Opinion

Estado de los Estados

By Despertar Redacción

November 04, 2021

Lilia Arellano

*En la ONU: corrupción, armas y drogas

*Presenta JR de la Fuente, apretada agenda

*Asesinar periodistas “problema de Estado”

“La mediocridad es legítima hija de la corrupción”: Jorge González Moore.

Tras asumir la presidencia rotativa del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), México pretende poner en el centro de la discusión los temas de tráfico de armas y la corrupción, sostuvo el embajador de nuestro país ante el organismo internacional, Juan Ramón de la Fuente, quien confirmó el próximo 9 de noviembre, en la ciudad de Nueva York, el presidente Andrés Manuel López Obrador participará en una mesa de debate en la cual abordará esos temas junto a los de desigualdad, exclusión y conflictos armados.

En la actual gestión federal de la 4T, México tiene como una prioridad no atendida el combate al crimen organizado, al cual se le ha consentido con la política de “abrazos no balazos” impulsada por el presidente López Obrador, lo que en la práctica es un “dejar hacer, dejar pasar” las actividades ilícitas, fortaleciendo a las organizaciones criminales, las cuales se sienten con fuerza para retar el poder del Estado en diversos territorios. En este esquema, la administración federal tiene como objetivo prioritario la reducción del tráfico de armas desde el territorio estadounidense, lo cual debe hacerse no sólo con la cooperación del gobierno de Estados Unidos, sino con inteligencia y la aplicación estricta de la ley.

De la Fuente precisó: “Nuestro presidente viene exclusivamente a esta reunión y a entrevistarse con el secretario general António Gutiérrez. Su presencia refleja la importancia de estos temas de carácter social”. También confirmó que el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, ofrecerá una conferencia magistral el próximo 22 de noviembre, en la que expondrá el tema de tráfico de armas. El embajador destacó: “El tráfico de armas está vinculado a los problemas transfronterizos, no quiero adelantar, pero nadie puede cuestionar que estos temas afectan la paz internacional y ese es el punto que quiere exponer México”.

De acuerdo con José María Ramos, profesor e investigador en el Departamento de Estudios de Administración Pública del Colegio de la Frontera Norte (Colef), la nueva agenda de cooperación en materia de seguridad y prevención con Estados Unidos, Entendimiento Bicentenario sobre Seguridad Pública y Comunidades Seguras, como se denomina el acuerdo que sustituye a la Iniciativa Mérida, no se limita a la relación de México, sino implica una agenda compleja con países como Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia, productores de coca y amapola.

El análisis de Ramos destaca: “La política de control de drogas desde los citados países hacia México y los Estados Unidos, no reduce el problema sino por el contrario es más complejo desde el punto de vista de producción, distribución, financiero y corrupción”. Además, subraya, en la coyuntura actual, los gobiernos de México y EU, tienen objetivos diferentes. México tiene como prioridad el combate al crimen organizado, con el uso de inteligencia y aplicación de la ley y la reducción del tráfico de armas desde territorio estadounidense. El 70 por ciento de las armas decomisadas proviene del país vecino”.

Por su lado, el gobierno estadounidense, si bien comparte ese enfoque, tiene otras prioridades. Por una parte, busca reducir el tráfico de inmigrantes irregulares, que en su mayoría atraviesan por México en su recorrido desde Centroamérica y recientemente de personas haitianas provenientes de Brasil. Por otro lado, busca frenar el flujo de fentanilo –opioide sintético, similar a la morfina, pero 50 y 100 veces más potente que ésta- y que sustituye de forma acelerada el consumo de heroína en el territorio vecino.

Ramos considera que la relevancia del problema migratorio para Estados Unidos quedó plasmada en la participación del secretario de Estado, Anthony Blinken en la Reunión Ministerial Regional sobre Migración este 20 de octubre en Bogotá. Entre las propuestas está el reforzar la aplicación de la ley en las fronteras mediante control de visados, protección de los migrantes más vulnerables como las víctimas de trata y contrabando de personas, mejorar la gestión de los refugiados y migrantes venezolanos en Colombia y haitianos en el marco regional. Así como promover proyectos de infraestructura resistentes al clima que crean empleos en las comunidades expulsoras de migrantes.

El análisis del Colef destaca que el problema de tráfico de drogas no fue una prioridad en la agenda del secretario Blinken en ese encuentro regional. Ramos refirió la pretensión del gobierno de EU para cambiar el enfoque de su política antidroga. “El problema es que históricamente la prioridad de la agenda estadounidense se ha enfocado en la intercepción de drogas, no en la reducción del consumo”, por ello ahora el cambio es importante al hacer énfasis en la salud pública. Con todo, el consumo de drogas en esa sociedad sigue. Destaca el fentanilo en sus distintos derivados sigue en aumento.

El Colegio de la Frontera concluye que más allá de la relación con México, el gobierno de Estados Unidos tiene otras prioridades relacionadas con la coyuntura interna como avanzar en la vacunación contra el Covid-19, o la reactivación económica, mediante la aprobación del programa de infraestructura. Asimismo, avanzar hacia una agenda verde, junto con la negociación comercial y de seguridad con China y la reforma migratoria. Por lo tanto, considera el combate a las drogas, más allá del control fronterizo, no parece ser una prioridad para el gobierno de Biden por la complejidad multidimensional del tráfico y consumo de drogas.

El doctor Ramos concluye que el gran reto de la nueva política del Entendimiento Bicentenario es su viabilidad en un marco en el cual los países centroamericanos tienen prioridades diferentes. Por ello, lamenta, es probable que en el corto y mediano plazo no se reduzca el tráfico de drogas hacia EU ni el consumo de estupefacientes, así como tampoco se podrá controlar el ingreso de armas hacia México ni el crimen organizado.

Por su parte, Juan Ramón de la Fuente, embajador de México ante la ONU, informó se debatirá sobre los conflictos en Medio Oriente, Siria y Yemen, así como la situación en Irán, Libia, Etiopía y Somalia, “en el caso de Afganistán el punto de mayor preocupación es también la situación humanitaria, pero también otros temas como Derechos Humanos, terrorismo y las sanciones”. El ex rector de UNAM indicó que la crisis migratoria no se dejará de lado y se buscará sea gestionada desde tres perspectivas, las cuales son: los lugares de origen, el tránsito y el destino.

El embajador de México ante la ONU aseguró: “México presentó un plan integral para incluir desde luego los problemas sociales y ambientales de los países de origen, los problemas con los que tiene que lidiar los países de tránsito y los que les corresponden a las naciones de destino. Vemos que esa es la forma más integral de abordarlos y el presidente de México ha mostrado la voluntad de apoyar a los países centroamericanos”.

Detalló se dará prioridad a la agenda de la mujer para resolver temas de equidad de género y atención particular a la situación de las mujeres y niñas en nuestro país, además, reconoció que los temas que se abordarán durante el mes que México presida el consejo, son complicados. “Se ha configurado un gran equipo de mujeres y hombres que están muy comprometidos con el proyecto, que conocen bien sus temas. Sabemos que será un mes difícil, ya anticipamos algunos temas muy complicados, pero el equipo está preparado para afrontar el reto y seguir poniendo el nombre de México en todo lo alto, como lo hemos tratado de hacer desde que asimismo esta honrosa responsabilidad”, subrayó De la Fuente.

De los pasillos

Los asesinatos de periodistas en México “son un verdadero problema de Estado”, la mayor parte de estos crímenes son cometidos por el ejercicio de su profesión e involucran al crimen organizado y a autoridades locales, sostuvo la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), la cual llamó al Estado Mexicano a defender y garantizar el derecho a la libertad de expresión de los periodistas.

En el “Día Internacional para poner fin a la impunidad de los crímenes contra periodistas”, la CNDH señaló que la protección y defensa de las y los periodistas son básicas en toda democracia, por lo que autoridades de todos los niveles de gobierno, pero sobre todo las Fiscalías, deben comprometerse en la investigación y sanción de estos delitos para poner fin a la impunidad.