Isaac Castillo Pineda
En muchas zonas del municipio de Zihuatanejo permanecen cientos de árboles y ramas derribadas por el huracán Rick el año pasado y que a la fecha, significan un riesgo para la temporada de incendios forestales.
Lo anterior lo sostuvo el Director de Protección Civil y Bomberos de Zihuatanejo, Jorge Cervantes Álvarez quien además añadió que toda la vegetación muerta es sin duda un combustible para este tipo de siniestros y debe ser tratado con cuidado.
Insistió en que es necesario que la población lo sepa porque muchas veces pueden encender basura o la llamada quema del tlacolol, sin pensar en que una gran cantidad de árboles y armas derribados pueden generar que se salgan de control las cosas.
Es por eso que hizo un llamado a los habitantes para que tomen las recomendaciones en serio y les pidió que si planean llevar esta actividad, tienen que solicitar la asesoría y vigilancia de Protección Civil y Bomberos, para evitar percances.