos que para ser Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la misma norma fundamental prescribe lo siguiente; Artículo 95. Para ser electo ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se necesita:
I. Ser ciudadano mexicano por nacimiento, en pleno ejercicio de sus derechos políticos y civiles. II. Tener cuando menos treinta y cinco años cumplidos el día de la designación; III. Poseer el día de la designación, con antigüedad mínima de diez años, título profesional de licenciado en derecho, expedido por autoridad o institución legalmente facultada para ello; IV. Gozar de buena reputación y no haber sido condenado por delito que amerite pena corporal de más de un año de prisión; pero si se tratare de robo, fraude, falsificación, abuso de confianza y otro que lastime seriamente la buena fama en el concepto público, inhabilitará para el cargo, cualquiera que haya sido la pena. V. Haber residido en el país durante los dos años anteriores al día de la designación; y VI. No haber sido Secretario de Estado, Fiscal General de la República, senador, diputado federal, ni titular del poder ejecutivo de alguna entidad federativa, durante el año previo al día de su nombramiento
Hemos dicho que para nadie es desconocido, que para ser Ministro solo es necesario ser amigo del Presidente de México en turno, y que lo proponga al Senado de la República, mediante una terna, pero los legisladores ya saben quién es el que lleva la bendición del mandatario, así que los que participan ya saben que solo van de relleno, pues el preferido ya tiene una ventaja sobre ellos.
Bueno después de que el Ministro Arturo Zaldívar, hiciera campaña para Claudia Sheinbaum, sin haberse separado bien del cargo del Poder Judicial de la Federación, bueno entonces, ya que el Senado ahora si aprobó su separación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, después de ese trámite sencillo que decíamos que era como llevar un oficio y a las pocas horas recibir la respuesta en forma afirmativa, así fue como el Senado le dijo que si, sin problema alguno, la historia lo juzgará como un jurista entreguista que claudico ante el poderoso del poder ejecutivo.
El presidente Andrés Manuel López Obrador envió su terna al Senado de la República, su terma en la cual propuso a tres mujeres: Bertha María Alcalde Luján, hermana de la Secretaria de Gobernación Luis María Alcalde, Lenia Batres Guadarrama, hermana del actual jefe de gobierno de la Ciudad de México, y María Estela Ríos González, su consejera jurídica, es decir todas afines al mandatario federal, a las filas del Partido de Regeneración Nacional, con ello se pierde un principio fundamental, el de autonomía e independencia judicial, nunca tendrán autonomía para actuar en defensa de la a Constitución de México, la lealtad será para Andrés Manuel López Obrador, y para nadie más, adiós supremacía constitucional.
Bertha María Alcalde Luján, con apenas Licenciatura en Derecho, con cédula profesional 7557067 expedida a su favor en el 2012, por la Universidad Nacional Autónoma de México, su experiencia profesional laboral es de asesora jurídica de la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), además de que aspiró a ser consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), donde obtuvo 86 puntos, en donde lideró la lista de los cinco perfiles destacados para consejeros y consejeras del Instituto Nacional Electoral, sin embargo al final perdió ante Guadalupe Taddei, siendo designada presidenta del organismo, y esa era la otra forma de apoderase de ese organismo, quedó en Morena la presidencia. Según cuenta con una maestría en Derecho Penal y Derecho Comparado de la Universidad de Nueva York, de esto no se tiene registro en la Dirección General de Profesiones de la Secretaría de Educación Pública, así lo investigamos, es la que probablemente será la elegida.
Por su parte la actual hermana del jefe de gobierno de la Ciudad de México, Lenia Batres Guadarrama, se desempaña en la actualidad como consejera adjunta de Legislación y Estudios Normativos de la Consejería Jurídica del Gobierno Federal, cerca de otras de las propuestas.
Tiene experiencia legislativa, siendo diputada federal por el PRD en la LVII Legislatura del Congreso de la Unión (1997-2000) asesora del Presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando este se desempeñó como Jefe de Gobierno (2002 a 2004), asesora de la Jefa Delegacional de Tlalpan, Claudia Sheinbaum Pardo (2015-2018), directora general de Gestión, Vinculación y Asuntos Jurídico-Normativos de la Autoridad del Espacio Público (2018), tiene estas cédulas profesionales 11285795, 12879658, 13410597 y 6871018, tiene licenciatura en derecho, por el Instituto Humanitas Escuela Superior de Leyes y Negocios, 2011, Maestría en Derecho Penal, (UNAM) Maestría en Estudios de la Ciudad, UNAM, 2022, Maestría en Gestión Pública Para la Buena Administración, Escuela de Administración Publica de la Ciudad de México, 2023; sin embargo tiene militancia del Partido Socialista Unificado de México, el Partido de la Revolución Democrática, eso la hace inelegible.
Ahora bien María Estela Ríos González, es Licenciada en Derecho, UNAM 1971, Cedula 0217952, Maestría en Derecho Laboral, Centro Universitario Emmanuel Kant, 2019, cedula 11850093, como experiencia laboral es titular de la Consejería Jurídica del Ejecutivo Federal, también fue colaboradora al ser consejera Jurídica y de Servicios Legales del Distrito Federal durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, directora general de Ordenamiento de la Propiedad Rural en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano y Procuradora de la Defensa del Trabajo del Distrito Federal en los últimos cinco meses del 2000, regresó a la función pública en el 2021, a la salida de Julio Scherer Ibarra, a quien sustituyó en el cargo, por lo que ahora se le presenta la oportunidad de ser Ministra por su amistad y cercanía con el Presidente López Obrador.
Las tres tienen filiación con partidos de oposición, son cercanas al Presidente, no tienen en su haber de su carrera profesional el haber litigado, sus conocimientos son escasos en materias de litigios o de derecho constitucional, la mayor parte se han dedicado a la grilla política, si las aprueba el Senado será por la línea de Palacio Nacional, pero no por destacar en materia jurídica, su nombramiento será para 15 años, vaya forma de sacarse la lotería. La que tiene más estudios es la hermana del jefe de gobierno de la Ciudad de México, pero es la menos elegible por su militancia en los partidos políticos de oposición y eso ya es un impedimento que señala la propia Constitución y la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación.
Apodarse del Poder Judicial de la Federación, era el fin del mandatario federal, esta es la prueba de que se requiere lealtad más que capacidad, veremos cómo se desenvuelven ya como Ministras, y vamos revisar sus tesis, por aquello de los plagios.
Después que el Presidente mandó la terna, para Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al Senado este previa comparecencia de las personas nombraban a una que debe suplir por quince años a Arturo Záldivar, y para la designación se necesitan el voto de las dos terceras partes de los miembros del Senado presentes, dentro del improrrogable plazo de treinta días.
Pero si el Senado no resolviere dentro de dicho plazo, ocupará el cargo de Ministro la persona que, dentro de dicha terna, designe el Presidente de la República, esto para que el legislativo no apruebe dentro de sus facultades, pero no creo que pase teniendo mayoría Morena en el Senado, será también de tramite la designación.
En el otro supuesto si la Cámara de Senadores rechace la totalidad de la terna propuesta, López Obrador podrá someter una nueva terna, en los términos del párrafo anterior, pero si en esta segunda terna también si se da el caso de que fuera rechazada, ocupará el cargo la persona que dentro de dicha terna, designe el Presidente de la República, vaya forma de ser republicano, al final se queda la persona que el designe en caso de que el Senado se ponga sus moños y hagan hacer su berrinche al de Macuspana Tabasco, al final ganara la lealtad más que la capacidad.