Jorge de la Rosa
Zihuatanejo, Gro.- En vísperas de las celebraciones de Año Nuevo, comerciantes locales han comenzado a anunciar incrementos en los precios de productos básicos y servicios, principalmente alimentos y artículos terminados. La medida, que se anticipa como un “secreto a gritos”, responde a los efectos de la inflación, considerada por algunos como un “impuesto invisible” que el gobierno federal no reconoce.
Los vendedores señalan que los avisos a clientes se harán efectivos en los próximos días, mientras que otros bienes seguirán sujetos a la dinámica de la oferta y la demanda durante todo el año.
El anuncio genera preocupación entre consumidores, quienes enfrentan un cierre de año marcado por el encarecimiento de bienes esenciales.