Cuauhtémoc Rea Salgado
ATOYAC. Otro adolescente de nombre Andrik fue anexado a petición de sus familiares, debido a que se encontraba enviciado en el popular juego para celular Free Fire y ya mostraba una actitud agresiva con sus padres.
La policía comunitaria de El Cayaco acudió al domicilio del menor en este municipio -nos reservamos el lugar, a petición de la familia-, para auxiliar a una mujer que estaba desesperada con su hijo. El menor fue sorprendido en su cama cuando juagaba en su celular, por lo que de inmediato fue sometido, ya que puso resistencia.
Hartos de la actitud de Andrik, quien agredía a su madre, porque lo regañaba que pasaba muchas horas jugando el juego que está de moda en celular, dormía pocas horas y se negaba a estudiar o conseguir trabajo, decidieron pedir el apoyo de la autodefensa.
Los familiares señalaron que a raíz de una publicación que vieron en este periódico el pasado 2 de diciembre, donde otro jovencito había sido anexado por sus familiares por tener el mismo problema de adicción a los videojuegos, decidieron contactar a la policía suburbana para que actuara con el adolescente.
Andrik estará anexado en el centro de rehabilitación “Cayaco Anexo al Extremo”, donde lo ayudarán a que supere su adicción a los videojuegos, catalogado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una enfermedad mental.
Los encargados del centro, llamaron a los padres de familia de Atoyac, Tecpan, Coyuca de Benítez y San Jerónimo que tengan este problema con sus hijos, aúnque sean menores de edad, que los contacten para poder ayudarlos a superar sus adicciones.