IRZA
– Centenares de personas le dieron el último adiós
Chilpancingo, Gro.- (IRZA).- El cuerpo del alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, fue sepultado este lunes en el “Cementerio de la Paz”, en esta capital.
La tarde del domingo el cadáver de Arcos Catalán fue encontrado sin vida y decapitado. La cabeza sobre el toldo de una camioneta marca Volkswagen tipo Robust, blanca, y el resto del cuerpo en el asiento del copiloto de ese mismo vehículo, en un callejón con esquina con la calle Moctezuma de la colonia Villa del Roble, al lado del hotel Moreli, al oriente de esta ciudad capital.
Durante el sepelio, Sandra Solís Peralta, esposa del edil que llegó al cargo por la coalición conformada por el PRI, PAN y PRD, convocó a la población a hacer suya la “bandera de la paz” que impulsó Alejandro Arcos.
Ante más de 200 personas, Solís Peralta agradeció a la población que votó por la fórmula que impulsó su esposo y que lo llevaron a cumplir el sueño de toda su vida: “ser el mejor presidente” de este municipio.
Alejandro Catalán Solís, hijo del alcalde perredista, dedicó también unas palabras a su padre, recordó: “yo siempre le decía: ‘papá, no quiero que te mueras’”. Conmocionado, agregó: “…sólo quiero decir: papá, te amo y siempre estaremos juntos”.
Apenas el pasado 30 de septiembre, durante la ceremonia de toma de protesta, donde Alejandro Arcos aseguró que su gobierno sería “teocrático”, cercano a Dios, dedicó emotivas palabras a su esposa y a su hijo.
A Sandra Solís le dijo: “al amor de mi vida, a mi amada esposa, ¡gracias, Sandy, por esta gran familia que hemos construido. Gracias por caminar conmigo, de mi mano, junto a mí, este largo y complejo pero hermoso camino que es la vida”.
En esa ocasión también expresó: “…estoy seguro que con tu entrega y pasión haremos que Chilpancingo renazca con el amor, como ha renacido con el amor de nuestro hijo”.
Mientras que a su hijo le agradeció por su paciencia, y comentó que a Alejandro Catalán Solís no le gusta la política, pero sí servir a su pueblo atendiendo a niños con cáncer.
“Yo te digo hijo: claro que estaré siempre de tu lado para que logres tu sueño, como mis padres estuvieron conmigo. Caminaré siempre contigo. Gracias por tu paciencia, me has acompañado estos casi 10 años tolerante, prudente, receptivo, escuchando y también dándome consejos, yo te los daré toda mi vida, estaré siempre contigo”, agregó.
El sepelio del alcalde perredista ocurrió la tarde de este lunes culminado los funerales que iniciaron a las 07:00 horas con una misa de cuerpo presente en la parroquia del Barrio de la Santa Cruz. A las 11:00 horas se efectuó otra misa ahí mismo.
A las 15:00 horas partió el cortejo fúnebre a la catedral Asunción de María, donde se realizó una tercera misa de cuerpo presente. Más tarde, el féretro fue llevado a la sede del Ayuntamiento, acompañado por cientos de personas, de donde partió al “Cementerio de la Paz”, al este de esta ciudad.
El cortejo fúnebre“¡Justicia! ¡Justicia! ¡Justicia!”, fue el clamor ciudadano en el cortejo fúnebre del presidente municipal de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán.
Su cuerpo fue velado desde la 1:00 de la madrugada de este lunes en la iglesia del barrio de la Santa Cruz, luego, a las 7:00 de la mañana y a las 11:00 de la mañana se oficiaron misas de cuerpo presente.
Además de familiares, amigos y colaboradores, asistieron ex presidentes municipales, dirigentes y líderes políticos locales, especialmente del PRI, PAN y PRD, partidos que lo postularon en el pasado proceso electivo.
También asistieron simpatizantes y seguidores del edil perredista, quienes exhibieron cartulinas exigiendo paz y también demandando que la Fiscalía General del Estado (FGE) no deje impune el asesinato.
Con el grito unísono de “Justicia”, el cortejo fúnebre partió a las 2:15 de la tarde a la catedral de la Asunción de María, en el Centro de la ciudad, donde se efectuó otra misa de cuerpo presente.
Durante el paso del cortejo fúnebre por la avenida Juárez hacia el zócalo, desde la sede de la Sección 36 del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud, lanzaron rosas al paso de la carroza con el ataúd. Desde el edificio de la Comisión Estatal de Derechos Humanos salieron decenas de empleados que aplaudieron y gritaron ¡presidente, presidente! La misma actitud de afecto asumieron personas que laboran en el edificio Vicente Guerrero, así como hombres y mujeres que caminaban por la citada avenida, así como de diferentes comercios y paradas del servicio público.
Al finalizar la misa en la catedral, el féretro fue traslado a la sede del Ayuntamiento e ingresado a la planta baja del inmueble, acompañado por cientos de personas que prácticamente llenaron la explanada de la plaza cívica Primer Congreso de Anáhuac.
Desde esta mañana, en el acceso a la sede edilicia, la que da a la plaza cívica, ciudadanos encendieron veladoras y las colocaron en forma de cruz, además, una fotografía del edil con arreglos florales y un moño negro en señal de duelo.
Cuando retiraban el féretro para trasladarlo al Cementerio privado de La Paz, llegó a la explanada de la plaza cívica, la ex alcaldesa Norma Otilia Hernández Martínez, acompañada por su esposo, Diego Omar Benigno González, ex funcionarios de su administración y varios escoltas.
Al salir de la explanada el cortejo fúnebre, la muchedumbre le gritó a Norma Otilia: “!Fuera, fuera!”, en rechazo de su presencia, varias mujeres luego le gritaron: “!Asesina!”, “!traidora!”, “!hipócrita”.
Luego fue arropada por las ex diputadas locales del PRI, Verónica Muñoz Parra y del PAN, Guadalupe González Suastegui, quienes la acompañaron en su trayecto a su camioneta que estaba estacionada en la calle Abasolo. En su andar apresurado, a la altura del Palacio de la Cultura, la abordaron reporteros y cuando le preguntaron si tenía miedo debido a que Alejandro Arcos había sido asesinado, respondió que “yo no he tenido ninguna amenaza”. Precisamente contestaba cuando de nuevo le gritaron “¡fuera, fuera”.
Luego la alcaldesa pidió que el crimen de Alejandro Arcos Catalán sea atraído por la Fiscalía General de la República y que se esclarezca. Reiteró que ella no tiene ninguna investigación en su contra por presuntos vínculos criminales.
Comentó que se enteró del asesinato de Alejandro Arcos la noche del domingo; dijo que había salido de Chilpancingo el fin de semana para hacer unas compras.
Arcos Catalán fue asesinado seis días después de haber rendido protesta como presidente municipal, cuya ceremonia de asunción, se efectuó el 30 de septiembre en el auditorio “José Inocente Lugo” del Palacio Municipal.
El viernes 27 de septiembre fue asesinado el ex coordinador de la Unidad de Fuerzas Especiales de la Policía Estatal, Ulises Hernández, quien sería designado secretario de Seguridad Pública del gobierno de Alejandro Arcos.
Y el jueves 3 de octubre fue asesinado Francisco Gonzalo Tapia Gutiérrez, secretario general del Ayuntamiento, cuatro días después de iniciada la actual administración municipal.