Lilia Arellano
*Narco imponente y
agradecido
*Inaceptable reacción de
las fuerzas armadas y la Guardia
*Durazo y Sandoval deben
renunciar; culpables y confesos
Nadie les ha levantado un solo falso; ellos, los integrantes
del gabinete de seguridad hablaron de sus errores, de las fallas, de la nula
inteligencia existente para combatir a las mafias, a las del narco, a las de la
trata de blancas, a los extorsionadores, a las dedicadas al secuestro o a la
venta de protección. No se necesitó de críticas ni de opiniones de opositores y
si partimos de la “confesión” del titular de la Defensa Nacional, nada más
puede agregarse. Lo registrado en Culiacán, Sinaloa, no tiene antecedente
alguno ni en relación al uso de armas en calles y avenidas de la capital
estatal como tampoco en la reacción gubernamental y menos aún en la actitud y
el silencio rodeando a quien gusta de hablar a diario de todos los temas apenas
canta el gallo. Va corriendo el telón y surgen peticiones ya no de regresar la
seguridad sino de correr a quienes han hecho pública su incapacidad.
Alfonso Durazo, secretario de Seguridad, y Luis Cresencio
Sandoval, titular de la Defensa, deben renunciar tras haber evitado la
detención de Ovidio Guzmán López, “El Ratón”, hijo de Joaquín “El Chapo”
Guzmán, luego de una jornada de violencia en Culiacán, Sinaloa, con saldo de
ocho muertos, 51 fugados del penal de Aguarato, vehículos quemados, autos
policiales abandonados y la presencia de auténticas patrullas criminales en
varios puntos de la entidad. Esa y no otra es
la exigencia de diversos sectores de la población a través del poeta
Javier Sicilia, fundador del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad,
quien aseguró el proceso de pacificación prometido por el presidente Andrés Manuel
en campaña ha fracasado. Sin embargo, sólo hay justificaciones, todos se
mantienen en sus puestos, después del niño ahogado, intentan tapar el pozo, con
el envío de más militares a Sinaloa, y buscan culpables en mandos medios. Pero
el impacto negativo a la imagen del país es irreversible en el corto plazo,
tanto para la captación de inversiones como para la atracción de turistas.
El titular del Ejecutivo federal reveló el gobierno de
Estados Unidos pidió la captura de Ovidio Guzmán López, quien contaba con orden
de extradición, por lo cual elementos del Ejército mexicano implementaron el
jueves un operativo en Culiacán, Sinaloa, para arrestarlo, pero… el operativo
falló. Justificó la decisión tomada de liberar a Guzmán López marca una
diferencia en el país. “… había una orden de detención de un presunto
delincuente famoso pero hubo una reacción de esta banda y se armaron y se
estaba poniendo en riesgo la vida de mucha gente, policías, de servidores
públicos y de gente civil”, indicó López Obrador en Tlaxiaco, Oaxaca, donde insistió lo más importante de
su gobierno es la paz, tranquilidad y justicia. Los gobernadores de Chihuahua,
Javier Corral; de Veracruz, Cuitláhuac García, y el de Oaxaca, Alejandro Murat,
respaldaron la decisión del Presidente, y externaron su disposición de realizar
acciones coordinadas con la federación en caso de ser necesario. O sea, las
peticiones de Trump no requieren de la existencia de cargos y de comprobación
de delitos en México, se cumplen hasta sin orden de aprehensión, a las voz de
inmediatamente y cómo sea ¿eso es para quedar bien? Después del desfiguro tal
vez el magnate gringo se arrepienta de andar pidiendo favores y utilizar a
terceros, por lo tanto pudiéramos ver en el futuro la actuación directa de la
DEA y el FBI.
Tras salir de una reunión con legisladores en el Senado,
Javier Sicilia declaró: “No sólo Durazo, sino quien estaba detrás de Durazo
dirigiendo el operativo, suponiendo éste sí sabe, porque Durazo no sabe, debió
de haber una simbiosis. Los dos deberían de irse, nos pusieron en una situación
muy grave a la nación y al Estado”, manifestó el poeta, quien recalcó: “Miren
el desastre. Ni atención a víctimas ni un proceso de pacificación correcto
porque no se ha tejido una política sistemática y porque no se ha tomado en
cuenta como prioridad de la nación. Olvidemos el aeropuerto, olvidemos Dos
Bocas, olvidemos tanta cosas, la prioridad de la nación, y lo reconoció el
presidente, es la paz y la justicia de este país (…) sin eso, todo lo demás
está roto, está muerto y no sirve para
nada”.
Sicilia llamó a López Obrador a reconsiderar su estrategia y
recordó “yo siempre he estado en contra de que el Ejército esté en las calles,
pero si lo sacaron, y hay un enfrentamiento de esta gravedad, que es una
guerra, dejar humillarse por el crimen organizado al Ejército, me parece
deleznable”.
Si los soldados, los marinos, las policías no se enfrentan a
los delincuentes ¿quién lo hará? Es de suponer todos ellos han sido entrenados
para hacerle frente a esta y a muchas otras situaciones y si su respuesta es
darse la media vuelta señalando es para proteger la vida de los ciudadanos
debemos aceptar es por esa actitud que estamos como estamos, nos han dejado a
todos, no solamente a los de Culiacán expuestos a la delincuencia.
Mire su entorno: las ventanas lucen barrotes, un buen número
de viviendas cuentan con doble puerta y tres chapas, se transita de la casa al
trabajo o a la escuela sin hacer paradas, adolescentes y hasta niños cuentan
con un celular para reportarse permanentemente con sus padres, hay doble
cortina en los comercios, las tiendas despachan después de las 9 de la noche a
través de una ventanilla al igual que las farmacias. Los mexicanos sobrevivimos
en “prisión domiciliaria” y ni para donde huir porque, curiosamente le pagamos
a las guardias fronterizas, a quienes impiden crucemos a otro territorio ya sea
al Norte o al Sur.
A su vez, el dirigente del PRD, Ángel Ávila, llamó a López
Obrador a reconocer su estrategia para enfrentar el narcotráfico ha fracasado.
“No le echemos la culpa de la situación de inseguridad, de violencia y de la
fuerza del crimen, sí lo heredó de gobiernos pasados, pero sí lo
responsabilizamos de la mala estrategia para enfrentar a estos narcotraficantes
(…) Estamos ante un Estado fallido y el gobierno debería reconocer esto,
debería ser humilde y aceptar que su estrategia de abrazos y no balazos, de
acusarlos con las abuelitas, el fuchi-guácala no ha funcionado y necesita
cambiarlo”.
Sobre la liberación de Guzmán López, Ávila sostuvo el presidente
estaba obligado a no negociar. “No puede entrar en una negociación con
criminales, porque entonces la señal es que estamos ante un Estado débil. No se
debió haber negociado. La protección de los ciudadanos debió hacerla desde que
se planeó el operativo, pero por lo que vemos ni siquiera hubo planeación”,
indicó y consideró es necesario que López Obrador sea más abierto para que
especialistas de todos los órdenes ayuden a construir una verdadera estrategia
contra el crimen.
Para el PAN, la liberación de Ovidio Guzmán muestra que
México es un estado fallido y que el gobierno se sometió a la delincuencia.
Laura Rojas, presidenta de la Cámara de Diputados, resaltó la capacidad de
respuesta del crimen organizado a las instituciones de seguridad en Culiacán “fue
una reiteración de lo que ya sabemos que sucede en el país, que no es nuevo,
esta capacidad de fuego, este poder que tienen las organizaciones criminales, y
al mismo tiempo esta limitación que mostró el Estado mexicano para poder
hacerles frente”. Para AMLO, lo malo no son las expresiones de sus opositores
políticos sino la opinión de la gente, el miedo de saberse expuestos y sin un
gobierno al frente para evitar siga la delincuencia apoderándose del territorio
nacional, imponiendo autoridades, financiando campañas, etcétera.
Durante una conferencia de prensa en la Ciudad de México,
José Luis González Meza y Juan Pablo Badillo Soto, presuntos abogados de “El
Chapo” Guzmán, agradecieron a López Obrador y a Durazo y Sandoval la liberación
de “El Ratón”, la cual fue confirmada a las 20:30 horas del jueves, tras cinco
horas de estar en interrogatorio. De acuerdo a la versión de los litigantes, la
detención fue en una vivienda del Fraccionamiento Tres Ríos, sin que el hijo de
“El Chapo” fuera golpeado, amenazado o amedrentado por elementos castrenses. La
jugada violenta aún se desconoce si provino de Joaquín Archivaldo desde los EU
al haber demostrado en ocasiones anteriores hasta donde llega su poder y cuáles
son las formas utilizadas para defender a su descendencia.
Varias horas después de registrarse el enfrentamiento a
balazos y quema de autos tras la captura y posterior liberación de Ovidio
Guzmán, en Culiacán, Sinaloa, se observaban unas camionetas, camiones, tráilers
y autos calcinados en múltiples puntos, incluso a unos metros de la Fiscalía
General del Estado. Eran visibles fachadas con impactos de bala y castillos
percutidos en el piso. El desastre fue limpiado por cómplices de los propios
narcotraficantes y personal municipal y estatal. ¿Quién giró instrucciones para
obligar a los criminales a limpiar todo el desorden causado? ¿También esos
grupos delincuenciales se encargarán de las viudas, de los hijos, de darles
sepultura a los muertos? ¿Sabrán ahora los miembros del Ejército que deben
exponerse para después pedir disculpas y liberar a los detenidos?