Politica

En defensa de la democracia

By Despertar Redacción

September 17, 2020

Julio César Hernández Martínez

            Vivimos en México tiempos convulsos. La pandemia del covid 19 ha ocasionado daños en la salud física y mental de millones de personas. El retroceso en la economía también es de gravedad y según proyecciones realizados por analistas, tardaremos cerca de 4 años para recobrar el nivel de crecimiento que se tenía hasta antes de a llegada de la pandemia.

            En cuanto a nuestra democracia, estamos presenciando un acoso a las libertades plasmadas en la Constitución de 1917, producto de luchas, confrontaciones y revoluciones. Desde el poder público federal es evidente dicha pretensión.  Las conferencias mañaneras del Presidente López Obrador se han convertido es una maquinaria de propaganda y ataque político. Todos los días se lanzan calificativos, adjetivos y ofensas a los que considera como adversarios políticos. Conservadores, fantoches, hampa del periodismo, señoritingo, pelele, titere, puchos, politiquero, siniestro, canallin chachalaca, zopilote, demagogo, minoría rapaz, mafiosos, fresas, fifis son algunos ejemplos. Lo peor es que esta conducta del Presidente de la República sirve como ejemplo para que sus seguidores y colaboradores lo hagan a lo largo y ancho de nuestro país.

Los teóricos afirman que la democracia es una forma de vida que busca el bien común de los integrantes de la sociedad; requiere de la participación de las y los ciudadanos y de la práctica de valores que deben darse en nuestra convivencia. La democracia como forma de vida está relacionada con los ideales que se consideran lo mejor para el bien de la sociedad. Dichos ideales están relacionados con algunos valores que deben practicarse como son la igualdad, libertad, justicia y solidaridad.

El carácter político de la democracia, se relaciona con que los ciudadanos puedan elegir libremente a sus gobernantes y los miembros de la sociedad puedan ejercer sus derechos y cumplir sus obligaciones y responsabilidades. El carácter social de la democracia se refiere al modo de vivir y convivir en la sociedad; se basa en el valor de la igualdad y se muestra en que sus integrantes pueden verse y tratarse como iguales. Un gobierno democrático debe guiar sus decisiones a partir de los ideales y valores de la sociedad, buscando siempre atender sus necesidades, por hacer valer la ley para todos y solucionar los conflictos entre grupos sociales diferentes.

            Steven Levitsky y Daniel Ziblatt publicaron en 2018 su obra “Como mueren las democracias” en donde analizan como se debilitan o desaparecen instituciones democráticas en diversos países del mundo, identificando al autoritarismo como una de las causas.  Una de las premisas de la obra se resume “Para poder mantener a raya a las personas autoritarias, en primer lugar hay que saber reconocerlas. Por desgracia, no existe ningún sistema de alerta anticipada infalible. Muchas personas autoritarias pueden ser identificadas fácilmente antes de llegar al poder…ahora bien, los políticos no siempre revelan la magnitud de su autoritarismo antes de ascender al poder”. Ambos autores analizan numerosos ejemplos que permite concluir  como no es necesario , en ocasiones, un golpe violento para acabar con un sistema democrático sino un mero deslizamiento paulatino y gradual hacia el autoritarismo puede ser mucho más efectivo y práctico.

En la democracia mexicana  debemos rechazar el autoritarismo en cualquiera de sus formas. El diálogo es el primer paso para  resolver diferencias. Debe ser un mecanismo muy importante para llegar a acuerdos respecto de algún asunto. En los conflictos o problemas que se presentan en la política y sociedad un aspecto muy importante es que las opiniones sean expresadas y que los grupos  lleguen a acuerdos con respecto a lo que podría ser la mejor alternativa para solucionar los problemas. En estos casos, los valores de la democracia deben ser la guía para resolver las diferencias que se presenten entre los políticos y los ciudadanos.   Para lograr el desarrollo integral de México y Guerrero, la defensa de la democracia es indispensable.